Tras el pitazo final del encuentro por el tercer y cuarto lugar de la Copa del Mundo, los flashes y los micrófonos buscaron a quien era la figura del encuentro.

Y es que el atacante Eden Hazard, además de concitar la atención por su brillante actuación en el duelo, poniendo la segunda y definitiva cifra en el marcador para el seleccionado de Bélgica, también tenía algo que decir sobre su futuro futbolístico.

"Después de seis años maravillosos podría ser tiempo de descubrir algo diferente. Después de esta Copa del Mundo puedo decidir si quiero quedarme o irme, pero Chelsea tomará la última decisión, si quieren dejarme ir. Ustedes saben mi destino predilecto", sentenció el goleador, en alusión a los rumores que lo sitúan en la órbita del Real Madrid, tras la partida de Cristiano Ronaldo.

Hasta hoy, se habla de una operación que rebasa los 150 millones de euros para que los merengues se hagan con los servicios de Hazard, quien también está en carrera por ser el mejor jugador del Mundial.

Sin embargo, el belga también analizó la llegada del entrenador italiano Maurizio Sarri a su actual club, manifestando que "tendremos que trabajar duro, con un estilo italiano que tenía Antonio Conte también, pero Dries Mertens me dijo que Sarri era un muy buen entrenador."

Luego de la derrota 2-0 ante Bélgica y el cuarto lugar en la cita planetaria, el único consuelo que quedó en el cuadro inglés fue la posibilidad de quedarse con el goleador de la Copa del Mundo. A pesar de estar apagado en los últimos partidos, el delantero Harry Kane tiene la primera opción para ganar la Bota de Oro, con seis tantos. Esto luego de que Romelu Lukaku, su escolta con cuatro goles, saliera reemplazado sin convertir en el encuentro de ayer. Ahora, el más cercano perseguidor del "Huracán" que sigue en carrera es el francés Antoine Griezmann, con tres anotaciones.

La lucha por el tercer y cuarto lugar de la Copa Mundial de la FIFA, siempre cuenta con el aura negativo de ser el encuentro "que nadie quiere disputar".

Sin embargo, ayer en el estadio Krestovski de San Petersburgo, ese sentimiento se apoderó de sólo uno de los dos equipos que quedaron a las puertas de disputar una final.

Y es que Bélgica, aun frustrada tras su caída con Francia en la semifinal, salió con todo a disputar un puesto que, a la postre, de todas maneras significaba el mejor resultado en la historia de los "Diablos Rojos".

La velocidad con la que el cuadro belga se apoderó de la posesión y del dominio del juego pasmó hasta al más optimista de los fanáticos británicos. A los tres minutos del duelo, el portero Thibaut Courtois puso en acción una jugada que culminó en los pies de Nacer Chadli, que dominó la banda izquierda y centró a los pies de Thomas Meunier.

El jugador del París Saint-Germain no dudó a la hora de definir ante un Danny Rose que no llegó a cubrirlo y un Jordan Pickford que sólo atinó a saltar ante el tiro que marcó el 1-0.

Ante el golpe, la oncena inglesa no supo reaccionar de manera inmediata. De hecho, tomó mucho tiempo un atisbo de recuperación en el nivel de juego de los dirigidos por Gareth Southgate.

Esta llegó recién en el segundo tiempo, cuando el elenco de los "Tres Leones" se adueñó del balón y encontró algunos espacios en tres cuartos de cancha que le dieron movilidad a Harry Kane y al ingresado Marcus Rashford.

No obstante, la más cercana que tuvieron sucedió a los 70' gracias a una jugada coordinada entre el propio Rashford y Eric Dier, con una pared que dejó sólo a este último en el área belga. De no ser por la providencial aparición de Toby Alderweireld en la línea del arco, hubiese sido el empate para los ingleses.

Sin embargo, Bélgica continuó haciendo estragos con su verticalidad ofensiva hasta los 82', cuando un pase de Dries Mertens dejó a Eden Hazard a merced del pórtico inglés. Al final, decretó un 2-0 con justicia, donde el que más buscó se quedó con su primer podio en una Copa del Mundo.

Celebración y consuelo

Una sensación agridulce dejó el encuentro en el plantel inglés. De hecho, el técnico británico Gareth Southgate no dudó en decir que el cuadro británico fue de más a menos en un certamen donde estuvieron a veinte minutos de situarse en la segunda final de su historia futbolística.

"Contra los mejores equipos nos quedamos cortos, pero hemos tenido una maravillosa aventura y algunas experiencias que harán que este grupo de jugadores y personas sea realmente bueno de cara al futuro", señaló Southgate, agregando que "no podría pedir más de ninguno de los jugadores hoy (ayer) o durante las siete semanas que hemos trabajado juntos".

Desde la vereda de los ganadores, el portero Thibaut Courtois oscilaba entre la alegría y cierta resignación, declarando que "quisimos el primer lugar, pero voy a colocar la medalla de bronce en mi salón de trofeos, ahora estamos un poco decepcionados, pero en unos años veremos que es una medalla muy especial".

El meta del Chelsea, además, señaló que un posible premio al mejor portero del certamen no es algo que haya perseguido en este torneo.

"Por lo general el nombramiento al mejor arquero es para uno de la final, pero por eso mismo no será algo que me afecte", sentenció.

"Quisimos el primer lugar, pero colocaré la medalla de bronce en mi salón de trofeos. En unos años veremos que es especial".

Thibaut Courtois, portero de Bélgica"

Doce meses completos de sueldo pediría el técnico Jorge Sampaoli para dejar de manera definitiva la banca de Argentina. La propuesta, que asciende a dos millones de dólares, contraviene la primera oferta de la Asociación de Fútbol Argentino (AFA) que ofreció pagar su sueldo hasta fin de año como compensación, considerando que el técnico sostenía un contrato que duraba hasta el Mundial de Qatar 2022 y con una cláusula de salida a partir de la Copa América 2019. De todas formas, hoy el destino del oriundo de Casilda estaría sellado, y sólo faltaría que se hiciera oficial su salida.