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Conservación

Red brinda atención rápida a animales afectados por el hombre en Galápagos

ECUADOR. Unidad especializada del parque nacional ha atendido en sus siete años de funcionamiento a unas 250 especies.
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Una iguana atropellada, tortugas afectadas por redes en el mar y varias aves figuran en la lista de 250 animales afectados por acciones humanas y que han sido reportados a través de la Red de Respuesta Rápida (RRR) del Archipiélago ecuatoriano de Galápagos.

La RRR pertenece al Parque Nacional Galápagos, pero funciona a través de la línea del Servicio Integrado de Seguridad ECU 911 para atender a animales con efectos antrópicos (causados por el ser humano).

Eduardo Espinoza, director de Ecosistemas del Parque Nacional Galápagos, explicó a Efe que en la RRR hay veterinarios y varios guardaparques para atención en primera instancia.

Los más afectados

Entre las especies más frecuentemente atendidas figuran tortugas gigantes, lobos e iguanas marinas y aves, principalmente nocturnas, que salen a alimentarse a aguas abiertas, pero que, a veces, al retornar, se encuentran con las luces del pueblo y "sufren accidentes, chocan", explicó.

Las causas fundamentales para el daño de los animales son el atropello, el deslumbramiento y el uso de anzuelos.

Pero también se ven afectados por los desechos. En julio pasado, por ejemplo, gracias a información proporcionada por la ciudadanía, a través de la línea 911, guardaparques y voluntarios de WildAid pudieron liberar a dos lobos juveniles que tenían plástico enredado en sus cuellos.

El primer lobo fue atendido en el islote Mosquera, al norte de la isla Santa Cruz; mientras que el segundo estaba en la isla Rábida, en el centro del archipiélago.

El hecho de que eran lobos marinos juveniles, de los que no migran mucho, permitió una atención rápida y exitosa.

Las estadísticas del Parque Nacional Galápagos dan cuenta de que en lo que va del año, han sido atendidos noventa animales gracias al RRR, cifra inferior a la de 2018, cuanto totalizaron 118, todos por causa antropogénica.

Según Espinoza, desde 2013 -cuando se creó la RRR- se ha atendido a 250 animales afectados por el ser humano.

Artes de pesca

Espinoza recuerda cuando encontraron una tortuga marina enredada en una red y que hacía esfuerzos infructuosos por salir a la superficie a respirar.

Los expertos temieron que la tortuga pudiese perder sus aletas, pero tras cuatro semanas de tratamiento en el Centro de Atención Primaria, lograron liberarla.

Recordó que a nivel mundial las "artes de pesca fantasma matan miles de animales todos los años" y a muchos de ellos no se les puede auxiliar.

El director de Ecosistemas del Parque Nacional Galápagos cuenta que también deben atender a animales muertos, pues tienen que hacer la necropsia respectiva.

"Pero hay casos en los que hemos tenido que practicar la eutanasia", señaló al recordar a una iguana marina a la que "le habían roto el cráneo y era imposible salvarla", por lo que interrumpieron su ciclo de vida para evitarle sufrimientos.

Educación ciudadana

Espinoza se muestra complacido por la acogida de la RRR entre la comunidad, pues ahora, tan pronto ven un animal herido, lo reportan al 911 y al parque, que atiende todos los días y mantiene gente de guardia para asistir los casos.

También resalta que la gente comenzó a distinguir entre un efecto natural y uno antrópico sobre los animales, y subrayó que el hombre respeta más el espacio de los animales del archipiélago, muchos de los cuales pasean libremente en zonas pobladas: las iguanas marinas cruzan las calles, los lobos marinos se apoderan de los asientos donde normalmente se sientan los turistas.

Cuenta, además, que la gente es más precavida, por lo que ahora, antes de echar a andar un vehículo, observa debajo por si alguna iguana marina hubiese decidido buscar refugio en la sombra.

"Ya existe más conciencia respecto a los efectos que el hombre puede causar a la naturaleza".

Eduardo Espinoza Director de Ecosistemas del Parque Nacional Galápagos

Existe más conciencia

Eduardo Espinoza, director de Ecosistemas del Parque Nacional Galápagos, explicó que "ya existe más conciencia respecto a los efectos que el hombre puede causar a la naturaleza" y también sobre las sanciones contra quienes dañan especies protegidas en el archipiélago, catalogado como Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco en 1978. Y de esas sanciones sabe bien un chofer que recientemente debió pagar 11.000 dólares por haber atropellado a una iguana, una de las miles de especies de las también conocidas como "Islas Encantadas", situadas a unos mil kilómetros de las costas continentales ecuatorianas.

90 animales han sido atendidos en lo que va del año gracias a la RRR, cifra inferior a 2018, cuanto totalizaron 118.

1978 fue declarado el archipiélago de Galápagos como Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco.

Rinoceronte negro "más longevo del mundo" muere a los 57 años en Tanzania

DECESO. Fausta se encontraba en cautiverio hace tres años y fue vista por primera vez en 1965.
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Fausta, una hembra de rinoceronte negro que sería la más vieja del mundo, falleció en cautiverio a los 57 años, según anunciaron autoridades de la reserva natural del cráter de Ngorongoro, en Tanzania.

"Los registros muestran que Fausta vivió (más tiempo) que cualquier rinoceronte en el mundo y lo hizo en el Ngorongoro, en libertad, durante más de 54 años, antes de ser llevada a un santuario en 2016 durante sus últimos tres años de vida", explica en un comunicado la autoridad de esta reserva.

Su salud se deterioró

Esta hembra de rinoceronte pereció el pasado 27 de diciembre, en principio, por causas naturales, si bien un grupo de científicos y veterinarios se ha desplazado hasta allí para investigar otras posibles causas.

"Fausta fue vista por primera vez en el cráter de Ngorongoro en 1965 por un científico de la Universidad de Dar es Salam, (por entonces) tenía entre tres y cuatro años", reza el comunicado, en el que se explica cómo su salud se empezó a deteriorar a partir de 2016.

"Nos vimos obligados a poner el animal en cautiverio, tras varios ataques de hienas y heridas graves", añade.

La esperanza de vida de los rinocerontes se sitúa entre los 37 y los 43 años en libertad, pero pueden vivir una década más en cautiverio, según la autoridad de Ngorongoro.

Los resultados de las investigaciones verán la luz en las próximas semanas, después de que las muestras tomadas del cuerpo de Fausta sean estudiadas en un laboratorio, detalló uno de los científicos involucrados a la prensa local.

Amenazados por la caza furtiva, la población de rinocerontes negros se reduce a unos 5.500, según la ONG Save The Rhino, localizada en Sudáfrica, Zimbabue, Botsuana, Tanzania y Kenia.

Los cazadores buscan sus cuernos, que pueden llegar a venderse en mercado negro, sobre todo en Asia, por entre 60.000 y 80.000 dólares el kilo, dadas sus supuestas propiedades curativas y afrodisíacas.

3 a 4 años tenía Fausta la primera vez que fue vista por un científico de la Universidad de Dar es Salam.