Ahora no se habla de salud, de educación, de pensiones, de resolver el dolor de cabeza en que se han transformado las contribuciones para cientos de miles de chilenos. Ahora hablamos de reivindicaciones feministas, llegando incluso a la insensatez de exigir un lenguaje inclusivo. El colmo de la ridiculez.
La solución para encauzar la deteriorada agenda política es que el Gobierno active legislativamente proyectos de ley que apunten a solucionar la vida de los chilenos. De esta forma se acabarán rápidamente estas temáticas que rayan en la irracionalidad y que sólo buscan agitar políticamente sobre todo a comunidades educativas que están cayendo en demandas y acciones sinsentido, perjudicando a miles de estudiantes y sus padres.
Visión de desarrollo
Para la izquierda es cuestión de más estatismo, pese a que la experiencia internacional demuestra lo contrario.
Para los de centro, es principal que el centro social tenga estabilidad y bienestar, al amparo del paternalismo estatal.
La centroderecha plantea que nuestro progreso y desarrollo dependen de nuestro trabajo productivo, cuyos frutos lleguen a todos.
¿Qué frena nuestro progreso? Nos ahogan la politiquería conflictiva, así como asociaciones de funcionarios y otros protegidos que imponen sus exigencias a costa de la mayoría ciudadana. Bastaría un auténtico líder para poner término a esos obstáculos. Entretanto, continúan debates torcidos y discusiones inútiles, en vez de los acuerdos que necesitamos.
Juez Pfeiffer
Es un axioma que todos los jueces se conocen por la calidad e imparcialidad de sus fallos. Al juez Pfeiffer nadie lo podría haber calificado de presentar jurídicamente un determinado sesgo político, económico o social en sus fallos, es más, todos sus dictámenes eran muy respetados por defensores, acusadores y colegas, debido a la imparcialidad, transparencia, claridad, precisión y concisión en la fundamentación de sus veredictos.
La verdad es que, sin duda, reunía todos los méritos para ser elegido ministro de la Corte Suprema, pero no lo consiguió a pesar de haber estado en quinas desde el año 2001 y en ocasiones con la votación del Pleno de la Corte Suprema. Pero su rigor jurídico e independencia de sus dictámenes le pasó la cuenta. Es así como la ex Concertación y fundamentalmente el Partido Socialista, rechazó su designación como supremo. Sin duda, por no ser un juez no garantista o los que el ministro de Justicia llamó izquierdistas.
La grave injusticia profesional cometida con el juez Pfeiffer es un fundamento más para cambiar el denigrante proceso por el cual deben pasar los excelentísimos jueces candidatos a la Suprema, donde su calidad profesional, que no está en duda, ya que sus pares lo presentan como el mejor de los mejores, no es relevante, sino si sus fallos y opiniones aplaudidas por el poder político de turno, en su caso por la izquierda.
Estatua
No obstante aquello, quienes nos sentimos representados por las ideas de derecha no pedimos que él sea "borrado" de la historia, sino, simplemente, que se retire su estatua de la Plaza de la Constitución por cuanto su persona significa el inicio del capítulo más triste y oscuro de un pueblo que aún sangra por la herida encostrada en el odio marxista, que ataca y tiene por objeto anular a toda persona que defienda las ideas de la libertad y la dignidad.
Conflicto por el agua
Instalado el gobierno de Sebastián Piñera, era imposible pensar que la oposición se iba a quedar de brazos cruzados. Había que ingeniárselas para generar temas polémicos, agrandar aquellos sin mayor importancia, poner en agenda pautas populistas y, mejor aún, sacar a la calle a quienes, como siempre, representan a minorías, pero cuyas acciones tienen un impacto mediático.
Eduardo González K.
Respecto a cómo salir de nuestro subdesarrollo, en la clase política hay posiciones disímiles.
Patricio Farren C.
Ha fallecido un juez por excelencia, don Alfredo Pfeiffer Richter, quien durante más de 47 años en el Poder Judicial supo poner al servicio de la justicia la plenitud de su capacidad profesional, su excelente preparación jurídica y una profunda dedicación al estudio de cada caso que le correspondió juzgar.
Dr. Jaime Manuel Ojeda Torrent
Las futuras generaciones tienen el derecho de conocer el legado de aquellos que lucharon por restablecer la democracia y restaurar institucionalidad en Chile como, sin duda, lo hizo Jaime Guzmán, para que puedan diferenciar e identificar a quienes llevaron al país a la división política y social más grande de nuestra historia nacional. Si alguien, efectivamente, nos quebró fue Salvador Allende y su nefasto gobierno de la Unidad Popular.
Rodrigo Araya Chandía
La fiscalización del uso del agua en Petorca debiera replicarse con fuerza en todo el país. Comunidades nortinas, por ejemplo, se han quedado sin el vital líquido por la actividad minera y ninguna autoridad, organismo estatal y parlamentarios levantan un dedo por ellos, condenando a esos pueblos a la desaparición.
Bernardo Soto L.