Katherine Escalona M.
En un clima de profundo dolor por la muerte de un lactante, se llevó a cabo ayer, en el Juzgado de Garantía de Villa Alemana, la audiencia de formalización del chofer que sería el único responsable del fatal accidente ocurrido la noche del martes en la autopista Troncal Sur, en el que también resultaron lesionadas otras cuatro personas.
El conductor, identificado como Ricardo Jara Silva (43 años), fue formalizado por los delitos de manejo en estado de ebriedad con resultado de muerte, manejo en estado de ebriedad causando lesiones graves, manejo en estado de ebriedad causando lesiones menos graves y por no haber prestado ayuda a las víctimas y darse a la fuga, ilícitos por los cuales el tribunal decretó la prisión preventiva mientras dura la investigación, que fue fijada en un plazo de 180 días.
Las penas por estos delitos, aseveró la fiscal jefe de Villa Alemana, María José Bowen, podrían sumar más de 10 años de cárcel. La persecutora explicó que "por no dar la ayuda necesaria y no detenerse, la pena parte en 3 años y 1 día y llega a 5 años; en el caso del delito por manejo en estado de ebriedad causando la muerte, la pena parte en los 3 años y un día de presidio, pero puede llegar a 10 años de cárcel".
Bowen precisó que "la Ley 18.216 establece una imposibilidad de acceder a ninguna pena sustitutiva, a lo menos durante un año desde el inicio de cumplimiento de la condena, que fue precisamente lo que se discutió hoy (ayer) en la audiencia".
Dos accidentes
En el tribunal se detalló que los hechos ocurrieron pasadas las 22 horas del martes, cuando Jara, quien manejaba un auto marca BMW a gran velocidad y en dirección a Viña del Mar, colisionó por alcance a un vehículo que transitaba por la ruta Troncal Sur, en Villa Alemana, cuyo conductor perdió el control y chocó con una barra de contención de la carretera.
En este segundo vehículo viajaba Katherine Castillo, madre del lactante fallecido, quien está internada con riesgo vital en el hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar. En tanto, sus otros dos hijos, también menores de edad, están hospitalizados con lesiones de diversa consideración, pero de menor gravedad.
Según quedó consignado en la audiencia de formalización, tras el impacto el imputado huyó del lugar, no prestó ayuda a las víctimas y luego, en Quilpué, colisionó a un segundo vehículo, que también tuvo daños. En este segundo caso, el conductor siguió a Jara y lo logró detener.
Así lo relató la fiscal María José Bowen, quien explicó que en el parte policial de Carabineros quedó establecido el primer accidente y que hubo una prueba clave, aportada por un testigo, para vincular ambos casos: la patente del auto involucrado, que se desprendió junto al parachoques.
"Hay la declaración de un testigo que ve el accidente protagonizado por el imputado, se percata que cae una parte del parachoque con la patente del automóvil que conducía el imputado y posteriormente se da a la fuga", afirmó Bowen.
Con esos antecedentes, precisó la persecutora, se dio aviso a Carabineros, quienes monitorearon el hecho y supieron de una segunda colisión. "El imputado choca nuevamente, esta vez en la comuna de Quilpué, y es perseguido por el conductor, quien lo retiene y da aviso a Carabineros, quienes en definitiva detienen a Jara en la comuna de Quilpué, no en Villa Alemana", explicó la persecutora.
Ebriedad
Cuando la persona del accidente de Quilpué detiene a Jara, afirmó la fiscal, se percata que el imputado está ebrio, lo que fue corroborado por Carabineros. "Se realiza un examen de Intoxilyzer, que es una prueba respiratoria que determina el alcohol en la sangre. De todas maneras, está pendiente ver el examen de sangre que se realizó en la asistencia pública. En la primera prueba registraba 1,68 gramos (de alcohol) por mil en la sangre", dijo Bowen.
"Mi familia está mal, destruida. De hecho, me tuve que escapar del hospital para verlos a todos, porque tengo a dos en la UCI"
Josué Santibáñez, Esposo y padre de las víctimas
Pesar en la familia: piden justicia
El marido de Katherine Castillo y padre de los menores involucrados, Josué Santibáñez, aclaró que lo único que espera la familia es justicia. Dijo que "mi familia está mal, destruida. De hecho, me tuve que escapar del hospital para verlos a todos porque tengo a dos en la UCI, a mi hijo mayor, a mi señora y a mi hija que la trasladaron a Quilpué. Mi señora está mal, me dijeron que estaba estable, pero está con ventilador mecánico y tienen que saber si va a responder a la operación". Tamara Núñez, en tanto, precisó que "mi hermana está en riesgo vital, estamos esperando a que ella dé luz. Esperamos que se haga justicia y pague".
