151 años | 28 de diciembre de 1868

Valparaíso estará en gira de príncipe

El príncipe Alfredo, Duque de Edimburgo, hijo de la Reina Victoria de Inglaterra, inició un viaje por el mundo, de casi dos años, a bordo del buque "Galatea", en que visitará todos los continentes. En el itinerario está Valparaíso. El príncipe llegará también al puerto de Sydney, Australia, donde sufrió un atentado hace años.

101 años | 28 de diciembre de 1918

Alemania restituirá valores mobiliarios

PARIS, 27.- Los alemanes restituirán los valores mobiliarios robados en la guerra a los bancos de Lillle, Roubaixc Tourcoing, Valencinnes, Douai, Cambral y Saint Quintin. Se estima que los títulos solamente representan tres mil millones de francos, calculándose en otros tres mil millones otros valores. Todo será reintegrado.

51 años | 28 de diciembre de 1968

Es la máxima hazaña del siglo

A BORDO DEL PORTAVIONES "YORKTOWN", 27 (AP).- El Apolo 8 retornó hoy a la Tierra, tras haber cumplido un viaje de 800.000 kilómetros a la Luna, en una misión que ha sido calificada en muchos países como la máxima hazaña de este siglo. Los tres astronautas son los primeros seres humanos en circunnavegar la Luna.

Una de las frases que más hemos oído en los últimos meses es la que afirma que "Chile despertó". ¿Es esa una buena descripción de lo acontecido? Tengo mis serias dudas. Los motivos justificados del malestar que se ha expresado eran conocidos y, como corresponde a una democracia, habían sido puestos en discusión en elecciones en las que el pueblo escogió entre los diversos programas que se le presentaron. En estos supuestamente demoníacos 30 años hicimos ese ejercicio ciudadano siete veces. Y los resultados han sido buenos. Gracias a esa sensata forma de proceder, la solución a los problemas del país ha avanzado como nunca antes.

La última de esas elecciones ocurrió hace sólo dos años y, debido a una radical reforma a nuestra legislación sobre financiamiento de campañas, fue la más limpia y equitativa de nuestra historia. Con un abanico de candidatos que fue de José Antonio Kast a Eduardo Artés, ofreció, además, una diversidad de opciones rara vez vista. En 2021 esta sana práctica se repetirá. ¿No habría sido lo más propio de un país despierto haber seguido impulsando incesantes reformas y mejoras por esta fructífera vía?

Más bien me temo que una porción inusualmente alta de nuestra población se ha puesto, en alguna medida, bajo los efectos del nocivo alucinógeno populista. Los populismos son muy variados, pero todos ellos, de Chávez a Trump, coinciden en un falaz diagnóstico: vivimos en una terrible época de decadencia, afectada por gravísimos problemas. Sin embargo, estos son de muy fácil solución, y si ello no acontece es sólo por culpa de unas élites egoístas y corruptas que lo impiden. Si se van todos (salvo el propio populista), por tanto, el paraíso estará a la vuelta de la esquina. Como esa descripción es falsa, al subidón populista sigue tarde o temprano la dura resaca de la frustración.

Y una frustración mayor que la actual es, en efecto, uno de los desenlaces más probables de lo que vivimos. En algún momento resultará claro que las constituciones, aunque son cuerpos normativos de gran importancia y por eso requieren de amplios niveles de consenso, no son el instrumento apropiado para resolver problemas económicos y sociales. También que nuestro país está extenuando sus posibilidades de déficit fiscal, endeudamiento, recaudación tributaria y gasto público principalmente para reparar lo mucho destruido desde el 18 de octubre y para intentar que el deterioro de nuestra economía sea lo más breve y leve posible. Y finalmente que el daño al respeto mutuo es más difícil de remediar que el material.

El camino hacia un país mejor se ha vuelto más esquivo. Para encontrarlo necesitamos políticos dispuestos a contrariar sensatamente las inclinaciones populistas. Pero de eso, hasta ahora, no ha habido mucho.

Urgencia fue el término dominante en las palabras del Presidente Sebastián Piñera durante la reunión que sostuvo el jueves, por la mañana, en la Intendencia Regional, junto a ministros y autoridades. El objetivo era acometer con prontitud y empatía soluciones tras el grave incendio que destruyó 245 viviendas en la parte alta de Valparaíso.

Y tiene razón el Jefe del Estado, pues tras la destrucción hay acuciantes problemas humanos de cientos de familias de escasos recursos que lo han perdido todo y que tienen que comenzar de nuevo.

Así, las soluciones deben llegar con rapidez y también con eficiencia y prolijidad. "No vamos a dejar solas a las familias afectadas", afirmó Piñera comprometiendo un plan que "las ayude a recuperar la normalidad de sus vidas".

Junto a sus anuncios, el Presidente llamó, como se ha hecho tantas veces, a no seguir construyendo en zonas de alto riesgo. Y ese un aspecto crucial, pues gran parte de los cerros y sus quebradas encierran riesgos de siniestros -incendios o derrumbes-, pero concentran viviendas por tomas o carencia de terrenos económicos. Quienes están allí establecidos, pese a riesgos o destrucción, como es este caso reiteración de otros anteriores, se resisten a dejar sus sitios, donde está el fruto de sus esfuerzos y variados lazos afectivos.

Es posible que el riesgo de las zonas críticas pueda ser minimizado mejorando la vialidad con el postergado eje entre avenida Alemania y el Camino La Pólvora, compromiso tras el siniestro de 2014, junto a la construcción de muros y limpieza y de quebradas. A la vez sería necesario un estricto control sobre las plantaciones forestales adyacentes a las viviendas.

Ayer mismo, en la Intendencia Regional, concretando los anuncios presidenciales, el ministro Cristián Monckeberg informó de un subsidio por $1.200.000 para el caso de viviendas con pérdida total. También dio cuenta de una ayuda por $ 600.000 por daños parciales y de un subsidio para arriendo por $ 300.000, por un plazo de siete meses.

Los compromisos del Presidente y los concretos anuncios posteriores exigen un esfuerzo coordinado de todo el aparato estatal, nacional y local, por eso se echó de menos la presencia del alcalde Jorge Sharp en la reunión del jueves en la Intendencia, con quien el Presidente sólo tuvo un contacto telefónico.

Posiblemente, el jefe comunal estaba en terreno removiendo escombros, o bien temió pasar un mal rato ante la presencia de un grupo de manifestantes que, seguro, lo habrían "funado" por reunirse con el Presidente de la República.

En fin. Olvidemos la anécdota, pues estamos en horas de urgencias, con necesidad de trabajo coordinado y unidad. Los escombros y el dolor de las personas no dan espacio para chacoteos o cálculos políticos.