Trump deja vencer plazo para renovar ayudas económicas
EE.UU. El mandatario saliente rechazó firmar un plan de estímulos económicos por la pandemia y expiraron dos programas de ayuda a 10 millones de personas.
Agencias
La negativa del presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, a firmar un nuevo plan de estímulo dejó ayer a millones de personas sin prestaciones clave por desempleo, y amenaza con resultar también en una parálisis parcial de la Administración y el fin de una moratoria a los desahucios.
Varios políticos republicanos criticaron a Trump, el líder de su partido, por no firmar el proyecto de ley aprobado el pasado lunes por el Congreso, que inyectaría 900.000 millones de dólares en la economía para mitigar su deterioro por la pandemia.
"A Trump se le recordará por el caos, la miseria y su comportamiento errático si no firma la ley", dijo el senador republicano Pat Toomey.
Al menos 10 millones
La medianoche del sábado al domingo expiraron dos programas que proporcionaban ayudas por desempleo a entre 10 y 14 millones de estadounidenses, y que no habrían caducado si Trump hubiera firmado el proyecto de ley.
La nueva legislación no solo renovaba esos programas especiales creados durante la pandemia, sino que contemplaba pagos extra de 300 dólares a la semana hasta el 14 de marzo para los trabajadores desempleados.
Muchos cesantes todavía pueden recurrir a las ayudas estatales por desempleo en su estado de residencia, que cubren al 90% de los trabajadores del país, pero los programas que caducaron este sábado eran importantes para los independientes y otros desempleados que agotaron los recursos tradicionales.
El cese de las prestaciones por desempleo fue la primera repercusión en la vida de los estadounidenses del desacuerdo en torno al recién aprobado plan de estímulo, pero podría haber otras dos consecuencias graves a lo largo de la próxima semana.
Fondos administración
Si Trump no firma el proyecto de la ley de gasto que acompaña el paquete de estímulo antes de la noche de hoy, se agotarán los fondos para la Administración y entrará en parálisis parcial desde el martes 29, a menos que se apruebe una medida de financiación temporal.
Y en caso de que el paquete de estímulo no entre en vigor el 31 de diciembre, esa medianoche expirará una moratoria nacional que prohíbe los desahucios, lo que pondría a unos 30 millones de estadounidenses en riesgo de quedarse sin techo en el Año Nuevo.
Trump se negó a firmar el proyecto de ley que aprobaron ambas cámaras del Congreso si no se aprueban varios cambios, desde un aumento de los pagos directos a los estadounidenses hasta una reducción de la ayuda exterior.
Poco después de la medianoche, cuando ya habían caducado los programas, Trump insistió en su postura y escribió en Twitter: "Aumenten los pagos al pueblo".
"rechaza lo que aprobó"
El congresista republicano Adam Kinzinger lamentó la postura de Trump y aseguró que el paquete actual es "lo que negoció el presidente" a través de su secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
Después de meses de negociaciones en las que Mnuchin propuso que los pagos directos a millones de contribuyentes fueran de 600 dólares, Trump esperó a que el Congreso lo aprobara para tachar esa cantidad de "ridícula" y exigir aumento a 2.000 dólares.
La presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi, planea someter a voto hoy la propuesta de Trump, pero se espera que fracase, como ya ocurrió el jueves en un primer intento, debido a la oposición de los republicanos.
Cuenta atrás para que caduque el plazo del proyecto
Si el presidente Trump veta el proyecto de ley sobre el plan de estímulos, el Congreso podría intentar invalidar ese veto y tendría opciones de conseguirlo, pero todo apunta a que la estrategia del mandatario es dejar el proyecto de ley sin firmar, con el objetivo de que caduque el 3 de enero. Ese día toma posesión el nuevo Congreso votado en las elecciones de noviembre, cuyos legisladores tendrán que volver a negociar y aprobar otro plan de estímulo, porque el anterior ya no tendría validez.