Cada año son cientos los estudiantes de otras latitudes que se radican una temporada en nuestra ciudad para cursar estudios superiores.
Las universidades de la zona, con sedes a lo largo de la región, hacen importantes esfuerzos por dar continuidad y acrecentar los programas de intercambio que atraen anualmente, según cifras del reporte SIES 2018 del Ministerio de Educación, a más de 2.100 jóvenes de todo el mundo.
Este volumen de estudiantes extranjeros muchas veces se ve amplificado por la presencia de familiares y amigos que los visitan durante su estadía en el país. De esta forma, su presencia en nuestra ciudad constituye un elemento vitalizador, tanto de la vida social y académica, así como de un sinfín de encadenamientos asociados a sus actos de consumo de bienes y servicios.
Una de las más claras conclusiones del recientemente realizado conversatorio "Arriba Valparaíso", organizado por la PUCV y El Mercurio de Valparaíso, dice relación con el consenso en la necesidad de un trabajo mancomunado de todos los actores de la ciudad para levantar la alicaída economía local.
Es evidente que la actividad de intercambio académico tiene una finalidad primera, cual es la obtención de nuevos saberes y la generación de redes profesionales y científicas que brinden mejores oportunidades de desarrollo. Sin embargo, una estrategia de atracción de más estudiantes extranjeros a la zona, no puede perder de vista el impacto económico que la presencia de estos "turistas de larga estadía y de propósitos específicos" tiene para la ciudad.
Las universidades de la región, casi en su totalidad, integran la plataforma país cuyo propósito es promover a Chile como destino para estudiantes extranjeros. Learn Chile es la marca país que han diseñado ProChile y 24 universidades nacionales con tal objetivo. Actualmente, de la región, la PUCV, la USM, la UV, la UVM, la U. Santo Tomás, Duoc UC e Inacap, forman parte de este esfuerzo asociativo. Este trabajo ha posicionado a Valparaíso como la segunda región con mayor presencia de estudiantes extranjeros, superado sólo por Santiago.
El trabajo mancomunado al que hemos sido autoconvocados en instancias como Arriba Valparaíso, debe procurar mejores condiciones para recibir a los estudiantes internacionales. Este quehacer debiera considerar aspectos relativos a la accesibilidad, a seguridad en zonas estratégicas, calidad de los servicios, variedad de la oferta cultural y recreativa, pero por sobre todo, poder contar con un entorno amigable con los jóvenes que buscan una experiencia de vida que va más allá de sus estudios.
De esta manera consolidaremos un espacio de apertura universitaria reconocida en el mundo, que nos distingue, y que hoy más que nunca podemos entender como un componente clave en la superación de los desafíos que tiene Valparaíso.