"Lo que busca Piñera es transformarse en el jefe de la inteligencia nacional sin ningún control"
"La estrategia del Gobierno ha sido un absoluto fracaso y por eso es insostenible que Jaime Mañalich continué como ministro de Salud", sostiene el diputado Jorge Brito, de Revolución Democrática (RD), al evaluar estos más de tres meses de pandemia. Es más, afirma que "no hay persona en Chile, sea de derecha, izquierda o independiente, que no entienda que el ministro Mañalich es parte del problema".
- ¿Es tiempo de que haya cuarentena en la Región de Valparaíso más allá de San Antonio?
- No entiendo a los parlamentarios de Gobierno que respaldan al ministro Mañalich, cuando ha sacrificado a las regiones en favor de Santiago. Veamos los datos: el número de contagios por cada cien mil habitantes en Vitacura era un tercio de los contagios que tenía San Antonio cuando se decretó la cuarentena. Quisiéramos que a la Región de Valparaíso la cuidaran como lo hacen con Vitacura, pero no, nos han tirado para el final.
- Un grupo de 90 figuras, entre expertos y organizaciones sociales, envió una carta a La Moneda criticando el proyecto que moderniza el sistema de inteligencia. Como presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara, ¿qué le parece la nueva urgencia que le puso el Gobierno?
- Todos queremos ponerle fin a estas bandas de delincuentes que han estado traficando influencias para quitarle a Chile sus recursos naturales, pero lo que nos está proponiendo el Presidente con este proyecto que busca reformar el sistema de inteligencia -al que desde el inicio de la pandemia, en marzo pasado, le han puesto ocho suma urgencias y hoy (ayer) fue la octava- está en la línea de lo que proponen Trump y Bolsonaro y donde las FF.AA. se involucrarían en temas internos e, incluso, operarían contra grupos de chilenos que, a juicio del Mandatario, atenten contra el orden público.
- ¿Esa es su crítica?
- Es que creemos que es sumamente peligroso para las organizaciones sociales que han levantado la alerta y para esos uniformados que entraron a estas instituciones para servir a Chile y no para servir al gobierno de turno. La inteligencia no debe ser un botín político de quien esté en La Moneda, sino que debe ser un sistema que sirva a un Estado que proteja a las personas. Sin embargo, lo que busca Piñera es transformarse en el jefe de la inteligencia nacional sin ningún control, disminuyendo la fiscalización del Congreso y aumentando sus facultades para controlar a los militares y a las policías. Como presidente de la Comisión de Defensa y escuchando a los expertos que han participado en esta instancia, quiero decir que todos han levantado reparos porque así no se avanza en la línea adecuada, y muy por el contrario, crea un escenario en el que chilenos de uniforme se enfrenten nuevamente con chilenos civiles. Y esa es una imagen que no la queremos volver a ver en nuestro país. Por eso le pedimos al Presidente que recapacite y frene este proyecto.
- ¿No es el momento para tramitarlo?
- Es muy sospechoso que en plena pandemia un gobierno insista en tramitar con tanto apuro una iniciativa con estas características. Estamos disponibles para avanzar en un nuevo sistema de inteligencia, pero para eso hay que sacar a los movimientos sociales como objetos de la inteligencia y poner en el foco a las bandas de corrupción y del crimen organizado.
- A su juicio, ¿dónde hay que poner el foco?
- Lo que se necesita es definir la forma en que va a funcionar y que sea una ley de inteligencia con mayores controles democráticos. Las medidas intrusivas, la intervención de teléfonos móviles que cada vez es más sofisticada, deben tener autorización judicial y además debe tener un control posterior. La ley actual no contempla ningún tipo de rendición de cuentas y nosotros queremos exigirles a esos agentes de inteligencia que respeten la ley y cuiden a la gente, no como el Presidente que ve en los movimientos sociales a un enemigo poderoso.
- ¿A qué atribuye las urgencias?
- Mire, por un lado el Gobierno no quiere apoyar el postnatal de emergencia ni la renta básica de emergencia, pero sí quiere apoyar este proyecto entre gallos y medianoche. Hay gente en el Gobierno, entre las que está el ministro Alberto Espina, entusiasmada en hacer de Chile un estado militar, un estado policial. De hecho, la militarización de los problemas sociales, las incursiones del Ejército en las favelas de Río de Janeiro, el llamado a la guardia que hace Trump en EE.UU. dice relación con esto: militarizar los problemas sociales porque los presidentes no quieren hacer su trabajo, que es escuchar a la gente y atender las demandas sociales. Entonces, se envía policías y militares a enfrentar a la gente. Entonces, sabemos que no podemos entregarle más facultades a un Presidente al que le han llegado cuatro informes de organismos internacionales de que se violan los DD.HH. en forma generalizada y que en vez de rectificar, pedir perdón y reparar, quiere más facultades para usar a las FF.AA. y a las policías a su antojo. Hoy creo que representa una amenaza a la seguridad del país.
- ¿Existe temor de que se produzca un nuevo estallido social?
- Así lo dejó ver el ministro Espina, porque sostuvo que con la aprobación de este proyecto el estallido social era evitable, pero nosotros vemos que esto no hace más que avanzar en el camino de la confrontación y lo que queremos es diálogo, entendimiento y reconciliar posturas entre chilenas y chilenos, pero es imposible si La Moneda sigue en la lógica de militarizar los problemas sociales.
- El fin de la reelección dejó a los alcaldes ad portas de una elección sin poder repostular. ¿Se podrá hacer una excepción?
- La solución que quieren las alcaldesas y alcaldes que llevan años en sus cargos genera un tremendo problema a nuestra democracia, que por fin la vamos a oxigenar. Nadie obligó a la derecha a votar a favor la ley que limitaba la reelección y no es culpa nuestra que no lo hayan leído bien y tendrán que asumir que su tiempo ya pasó y que vendrá gente nueva. Por lo tanto, no hay posibilidad de aprobar el proyecto a la medida de los alcaldes con 20 años de ejercicio, por lo que deben ir haciéndose la idea de que van a tener que embalar. Lo que ha quedado claro es que mientras unos alcaldes abren los malls, otros abren albergues; y que mientras unos pasan sentados en los matinales, otros están ayudando a que le lleguen los alimentos a la gente. Entonces, urge que haya un recambio en la casi totalidad de los municipios y está claro que en la mayoría de los municipios se levantarán primaria abiertas.
- El tema es que hubo un cambio de reglas cuando el proceso electoral de las municipales ya había partido, porque el 30 de octubre expiró la fecha de posibles renuncias y se haría necesaria una suerte de reparación.
- Los que tienen 20 años en el cargo siempre van a buscar una excusa para apernarse 20 años más. Si lo vemos acá, es un mínimo democrático que haya un recambio. Yo iré como mucho a una reelección al mismo cargo; Giorgio Jackson, que fue el diputado más votado, no irá a otra reelección porque necesitamos forzar un recambio permanente. De lo contrario, los alcaldes y alcaldesas pueden agarrar malas prácticas y pueden llegar a construir un déficit de 20 mil millones de pesos como hizo la alcaldesa Reginato en Viña del Mar.
"Necesitamos forzar un recambio permanente. De lo contrario, los alcaldes y alcaldesas pueden agarrar malas prácticas y llegar a construir un déficit de 20 mil millones de pesos como hizo la alcaldesa Reginato en Viña del Mar". "Los que tienen 20 años en el cargo siempre van a buscar una excusa para apernarse 20 años más. Si lo vemos acá, es un mínimo democrático que haya un recambio".