Expertos y gremios ven difícil recuperar empleo femenino en la región
ECONOMÍA. Advierten que la caída de sectores productivos clave en la zona y un factor cultural acentúan la problemática.
Un total de 542.641 mujeres en la región están desocupadas o inactivas. Así lo consignó el último boletín de desempleo del trimestre móvil mayo-julio, que advierte, además, que en el caso de los hombres ese número llega a 378.367.
Y aunque la tasa de desempleo entre géneros se han ido equilibrando, hay que consignar que la inactividad en las mujeres ha ido aumentando. De hecho, si se compara el número de desocupadas e inactivas al mismo periodo del año pasado, el incremento es de un 23%.
"Si vemos las cifras de hasta antes de octubre el desempleo femenino en la zona siempre se comportó muy parecido al promedio nacional o al de la Región Metropolitana", comentó la profesora e investigadora del Centro de Economía y Política Regional de la UAI, Diana Krüger, quien explica que la zona ha recibido con fuerza dos impactos sucesivos como el estallido social y la pandemia, y que han afectado particularmente a rubros que habitualmente emplean mucha mano de obra femenina.
Sectores clave
"Esto golpea a dos sectores económicos que son clave para Valparaíso, como el comercio y el turismo, muy importantes en la generación de empleo y con un alto porcentaje de trabajadoras, a diferencia de otros como la minería o la construcción, que no tienen ese impacto específico", subrayó la además colaboradora del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (COES).
Explicó que la inactividad, que es no buscar trabajo, se ha elevado en el área por motivos de responsabilidad familiar temporales y también por el tema del desaliento laboral, en que sencillamente se pierde la esperanza en encontrar una ocupación.
"Esto no pasa cuando hay un impacto transitorio, de corto plazo, pero ya venía de octubre, sobre todo en el comercio. Todo esto impacta el empleo femenino, donde hay que considerar que la tasa de desempleo informal también es más alta", aseveró.
En cuanto a la recuperación de los puestos de trabajo, lo ve complicado. "Pienso que va a ser más difícil. Primero, no sabemos qué va a pasar en el sector de la educación, donde más del 60% de los que trabajan son mujeres, y acá no hay clases presenciales por el momento en las universidades, los colegios están cerrados, los jardines infantiles, etc. Y empiezan a quebrar también. Además, están cerrando muchos comercios donde predomina el empleo femenino. Va a ser más difícil", remarcó.
Cuestión cultural
El académico de la Escuela de Negocios y Economía de la PUCV, Rodrigo Navia, consignó que actualmente existen subsidios de empleo para mujeres y jóvenes que fueron establecidos con el objetivo de facilitar la incorporación de estos grupos de personas a la fuerza laboral; sin embargo, recalcó que hoy existe un problema global de alto desempleo donde las mujeres han enfrentado un impacto significativo.
"Esto no sólo porque sectores donde tienen alta participación se han contraído fuertemente, sino también porque el cuidado de otros miembros del hogar, como familiares de mayor edad o menores en edad preescolar y escolar queda mayoritariamente a su cargo, limitando también las posibilidades de buscar trabajo ", enfatizó.
"Es por esto que aunque el problema del desempleo es generalizado, un grado de diferenciación sería deseable para atender a la diferencia en el impacto que han recibido en su empleabilidad y porque actividades como el turismo es posible que sean difícil de recuperar rápidamente, pues se requiere de la confianza de las personas para desplazarse por el país o desde otros países", agregó.
En cuanto a las dificultades para recuperar el empleo femenino en la región, apuntó que dependerá de los planes que se apliquen.
"Si adicionalmente a los subsidios, por ejemplo, se aborda el contar con las condiciones de volver a operar jardines infantiles y establecimientos educacionales, sin duda será menos difícil recuperarlo. El mntener cerrados los establecimientos educacionales busca un bien común, que es la salud pública, pero impacta mayormente a mujeres, por el rol tradicional del cuidado de los hijos que existe en nuestra cultura. También si los planes de reactivación se enfocan a sectores mayoritariamente de mano de obra masculina, como la construcción, también generarán una mayor recuperación del empleo masculino que el femenino", mencionó.
Desde los gremios, la gerenta de la Cámara Regional del Comercio de Valparaíso (CRCP), Marcela Pastenes, recordó que durante el período de mayo-julio se perdieron 25 mil ocupados en el sector Turismo, donde una parte importante de ello fueron mujeres. Ello se suma a caídas en cuenta propia y asalariadas informales.
"Estas cifras nos demuestran que, pese a que cada año más mujeres se sumaban al mundo laboral, lo hacían en sectores menos productivos y con bajas remuneraciones. El problema es que muchas de estas mujeres, al optar por la inactividad laboral, perderán autonomía económica y su reinserción al mundo laboral será compleja, impactando al crecimiento económico del país y la región, una realidad de la que debemos hacernos cargo con suma urgencia, para evitar consecuencias más profundas a futuro", enfatizó la ejecutiva.
Añadió que se debe trabajar desde el ámbito público y privado, para generar las condiciones necesarias que le permitan a las mujeres mantenerse en el mundo del trabajo, con condiciones laborales equitativas.
"Y si deben ausentarse por un tiempo, generar incentivos para apoyar directamente el empleo femenino, de modo que puedan reinsertarse con mayor facilidad, comprometiéndonos con políticas de inclusión", puntualizó.
"Valparaíso ha sido golpeado en sectores con un alto porcentaje de trabajadoras, (...) la recuperación del empleo femenino va a ser difícil".
Diana Krüger, Docente de la UAI e, investigadora del CEPR
"El mantener cerrados los establecimientos educacionales busca un bien común, que es la salud, pero impacta mayormente a mujeres".
Rodrigo Navia, Académico de la Escuela de Negocios y Economía PUCV
Desde el Gobierno destacan instrumentos específicos
"Hay que recalcar la posibilidad de celebrar pactos de reducción de jornada que permitan a las mujeres incorporarse a tiempo parcial a sus trabajos o también la invitación a los empleadores usar una normativa que es nueva como es la ley de trabajo a distancia que va a permitirles compatibilizar su vida laboral con su vida familiar", dijo la seremi del Trabajo, María Violeta Silva.
En tanto, el director regional del Sence, Alejandro Villarroel, subrayó que un gran factor para la recuperación del empleo femenino radica en el control de la pandemia. "En varias zonas que lograron avanzar en el desconfinamiento la ocupación se ha recuperado", precisó.
Junto con ello, destacó herramientas como la bonificación a los sueldos de mujeres de hasta un 40% de vulnerabilidad, que en la región benefician a 32 mil personas; y las capacitaciones, entre otras.
23% aumentó el número de mujeres desocupadas e inactivas en la región, en la comparación anual.
2 sectores que concentran un gran número de empleo femenino fueron golpeados: Turismo y Comercio.