En una posición idónea para escalar hasta los primeros lugares del torneo de la Primera B se encontraba Santiago Wanderers, antes de su duelo frente a Santiago Morning en un semivacío Estadio Nacional.
Con esa convicción, el Decano parecía salir a la cancha del reducto ñuñoíno. De hecho, a los 8', un tiro de Marco Medel daba el primer aviso para los caturros. El disparo de media distancia obligó a esforzarse al portero Franco Cabrera. En el córner posterior, Medel complicó nuevamente al pórtico autobusero, pero nadie pudo cabecear el cerrado centro.
Pero el esfuerzo inicial se echaría por tierra completamente a los 11' cuando Óscar Ortega recibió cómodamente al centro del área, eludió la marca de Juan Soto y puso en ventaja al local.
El gol encontró tibias reacciones en el ataque wanderino, que comenzó a refugiarse en intermitentes centros de Matías Campos Toro, los cuales no llegaban a destino. Sólo a los 22' un intento de Matías Fernández, que definió en el área grande, hizo esforzarse al meta local.
Cinco minutos después, sería Luis García que con un tiro de media distancia lograría imponer algo de peligro. Fue el aviso perfecto para que a los 28', un centro de Campos encontrara el cabezazo de Bernardo Cerezo. El testazo se fue directo al área chica donde Gustavo Lanaro puso el 1-1.
Pero el Decano pasó susto. Especialmente a los 31', cuando Mauricio Viana falló en un despeje y terminó dándosela a Ortega, quien cedió al excaturro Francisco Piña que desvió ante la incredulidad de los presentes.
Eso sí, a esas alturas, Wanderers era más sobre el campo, y aprovechaba las variantes que jugadores como Adrián Cuadra y Marco Medel le daban en el medio, para cortar las transiciones rápidas del cuadro bohemio, con relativa tranquilidad.
Casi al final del primer tiempo, un balón mal despejado tras un corner, rebotó en la rodilla de García, sin la cuota de fortuna para que se colara en el arco local. Así, porteños y capitalinos se fueron en tablas al descanso.
Baja de intensidad
El segundo tiempo le quitó ritmo e intensidad al encuentro en el Nacional. De hecho, la escuadra porteña alargó mucho su juego y comenzó a recurrir al pelotazo.
La táctica decantaría en un juego trabado en el centro del campo y menos claridad a la hora de crear por parte de los verdes y del abuso del pase filtrado en el caso del dueño de casa. Un trance que no sumó ninguna chance clara de gol en los dos arcos durante, al menos, los primeros veinte minutos del complemento.
Un pobre registro que Miguel Ramírez intentaría revertir haciendo un cambio poco entendible, ya que el joven Kennan Sepúlveda entraría a suplir al venezolano Néstor Canelón, quien era el agente de mayor peligro en Wanderers.
La única de peligro, favorable a los caturros, se dio a los 82' cuando un débil puñetazo de Cabrera y un centro posterior de Campos Toro, encontró el testazo de Lanaro que fue interrumpido por el defensor autobusero Rodrigo Canosa.
Santiago Morning insinuó peligro mediante el contragolpe, pero el centrodelantero Nino Rojas nunca se vio cómodo ni los pases fueron finos como para poner una virtual segunda cifra, salvo un tanto anulado a los 84'.
Ya en los 90', el local intentó con un desesperado carrerón de Rojas por la izquierda, quien habilitó a Ortega, pero el atacante terminó mandando su disparo a las nubes.
Cuando todo hacía parecer que la impericia era la regla para los dos equipos y que, al menos, Santiago Wanderers obtenía un punto que lo dejaba esperando una nueva caída de los líderes para treparse a lo más alto de la tabla, sucedió la fatalidad.
Al cuarto y último minuto de descuento, Campos Toro perdió la marca de Eduardo Vidal y obligó a una destemplada salida de Viana, quien cometió una falla garrafal en el despeje. El balón, le quedó al propio Vidal, quien con sutil toque lo empujó hacia el pórtico caturro, decretando el 2-1 final, ya que el juez Cristián Andaur decidió no proseguir con el juego.
Con el resultado, una frustrada escuadra de Valparaíso quedó con 33 puntos y en el cuarto lugar del campeonato. Una posición que lo obliga a ganar en la próxima fecha a Deportes La Serena en el estadio Elías Figueroa Brander de Valparaíso, si es que quiere continuar con opciones de acechar la esquiva primera posición del campeonato.
Frustración verde
La frustración y la rabia era patente en el rostro de los hinchas, que desaprobaron con una severa pifia la derrota del Decano. La reacción no pasó inadvertida para el técnico wanderino Miguel Ramírez, quien dijo comprenderla.
"Si perdemos, se va a encontrar todo malo. Los dos goles que nos hacen, fueron balones divididos que perdimos, totalmente evitables. Ellos apostaron a la contra, y sabíamos que iba a ser así", manifestó el estratega caturro, quien agregó que "quedamos todos con bronca por el resultado final, y se entiende la frustración de la gente porque los más frustrados somos nosotros".
Respecto al desenlace del encuentro y las críticas sobre el desempeño en los últimos minutos de Wanderers, Ramírez añadió que "me duele más la derrota, porque dependió de nosotros, luego de no haber sido capaces de anticipar para evitar los goles. Elaboramos mucho, pero no tuvimos la profundidad necesaria".
33 puntos cosecha el Decano en el campeonato, y se quedó en la cuarta posición del campeonato.
4' de descuento llegó el gol del local que terminó definiendo el duelo, obra de Eduardo Vidal.
1-1 fue el resultado del duelo entre Cobreloa y Puerto Montt, rivales directos del Decano en el torneo.