Luego de quedar fuera del Mundial de Rusia, la Selección Chilena sintió el golpe. Y no era para menos, ya que no sólo dejó escapar la chance de disputar su tercera cita planetaria consecutiva, sino que también quedó sin el técnico Juan Antonio Pizzi, reabriendo el debate acerca del fin de la "Generación Dorada".

Y para analizar el duro momento que vive la Roja, el actual estratega de Cobreloa, José Sulantay, es voz autorizada, ya que fue él quien dirigió a varios de los seleccionados en sus primeros mundiales sub-20 en Holanda (2005) y Canadá (2007), torneos en los que se forjaron los pilares del grupo que hizo historia al levantar la Copa América 2015 y la Copa América Centenario en 2016.

"En el fútbol se gana, se empata o se pierde y hoy nos tocó perder. Pasaron muchas cosas para que esto sucediera y tampoco debemos ser tan triunfalistas ni fatalistas. Esto se perdió en aspectos bien especiales, como haber perdido aquí con Paraguay y de inmediato con Bolivia, que no estaba en ningún cálculo y con lo que no habría pasado ningún inconveniente en este último partido. Pero las cosas no se dieron así, después vinieron las lesiones, un mediocampo a medias, entonces se sumaron varias cosas para que el equipo quedara eliminado", comentó.

- Pizzi asumió la responsabilidad por quedar fuera del Mundial. ¿Es correcto culparlo a él?

- Nunca echaría la culpa al técnico si el equipo es campeón o si se perdió, porque aquí somos todos. El entrenador dirige, busca caminos y se los entrega a sus jugadores, pero los que juegan son ellos, no los entrenadores, entonces aquí no hay un solo culpable. Y ni siquiera culpable, porque eso sería como estar preso. Aquí hay responsables, diría yo.

- En la última nómina destacó la ausencia de jugadores como Marcelo Díaz y Cristopher Toselli. ¿Qué le pareció eso?

- No puede jugar un futbolista como Charles Aránguiz, que venía lesionado, saliendo de un desgarro. Jugó a medias y un tiempo, entonces de ahí partimos mal. En el partido anterior, y menos mal que ahora subió, (Pedro Pablo) Hernández venía en las mismas condiciones. Y ya no estaba Marcelo Díaz porque también venía bajando, no sólo en la Selección, sino que en su equipo en Europa no jugaba, entonces son cosas lógicas los cambios que se hicieron. Ahora, todos lo recargan en Jorge Valdivia, pero es inconsistente, juega por momentos, y para que juegue tienen que andar bien los que tiene alrededor, y para qué hablar de Vidal, que tiene cosas muy buenas y otras muy malas.

- ¿El equipo perdió la humildad?

- Claudio Bravo empezó a hablar de humildad después de que se demostró que no lo eran, sino que estaban mucho más allá de la humildad, por sobre todo eso. También se cometieron errores en que cada jugador, con su crecimiento personal, podía entregar más. No lo hicieron con mala intención, pero ahí murió el sentido de equipo, que era la fuerza de esta selección.

- ¿Existe una lucha de egos?

- Eso lo creó la prensa y los jugadores se dejaron llevar por eso, incrementando su ego a niveles que no corresponden. Eso también lo dije una vez y después aparece como que estuviera criticando. Vi en los diarios una encuesta de cuál es el mejor jugador, si Gary Medel, Arturo Vidal o Alexis Sánchez, entonces están haciendo crecer los egos que no corresponden en una selección donde todos tienen que aportar en beneficio del equipo, no en beneficios personales.

- ¿Es este el fin de la generación dorada?

- Estos jugadores están llegando recién a los 30 años y yo creo que entre los 25 y 30 años está la mejor edad para que un futbolista esté completo. Y llegar a los 30 es que uno vislumbre que va a haber una baja, y ahora la baja ha sido más de lesiones y de algunos jugadores que no estaban en sus mejores niveles jugando en Europa, entonces esa sumatoria fue la que, para mí, hizo que el equipo no hiciera una mejor campaña.

- Pero no hay un recambio.

- Esa es otra cosa que me ha dejado preocupado porque se habla de recambio, pero resulta que llaman a jugadores que están por sobre los 35 años, como Mauricio Pinilla, Esteban Paredes y el mismo Valdivia, y no hablo de que sean malos jugadores, sino que de la edad. Cómo va a haber recambio, no puedo entender que haya un recambio. Esto ya se debería haber estado trabajando con una selección joven que recorriera el mundo jugando amistosos con selecciones fuertes para ir formando lo que hicimos nosotros, a jugadores en todo sentido.

- ¿Es el momento de Manuel Pellegrini o Eduardo Berizzo para llegar a la Selección?

- No he pensado en eso, porque acá se toman determinaciones que nadie piensa de repente. Lo que no creo que pase es que venga Pellegrini porque lo más probable es que aquí, por ser chileno, lo reprueben en todo lo que haga. Acá se le perdona a todos los extranjeros, pero a los chilenos los matan altiro. Creo que con todo lo que ha ganado en Europa, China o donde esté, no tiene que venir a morir con nuestra gente, que tiene todas las condiciones a personas que sobresalen.

- Tiene que llegar alguien que pueda controlar este camarín.

- El entrenador de una selección tiene que hacer eso, esa es una de las prioridades. Si no se controla un camarín, no hay nada que hacer. El grupo es muy bueno, pero se dejó llevar. Aquí se notaba que había dos o tres jugadores que daban opiniones que se cumplían, opiniones que no correspondían, como irse a las casas antes de entrenar, entonces por eso comparo con los uruguayos, que son en ese sentido extraordinarios. Son humildes, grandes jugadores, guerreros, luchadores y tienen cariño por la camiseta que está por sobre todas las cosas.

- ¿Cree que se podrá dar vuelta la página rápidamente?

- Claro, no se acabó el mundo, sólo no se fue al Mundial.

"La prensa creó una lucha de egos en la Selección y los jugadores se dejaron llevar por eso, incrementando su ego a niveles que no corresponden""

"Nunca echaría la culpa al técnico si el equipo es campeón ni si se perdió, porque aquí somos todos""