Luis Marín vive con especial expectación el estallido social que se desencadenó en Chile. Las demandas sociales que se enarbolan en medio de esta crisis son parte de las banderas de lucha que el actual secretario del Sindicato de Futbolistas Profesionales (Sifup) asegura haber apoyado desde siempre.
"Claramente, son complicados todos los disturbios, los destrozos que hay, pero hay un fondo con el que comparto en su totalidad", explica.
Tomando en cuenta el escenario que atraviesa el país, el ex O'Higgins insiste en la suspensión del fútbol, tal como lo ha sostenido desde el primer día el Sifup, esgrimiendo que la actividad no puede estar ajena al contexto social, y por eso comparte la decisión que reafirmó la ANFP la noche del lunes.
"No se puede hacer mucho. No están las condiciones para poder jugar fútbol, los jugadores están con la cabeza en otro lado", recalcó Marín, enfatizando que las demandas sociales deben establecerse por sobre el fútbol.
Poco antes de ingresar a una nueva reunión con la ANFP con el objetivo de determinar lo que viene, de inmediato aclara que es muy difícil asegurar que el fin de semana subsiguiente se pueda retomar la actividad.
"Tenemos que ver el día a día y en base a eso avanzar. Esperamos saber cuál es el escenario en relación a lo que se viene, que creo es de bastante incertidumbre", sostuvo el exseleccionado nacional, reconociendo que han mantenido una comunicación permanente con el ente rector del fútbol y con los planteles de los clubes, de los que afirma que "están todos apoyando y de acuerdo con lo que está pasando. Obviamente su cabeza no está puesta para jugar fútbol".
En esa línea, Marín vuelve a hacer hincapié en que no es adecuado ocupar el torneo nacional como una pantalla para volver a una supuesta normalidad. "En algunos lugares se está intentando volver a la normalidad prácticamente como una obligación y no lo veo de esa manera. El fútbol se tiene que usar como una herramienta de unión, pero no como una obligación como para que esto aparente estar normal, porque no lo está", aclaró.
Y en medio de toda la incertidumbre, el mundialista en Sudáfrica 2010 ve una luz de esperanza al final del camino.
"Apoyo mucho lo que está pasando y espero que Chile tenga una solución, que haya cambios realmente notorios, una educación, salud, pensiones y estudios de manera digna. Creo que se lo merece así todo chileno, y en base a eso hay que construir hacia adelante, no imagino un retroceso después de esto. Sí me imagino que esto progrese, que haya una mejora, y que obviamente vaya de la mano con todo el cambio que viene", cerró.
Con especial atención a Valparaíso
Oriundo del cerro Los Placeres, Luis Marín ha intentado seguir de cerca cómo se viven las manifestaciones en el puerto. "Siento mucho cariño por Valparaíso, voy constantemente, mi familia está allá. Está muy complicado, a lo mejor más que en otros lugares", reflexiona con un dejo de tristeza por los niveles de violencia que se han alcanzado, pero sin perder el foco principal. "Tienen que estar todas las partes involucradas y trabajar por un cambio, si no van a ser cambios minoritarios y en unos años más a lo mejor va a pasar lo mismo que ahora, y no vamos a generar nunca un cambio que realmente sea desde el fondo de todo esto", esgrimió, pensando en una nueva Constitución.
"El fútbol no se tiene que usar como una obligación para que esto aparente estar normal"
Luis Marín, Secretario del Sifup
2017 el año en que Luis Marín colgó los guantes después de defender el pórtico de Deportes Temuco.