Luis Cabrera del Valle
Lo que hace un par de semanas parecía una quimera, hoy es una realidad: los dos triunfos en línea de Wanderers, unidos a empates y caídas de sus rivales, dejaron al Decano tres unidades por debajo del líder, Deportes La Serena, y dos más atrás de Cobreloa, el escolta del puntero.
Los porteños, además, deben enfrentarse en Playa Ancha con granates y naranjas, ante lo cual Miguel Ramírez saca cuentas alegres.
"Espero que la irregularidad ya haya pasado para nosotros, que estos dos triunfos los podamos mantener en el tiempo y repetir esa racha de triunfos que tuvimos el año pasado, que nos permitieron tener esa ilusión de subir en forma directa. Afortunadamente aún quedan partidos con los equipos que están más cerca nuestro y depende de nosotros, ya no dependemos de otros resultados, como pasó el año pasado", dice el entrenador caturro.
"Cheíto" coincide con el técnico de Santiago Morning, Luis Landeros, quien esta semana aseguró que la principal característica de los equipos de Primera B es la irregularidad. Sin embargo, trata de convencerse que esa etapa en la curva de rendimiento de su oncena ya fue superada.
"Hemos sido irregulares, sí, pero afortunadamente ahora hemos sido regulares y eso nos ha permitido seguir sumando, en cuanto a las individualidades, nuestro equipo ha tenido un alza notoria, y eso nos permite mejorar en lo colectivo y en los resultados", reflexiona el exzaguero de Colo Colo.
Cuando trata de explicar el alza en el juego de su equipo, Ramírez recurre al caso a caso: "Han servido mucho los rendimientos individuales, el buen nivel que está teniendo Luna, el nivel que está teniendo nuestro arquero, el gran nivel de nuestros stoppers, de Cuadra. Lo que está jugando Cuadra es muy distinto a lo que hizo en la primera parte del año, lo que está haciendo Matías Fernández es distinto a lo que hizo en la primera parte del año".
Pero así como el técnico destaca nombres, también marca distancias con los jugadores que no han aprovechado su oportunidad. Y el caso que pone como ejemplo es el de Matías Marín, quien era el elegido a principios de temporada como el juvenil que sumaría los minutos sub 20 que exige el reglamento, pero finalmente quedó fuera de la titularidad. Lo mismo ha pasado con el arquero suplente Elías Hartard, quien ni siquiera va citado.
"Los jugadores se ponen y se sacan solos, lo he dicho en reiteradas oportunidades y afortunadamente ellos lo tienen claro", sentencia el DT caturro.
Indisciplina
Con la misma claridad que utiliza para definir quiénes pasan por un buen momento en su equipo, Ramírez deja clara su postura respecto a los casos de indisciplina que se han registrado en su equipo.
El entrenador wanderino no cree que las faltas conductuales de los futbolistas se puedan "tapar" con buen rendimiento grupal. "Cheíto" más bien apunta a que los resultados positivos son producto de un camarín enfocado.
"Aunque tapes un acto de indisciplina, a la larga va a aparecer, se va a saber, el fútbol es muy pequeñito, en el fútbol se sabe prácticamente todo. Es muy difícil tapar actos de indisciplina. La disciplina para mí es fundamental, porque no hay un jugador más importante que el equipo y cuando se provocan actos que atenten contra la sana convivencia, contra el rendimiento del equipo y con el diario vivir, lógicamente que afectan lo colectivo", dice el campeón de la Copa Libertadores en 1991.
Como una especie de mensaje velado para quien necesite escucharlo, el DT afirma que "cuando uno sale de esa zona donde hay conflicto, el equipo se ve mucho más potenciado, cuando todos están remando para el mismo lado, todo se ve mejor aspectado para el futuro".
"Todo cuerpo técnico cuando asume en una institución explica cómo trabaja, cómo uno espera que sea el rendimiento dentro y fuera de la cancha, a veces eso se olvida, a veces eso no se entiende, a veces eso no se acepta, y los que no lo aceptan y no lo entienden, al final quedan de lado", explica Miguel Ramírez, insistiendo en que "cuando lo individual se pone por encima de lo colectivo, el grupo se tiene que hacer fuerte para corregirlo, y eso se ha logrado en esta última parte".
"Me siento más agradado que sorprendido por el rendimiento de jugadores como García y Soto"
Miguel Ramírez, DT de Santiago Wanderers
En defensa de
la línea de tres
El esquema de juego utilizado en las últimas fechas ha dejado conforme a Miguel Ramírez. La línea de tres en defensa tiene contento al entrenador, pero principalmente por el rendimiento de sus intérpretes. "Parte de la solidez es recibir menos goles en contra, afortunadamente nuestra línea de tres y el arquero se conoce hace bastante tiempo, se conocen en lo futbolístico y lo personal", dice el DT, añadiendo que "por la desgracia de las lesiones estamos jugando con dos stoppers que no eran stoppers, hemos tenido que improvisar y eso resultó de buena manera".
2 goles en los últimos cuatro partidos ha recibido la valla de Santiago Wanderers.
20.00 horas del domingo el Decano visitará a Santiago Morning en el estadio Nacional.
5 es la diferencia de gol que tienen los verdes, con 27 tantos a favor y 22 en contra.