Alexis Paredes R.
Más de 70 locales comerciales saqueados, violentos enfrentamientos con las Fuerzas Armadas y de Orden, incendios e incluso un inédito desalojo del Congreso Nacional producto de las protestas han convertido a Valparaíso en la ciudad más afectada tras el estallido social y protestas iniciadas el pasado fin de semana.
Basta un recorrido a pie entre avenida Francia y el sector financiero de calle Prat para constatar in situ los destrozos y graves daños a la propiedad pública y privada, cuyo avalúo final aún no se conoce.
Este ha sido uno de los puntos clave para determinar ayer en forma inédita por parte del jefe de la Fuerza de la Defensa Nacional, contralmirante Juan Andrés de la Maza, un toque de queda diferenciado en la región, que en las provincias de Marga Marga, Valparaíso y San Antonio se inició a las 20 horas y concluyó a las 5 de la madrugada de hoy.
Respecto a la situación que afecta a la capital regional, el intendente Jorge Martínez comentó que "hemos podido observar manifestaciones más o menos masivas, dependiendo del lugar y la ocasión, y que se han caracterizado por ser muy pacíficas, donde los manifestantes han podido expresar sus ideas y quejas en forma ordenada".
Añadió que "hemos visto que estos mismos manifestantes han repudiado y rechazado a aquellos violentistas, delincuentes que se asocian a estas manifestaciones, y una vez que terminan han generado actos de violencia que han alterado la tranquilidad de la población y han causado daños, particularmente en la ciudad de Valparaíso".
De las 36 comunas de la región bajo Estado de Emergencia, subrayó el personero, "en 35 de ellas ha habido mucha más tranquilidad en la población, puesto que la preocupación principal hoy día -lo ha dicho el almirante- es Valparaíso como un foco importante. Por una parte, ha habido una masa de agitadores y, por otra, delincuentes que han aprovechado la ocasión para generar daño en la propiedad, abrir locales, generar saqueos en múltiples locales y, en algunos casos, incendios".
Las oleadas de saqueos que han afectado desde el domingo al comercio porteño llevaron a las autoridades a sostener un encuentro con distintos representantes del gremio comunal, donde les manifestaron su preocupación y el interés por "volver a la normalidad lo antes posible, porque sus pérdidas no sólo son materiales, sino económicas por el daño a la ciudad de Valparaíso, al turismo y a la imagen de la ciudad. El desorden de la ciudad no sólo los perjudica en lo inmediato, sino también en una proyección a mediano plazo".
Martínez recalcó que son las propias fuerzas vivas de la ciudad, "incluido el alcalde Sharp, quienes han pedido mayor protección de las policías y de las FF.AA., para poder dar mayor tranquilidad a la ciudad. El jefe de la Fuerza, de quien depende el orden público de la región, les ha asegurado que se han tomado y se seguirán tomando todas las medidas para que esto siga disminuyendo y volvamos a la brevedad posible a la mayor normalidad".
Desempleo y pérdidas
Sin aceptar consultas respecto a las causas que habrían detonado esta espiral de violencia y pillaje en la ciudad, Martínez reconoció que "se han perdido, se han dañado o se pueden ver afectados empleos y sobre todo las personas. Ya estamos trabajando con distintos gremios, asociaciones y sindicatos para pensar en la recuperación, en la reparación de los daños y levantar nuestra región, particularmente nuestra querida ciudad de Valparaíso de estos atentados que ha sufrido".
Junto con la evaluación del catastro, se está confeccionando un levantamiento con toda la información que dé cuenta de los requerimientos, necesidades y apoyo para un plan de "levantamiento y reconstrucción, en particular en la ciudad de Valparaíso que ha sido dañada".
El intendente adelantó que se cuantifica la cantidad de empleos que están en riesgo producto de la oleada de saqueos que afectaron a la zona y la paralización de la economía regional durante la última semana.
Enfatizó que estos desmanes y robos "perjudican a personas muy humildes, que tienen su fuente de trabajo y con eso mantienen a sus familias. Queremos poner fin a esto y recuperar la paz, que todos los que creemos en la democracia nos sentemos a buscar soluciones y no a generar dificultades o problemas que puedan entorpecer retornar a la normalidad".
"Ha habido una masa de agitadores y, por otra, delincuentes, que han aprovechado la ocasión para generar daño en la propiedad, abrir locales y generar saqueos"
Jorge Martínez, Intendente regional