Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Opinión
  • Actualidad general
  • Deportes
  • Clasificados
  • Cartelera y Tv
  • Vida Social
  • Espectáculos

El uso abusivo del alcohol mata a más de tres millones de personas cada año

INFORME. Estudio de la Organización Mundial de la Salud señala que casos representan el 5% de decesos por enfermedad. EPIDEMIA. Casi 100 personas han muerto en la República Democrática del Congo.
E-mail Compartir

El uso abusivo del alcohol mata anualmente a más de tres millones de personas en el mundo, según un estudio presentado ayer por de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El "Informe Mundial sobre Alcohol y Salud 2018" subraya que esas muertes representan el 5% de todos los decesos por enfermedad en el mundo y que tres cuartas partes de los fallecidos son hombres.

De todas las muertes relacionadas con el alcohol, el 28% fueron a causa de heridas provocadas en accidentes de tráfico, automutilaciones o violencia interpersonal; el 21% a causa de desórdenes digestivos, 19% a causa de enfermedades cardiovasculares y el resto a causa de enfermedades infecciosas, cánceres y desórdenes mentales, entre otros.

El informe revela que a pesar de varias tendencias positivas en la prevalencia de ebriedad, que el estudio denomina "prevalencia de episodios de alto consumo" y define como una ingesta de al menos 60 gramos o más de alcohol puro al menos en una ocasión en los últimos 30 días, las cifras siguen siendo demasiado elevadas.

"Es inaceptable un consumo excesivo y nocivo tan generalizado y que provoca unas tasas tan altas de enfermedad y muerte", afirmó en una teleconferencia el coordinador de la unidad de abuso de substancias de la OMS, Vladimir Poznyak.

"Los datos muestran claramente que o hay un cambio significativo o no cumpliremos con lo que los propios gobiernos han establecido", añadió.

Los Estados miembros de la OMS se han fijado el objetivo de alcanzar una reducción del consumo global de alcohol en un 10% para 2025 con respecto a los índices de 2010.

Además, la OMS siempre ha incidido en que la reducción de la ingesta nociva de alcohol ayudará a lograr algunos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en particular los relativos a la salud materno-infantil, las enfermedades infecciosas y las enfermedades no transmisibles.

Globalmente, 237 millones de hombres y 46 millones de mujeres sufren de desórdenes relacionados con el consumo de alcohol, con la mayor prevalencia entre hombres y mujeres en la región europea (14,8% y 3,5%, respectivamente) y la región de las Américas (11,5% y 5,1%).

Los desórdenes son más comunes en países de altos ingresos, especifica el texto, algo que subrayó Poznyak, quien recordó que, de hecho, cuando hay crisis económica, el consumo de alcohol se reduce.

Se estima que unos 2.300 millones de personas en el mundo son bebedores comunes, y que más de la mitad de la población de la región de las Américas, Europa y el Pacífico occidental consumen alcohol asiduamente.

La región europea de la OMS -que comprende no sólo a la UE sino a toda Europa oriental, incluidas Rusia y las antiguas repúblicas soviéticas- tiene el consumo "per cápita" más alto del mundo: 9,8 litros en 2016, aunque representa una caída considerable respecto a los 11,2 litros en 2010.

No obstante, las estimaciones apuntan a que el consumo crecerá mundialmente, especialmente en el Sudeste Asiático, en el Pacífico occidental y en las Américas.

Más de una cuarta parte (27%) de los jóvenes de entre 15 y 19 años del mundo son bebedores.

Un porcentaje que crece considerablemente en Europa en la misma franja de edad hasta el 44%, seguido de las Américas y del Pacífico occidental (ambos, 38%).

El estudio subraya que las encuestas escolares revelan que el consumo de alcohol empieza en muchas ocasiones antes de los 15 años, "con muy pocas diferencias entre niños y niñas".

El consumo medio de alcohol diario en el mundo es de 33 gramos de puro alcohol, lo que equivale a 2 vasos de vino, una cerveza grande o dos sorbos de alcohol fuerte.

Globalmente, el 45% del alcohol consumido es alcohol fuerte, seguido de la cerveza (34%) y el vino (12%).


ébola en país africano deja 155 niños huérfanos o separados de sus padres

La epidemia de ébola en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC), que se ha cobrado ya 97 muertes probables, ha dejado a 155 menores huérfanos o separados de sus padres, informó ayer el Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef).

"La cifra incluye a los niños que han perdido por el ébola a alguno de sus padres, a ambos o a su tutor, así como aquellos que se han quedado solos porque sus padres están en cuarentena en centros de tratamiento", dijo Unicef en un comunicado.

La agencia de la ONU alertó de que los niños huérfanos por ébola suponen un estigma para los menores, a los que la enfermedad afecta mucho, ya sea directamente o indirectamente, de forma psicológica.

"La pérdida de un padre es una experiencia perturbadora para un niño", estimó el representante de Unicef en la RDC, Gianfranco Rotigliano, quien añadió que, "mientras la epidemia siga, se mantendrán los esfuerzos para garantizar el bienestar físico, emocional y psicológico de los niños".

La actual epidemia de ébola, que afecta a las provincias nororientales de Kivu del Norte e Ituri, deja ya 97 muertes probables -de las cuales 66 han dado positivas por la enfermedad- y 143 casos (112 confirmados y 31 probables).

El peor de la década

En los últimos días, las muertes están remitiendo y 39 personas se han curado ya de la enfermedad desde que se declaró el brote el pasado 1 de agosto, tan sólo ocho días después de que el ministro de Sanidad, Oly Ilunga, proclamase el fin del anterior brote en la provincia de Ecuador (noroeste).

Este brote se ha detectado en dos de las regiones con más conflictos del país y debido a este hecho, a la desconfianza de la población y la tardía detección se ha convertido en el peor de la última década en la República Democrática del Congo.

El virus del ébola se transmite a través del contacto directo con la sangre y los fluidos corporales contaminados, transmite fiebre hemorrágica y puede llegar a alcanzar una tasa de mortalidad del 90% si no es detectado a tiempo.

La peor epidemia conocida en el mundo se declaró en marzo de 2014, con primeros casos que se remontan a diciembre de 2013 en Guinea Conakri, desde donde se expandió intensamente a Sierra Leona y Liberia.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) marcó el fin de ese brote en enero de 2016, después de registrarse 11.300 muertes y más de 28.500 casos, aunque la agencia de la ONU cree que estas cifras podrían ser conservadoras.

"Es inaceptable un consumo excesivo y nocivo tan generalizado y que provoca una tasas tan altas de enfermedad y muerte"

Vladimir Poznyak

Coordinador de la unidad de abuso de substancias de la OMS"

del alcohol consumido es alcohol fuerte, seguido de la cerveza (34%) y el vino (12%). 45%

Salud