A 62 años del primer título reconocido de Santiago Wanderers
FÚTBOL. El 30 de noviembre de 1958, los caturros empataron con O'Higgins y se alzaron como campeones en Rancagua.
Una alegría unánime cubrió al puerto de Valparaíso el 30 de noviembre de 1958. Después de una larga campaña que comenzó en mayo, Santiago Wanderers logró ser campeón del torneo nacional de ese año.
En el balance fueron 13 partidos ganados, 8 empatados y 5 perdidos del equipo dirigido por José Pérez, el entrenador más exitoso en la historia del club y que comenzaba a dejar su legado en los verdes con el primer título reconocido para los caturros.
Según rememora Ricardo Díaz, delantero que debutó esa temporada y se ganó un espacio alternando en la ofensiva, era un equipo "formado con muchos jugadores de barrio. Habían algunos argentinos, pero la mayoría veníamos de algún cerro de Valparaíso. En ese tiempo uno tenía que trabajar y jugar".
A sus 83 años, el "Negro" confiesa que algunos recuerdos ya se van borrando, pero todavía tiene presente el desenlace del torneo: un empate 2-2 contra O'Higgins en Rancagua, que sumado a la victoria por 3-0 de Everton contra Colo Colo le dio el título al Decano.
En aquella ocasión, los verdes llegaron a la última fecha empatados con 33 puntos (las victorias sumaban dos unidades) en un torneo de 14 equipos, por lo que la igualdad les alcanzó para levantar el trofeo.
Después, un retorno al Puerto que quedará en la memoria de Díaz por siempre. "Entramos por San Roque, porque en ese tiempo no existía Santos Ossa, en una micro".
"Cuando íbamos llegando a la Avenida Argentina no pudimos avanzar más. Estaba lleno de gente esperándonos con las calles repletas. Nos bajamos de dos o tres por la puerta de atrás y José Pérez nos dijo que teníamos que juntarnos en un café. Ahí llegamos todos y vino la primera celebración", cuenta el exdelantero caturro.
La mano del "Gallego"
El argentino José "Gallego" Pérez marcó un antes y un después en Santiago Wanderers. Así lo reconocen los jugadores que estuvieron bajo sus órdenes y así también lo recuerda el periodista deportivo Edgardo Marín en su libro "La Historia de los Campeones".
Sobre ese inolvidable grupo, el profesional comenta que "era un equipo ofensivo, con los jugadores indicados para eso y además con el imperativo de tener a José Pérez, que era un entrenador vertiginoso e intenso, de marca muy profunda".
"Fue un entrenador notable que aportó muchísimo al fútbol chileno a través de Wanderers", agrega el Premio Nacional de Periodismo Deportivo en 1993.
Ricardo Díaz coincide con la apreciación y cuenta que ese era el objetivo. "Nosotros buscábamos ir siempre para adelante. Teníamos jugadores rápidos y habilidosos arriba, así que había que buscarlos para los contraataques".
"Hoy juegan más los arqueros que los centrodelanteros. La tónica del equipo era dársela a los punteros e intentar hacer el gol", reflexiona el exfutbolista del Decano.
Además, confiesa que había muy buena relación en el plantel y repasa los nombres de sus compañeros en ofensiva como Jesús Picó, Armando Tobar, Nicolás Moreno, Carlos Hoffmann y Cristián González, "con quien peleábamos el puesto para entrar".
Sobre el trabajo que hizo Pérez en el cuadro porteño, Marín complementa que "todos los equipos de Wanderers de esa época, incluyendo el campeón de 1958, eran muy intensos y veloces".
"Él hizo escuela. Formó en parte a esa generación que duró tantos años", analiza sobre el proceso del entrenador que además consiguió el título de 1968 y dos Copa Chile.
El periodista cierra comentando que en el pasado tuvo la oportunidad de conversar con el "Gallego" y algunos jugadores, donde pudo notar que "era un grupo muy cohesionado, muy convencido de lo que querían y podían hacer".
A 62 años, un recuerdo que sigue en la memoria de sus intérpretes y que quedará marcado como el primer título reconocido para el club, al margen de los obtenidos en 1941 y 1942 en la Asociación Porteña de Fútbol Profesional.
"Cuando llegamos a la Avenida Argentina no pudimos avanzar más. Estaba lleno de gente".
Ricardo Díaz, Campeón en 1958
"Era un equipo ofensivo, con los jugadores indicados y el imperativo de tener a José Pérez".
Edgardo Marín, Periodista deportivo
34 puntos sumó Santiago Wanderers en 1958 gracias a sus 13 partidos ganados, 8 empatados y 5 perdidos.