Primer paso que exige seguridad
La violencia debe ser erradicada, pues el domingo solo estamos iniciando el proceso democrático que culminaría en 2022. "Quienes han pretendido afectar la tranquilidad y la seguridad de las personas se han equivocado", advierte el intendente. Ese es el gran tema, la seguridad, responsabilidad de los 27.452 efectivos de las FF.AA. y 44.000 de Carabineros desplegados para la protección de los 2.715 locales de votación a lo largo del país.
"Sé que algunos grupos minoritarios van a intentar entorpecer o ensuciar este proceso; no lo vamos a permitir". Palabras del Presidente de la República Sebastián Piñera formuladas al lunes, tras la violenta jornada en que se conmemoraban las manifestaciones de octubre del año pasado.
Haciéndose eco de esas afirmaciones y con el respaldo de los hechos, el intendente, Jorge Martínez, expresó su preocupación por las acciones de grupos violentos a pocos días del plebiscito constitucional.
El jefe regional denunció una acción concertada en los saqueos, barricadas y daños a bienes públicos y privados registrados en los últimos días, todo ello bajo el paraguas siempre generoso de "manifestaciones pacíficas". Los daños son cuantiosos y junto con afectar a lo público, de nuevo castigaron al comercio, que en medio de su fragilidad acusa graves pérdidas que frenan su recuperación y capacidad para mantener empleos.
Destacó el intendente que en medio de los ataques aparecían banderas del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR), histórico promotor de la violencia. Recordó que hoy jueves termina la campaña electoral previa al plebiscito y que "el viernes (mañana) ya estamos en temporada de elecciones y está prohibida cualquier manifestación". Espera el jefe regional que así las personas podrán ir a votar "en forma libre, espontánea, democrática, tranquila y segura. Quienes han pretendido afectar la tranquilidad y la seguridad de las personas se han equivocado". Y ese es el tema, la seguridad, gran responsabilidad de los 27.452 efectivos de las Fuerzas Armadas y 44.000 de Carabineros que comienzan ya a desplegarse para la protección de los 2.715 locales de votación a lo largo de todo el país.
Pero esa tarea de resguardo no se agota solo en los locales, también se extiende a ciudades y campos, al transporte y a servicios de comunicaciones y energía. Y esa responsabilidad de las fuerzas de orden también es compartida por los líderes políticos y sociales que deben evitar descalificaciones y ataques verbales que pavimentan el camino a la violencia física.
Las consignas odiosas y menos los daños de los últimos días, no pueden repetirse. Deben ser reprimidos y denunciados a la justicia cuando así proceda, considerando que está en juego un proceso democrático trascendental que convoca a un pronunciamiento mayoritario ante diversas opciones planteadas en las cédulas de votación.
Hay que tener presente que la votación del domingo es un primer paso fundamental en un eventual cambio constitucional que continúa, si se aprueba el cambio, con la elección de constituyentes en abril del próximo año y culmina con un plebiscito el primer semestre de 2022. Una larga jornada que exige un debate sereno en que la violencia no puede ser aceptada como un argumento válido.