"Hay un sector empeñado en imponerse por violencia"
Parlamentario oficialista muestra confianza en el triunfo del Rechazo, pero expresa preocupación por una posible baja participación en el proceso. Afirma que "las grandes demandas ciudadanas como la reforma de pensiones, no requieren de un cambio constitucional".
Dos semanas quedan para la realización del histórico plebiscito constitucional, donde la ciudadanía tendrá de la oportunidad de decidir si quiere o no una nueva Constitución y cuál sería el órgano que la redactará. El mundo político, por cierto, ha estado sumamente atento a esta votación, que no sólo ha sido calificada como el momento más importantes desde el regreso a la democracia, sino que también puede significar la salida de la problemática social que atraviesa el país desde octubre de 2019.
El diputado por el Sexto Distrito y partidario del Rechazo, Luis Pardo (RN), se muestra optimista con el triunfo de la opción que apoya, aunque muestra preocupación por una eventual baja concurrencia de los adultos mayores. Asume que si bien en este momento "las prioridades debiesen ser otras", el referéndum "ya está instalado en el calendario", por lo cual debiera realizarse sin problemas, aun con la crisis sanitaria que golpea al país desde hace poco más de siete meses.
Rechazar para recuperar el país - ¿Por qué considera el Rechazo la mejor opción de cara al plebiscito? ¿Confía en que sea la de mayor votación? - Creo en primer lugar, que el plebiscito fue concebido antes de la pandemia que ha traído una recesión económica de proporciones, que ha costado dos millones de puestos de trabajo, y por lo tanto, la opción de rechazar para abocarnos de lleno a recuperar el país y hacer las reformas de orden constitucional y legal que sean necesarias para responder a las demandas sociales, me parece que es una opción de sentido común. Evidentemente hay mucho voto encubierto, que no ha expresado su voluntad, pero no me cabe duda de que vamos a tener una participación y una respuesta mayoritaria en el plebiscito. - Hace poco más de un mes se instaló un debate en relación a la legitimidad que tendría el proceso ante una eventual baja participación. ¿Carecería de legitimidad si concurre menos del 50% del padrón a votar? - Sin lugar a dudas que mientras más gente vaya y participe, va a tener mejor legitimidad y respaldo. Pero me preocupa particularmente la participación de los adultos mayores, que son un segmento de la población donde la opción del Rechazo tiene una mayor prevalencia, según las encuestas, por lo tanto si hay segmento o sectores de la población que producto de la pandemia quedan excluidos, sin lugar a dudas eso es un problema. Ahora, lo importante es convocar y que ojalá tengamos la participación ciudadana que amerita este proceso. - Recientemente el abogado y exdiputado, Gonzalo Ibáñez, presentó un recurso ante la Corte de Apelaciones de Valparaíso para suspender el plebiscito, esgrimiendo la situación sanitaria del país, mismo argumento utilizado en marzo para mover los comicios. ¿Están dadas las condiciones sanitarias para llevar a cabo el referéndum en dos semanas más? - El plebiscito está instalado en el calendario, y hay que seguir trabajando y actuando en función de que se va a realizar, sobre todo en la medida de que se mantengan a la baja las cifras de contagio. Sin embargo, es evidente que las prioridades nacionales debieran ser otras. Creo que realizar un plebiscito constitucional en medio de una pandemia, que viene acompañada de la crisis económica más grave de los últimos cien años, no es ideal, pero entrar en ese debate nos distrae del objetivo de quienes estamos por el rechazo. - En entrevista con este diario el ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Monckeberg sostuvo que "puede haber posturas muy legítimas, pero hay ausencia de contenidos en la franja electoral". ¿Lo comparte? - Yo creo que en las franjas electorales en lo que respecta al Rechazo, particularmente la de RN -en la cual he tenido participación-, hemos fundamentado las razones por las cuales nuestra opción debiera ser privilegiada por la ciudadanía. Me parece que son razones como ya dije de sentido común y de bastante conexión con lo que está pasando en el país. Me parece que la franja del Apruebo es bastante más ideologizada y que no establece con claridad qué es lo que ellos quieren modificar de la Constitución. NECESIDAD DE CAMBIOS, PERO SIN PARTIR DE CERO - En caso del triunfo del Apruebo, ¿ve en su sector la unidad suficiente para acordar candidatos para la convención y contar con la mayor cantidad de nombres en el proceso? - No me cabe duda que respecto a los contenidos constitucionales, nuestro sector tiene una coherencia y una unidad mucho más profunda que la que exhiben las distintas expresiones de la oposición, lo que nos permitirá postular una sola lista. Hoy la oposición está unida en torno a un proceso constituyente sin contenidos explícitos. Al momento de definir qué quieren incorporar en una nueva Constitución, las propuestas del PC y el FA difieren sustantivamente de la visión de país que sustenta la DC o la centroizquierda heredera de la Concertación en materia valórica, económica y social. - En la eventualidad de que el plebiscito arroje respaldo mayoritario a una nueva Constitución, ¿qué elementos fundamentales debería contener a su juicio? - Desde luego, resguardar las garantías individuales, la prevalencia de la persona humana por sobre el Estado, el Estado es el que tiene que estar al servicio a la persona y no viceversa. El espacio para que la sociedad civil y las organizaciones puedan desarrollarse, para que la iniciativa privada pueda aportar al desarrollo nacional y no volver a una concepción de un estado omnipotente y empresario, y desde luego, también hacer algunos cambios, como fortalecer las regiones y la descentralización, y modificar también nuestro sistema político. Pero ninguno de esos cambios requieren de partir de cero. - ¿Cree que la votación se va a realizar en un clima de paz y tranquilidad o los ánimos estarán más caldeados, considerando que se realiza una semana después del aniversario del 18-O? - Yo creo que los episodios que hemos visto en la plaza Baquedano dan cuenta de que hay un sector de la oposición y de la sociedad que está empeñado en imponer su voluntad a través de la violencia y no cabe ninguna duda de que va a perseverar en esa línea que uno advierte en la forma de expresarse en las redes sociales y en los anuncios que está haciendo. Yo espero y confío que se adopten las medidas para garantizar el orden público y la convivencia democrática. De lo contrario, eso va a ser un factor deslegitimador del plebiscito. - ¿Es el proceso constituyente la respuesta a la crisis social que atraviesa el país desde fines del año pasado? - Categóricamente no. Esto se ha instalado en forma muy hábil, que un cambio en la Constitución podría resumir lo que la ciudadanía pedía. Pero las grandes demandas ciudadanas como la reforma de pensiones o la de salud, no requieren un cambio constitucional y por tanto, las verdaderas demandas no van a ser satisfechas por este cambio. Si se impone la idea populista de que por poner determinados derechos como garantizados en la Constitución, esas garantías se van a ejercer y las personas van a tener un acceso a vivienda, salud o previsión por el sólo ministerio de que se escriba en la "hoja en blanco", va a generar una gran frustración ciudadana en el futuro. 2
Nicolás Reyes Acevedo
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