Cartas
Cuestionados fines
La violencia ejercida por unos pocos contra el ministro de Salud, Enrique Paris, en el Hospital San José demuestra que hay quienes sólo quieren politizar esta lucha contra el virus y generar la sensación de despreocupación total de las autoridades frente a la pandemia, lo que no es así. Las elaboradas pancartas que levantaron da cuenta de una acción totalmente organizada, no de una acción espontánea para dar cuenta de las eventuales carencias, de suyo atendibles, del centro asistencial aprovechando la presencia del ministro.
Hernán López
Desafíos frente a la pandemia
Esta pandemia es la prueba más intensa que ha debido sortear nuestro país y la red de salud probablemente en los últimos 100 años. La forma en que la hemos manejado será materia de estudio de las universidades durante los próximos años.
A mi juicio, el covid-19 ha permitido confirmar que enfrentar los determinantes sociales de salud de forma transectorial es un imperativo moral y ético que debemos asumir, y los actores políticos deben trabajar intensamente para reducir las brechas de ingreso, vivienda, trabajo, transporte, alimentación, educación y medioambiente, teniendo al mismo tiempo el deber de generar una red de salud integrada con cobertura universal, lo cual será esencial para dar respuesta a las problemáticas actuales y futuras de la ciudadanía.
Respecto a las soluciones para disminuir los contagios actuales, la estrategia 3TA (testear-tratar-trazar-aislar) debe ser potenciada con un enfoque centrado en la atención primaria. Hay que lograr tomar más de 2.000 test diarios en la Región de Valparaíso, con informes que no demoren más de 24 horas; debemos poder trazar a los pacientes Covid y sus contactos estrechos para finalmente hacer un seguimiento eficaz en el cumplimiento del aislamiento preventivo.
Lograr que estas medidas funcionen de manera permanente es fundamental, pues deberán mantenerse en el tiempo para evitar y controlar futuros brotes en la región.
Ignacio de la Torre Chamy Presidente del Colegio Médico Regional Valparaíso
Ollas comunes
En Santiago, la empresa Fanaloza, con más de 50 años de trayectoria, quebró el 14 de diciembre de 1981 y, hasta marzo de 1982, los 600 trabajadores no recibían ingresos. Por tanto, las esposas de los obreros tomaron la decisión de mantener una olla común, a pesar de las dudas de la directiva sindical. Ellas lograron revitalizar al hombre golpeado por la incertidumbre total, vencieron la tendencia de aislarse en sus hogares sin comida, algunas con varios hijos, recordando que la unidad es vital para la sobrevivencia.
Grupos recolectaron víveres en Lo Valledor, La Vega Central, feriantes, panaderías Selecta y San Camilo. La olla común se instaló frente a la industria paralizada, donde más de 400 personas compartieron a diario los alimentos. Los trabajadores esperaban, que las puertas de la fábrica se reabrieran, para con sus manos e inteligencia volver a crear bienes para el país. A marzo de 1982, en juzgados de Santiago, había 120 solicitudes de quiebra.
En distintos períodos de la historia de Chile, a raíz de huelgas o crisis económicas, se realizaron las ollas comunes solidarias, con gran presencia femenina.
Derico Cofré Catril
Posnatal
Si bien las intenciones detrás del proyecto por el posnatal de emergencia pueden ser muy nobles, una política pública también debe juzgarse por la efectividad de sus resultados. En ese sentido, el proyecto planteado es regresivo, pues estaría asignando los escasos recursos que posee el país en financiar sólo a algunas familias en desmedro de aquellas más vulnerables o con trabajos informales.
Recordemos que entre las mujeres asalariadas del primer quintil de ingresos, sólo el 41% tiene contrato. Y de los 20 mil bebés que nacen en un mes, el posnatal sólo cubre aproximadamente a 7 mil. ¿Qué hacemos con los demás? Porque este proyecto no se hace cargo.
En este sentido, la propuesta del Ejecutivo, de integrar a la ley de Protección del Empleo a madres y padres que tengan bebés, daría más luces de inclusión hacia las familias más vulnerables. Se podrán discutir los matices del proyecto, pero una cosa es clara, y es que los trabajadores informales no pueden quedar fuera.
Bárbara Haas Fundación para el Progreso
La música transforma vidas
Cuando Erwin era un niño de Los Bajos de Valdivia, en el Centro Integral Familia Niño (Cifan), le entregaron una viola. Aprendió rápido. Tenía talento musical. Integró la Orquesta Regional de Los Ríos. Viajó el año 2012 al Encuentro de Orquestas en las Ruinas de Huanchaca, en Antofagasta. Vino a Santiago a tomar clases. Amaba su viola...
Sus vecinos traficaban pasta base.
En la cárcel de Valdivia participó en el conjunto musical Sueños de Calle. Lo conocí cuando fuimos a entregar instrumentos para apoyar el programa de reinserción de este centro penitenciario.
En la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles de Chile luchamos día a día, desde hace casi 20 años, por transformar vidas a través de la música. Sin embargo, no siempre lo logramos. Lamentablemente, Erwin murió hace unos días en una riña de internos.
Su trágica muerte nos demuestra que debemos seguir trabajando con mayor dedicación y fuerza para que esta historia tenga un final diferente.
Alejandra Kantor Directora Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles de Chile
Plebiscito
La propuesta que están impulsando algunos sectores políticos en relación con saltarse el plebiscito constitucional e ir directo a una elección de miembros para una convención constituyente es, dentro del mar de abusos en la clase política, uno de los intentos más escandalosos de saltarse la democracia para imponer una agenda ideológica extrema sin siquiera preguntarle a la ciudadanía.
Como si no fuera escándalo suficiente una presidenta del Senado que quiere violar la Constitución, una jueza de familia que pretende dictar sentencias contrarias al Código Civil y a un fallo anterior de la Corte Suprema, una Fiscalía que pretende tratar como imputados a una patrulla militar después de que son casi asesinados por un conductor que evadió el toque de queda, ahora los chilenos tenemos que tragarnos esto.
Los chilenos no tenemos por qué aguantar esta desfachatez. Es hora de que les exijamos a todas las autoridades asumir la responsabilidad asociada a su cargo y que entiendan que sus atribuciones tienen límites que por obligación deben respetar.
Luis Fernando Sánchez