"Colocamos en riesgo el triunfo de Valle o de Mundaca al ir divididos, le da la oportunidad a la derecha"
Directo, pero con los números claros, el histórico exministro de la Concertación, Francisco Vidal Salinas (PPD), analiza el presente de la oposición, a la cual ve dividida y presta a pagar una factura el 11 de abril por su falta de visión. Piensa que tanto Aldo Valle como Rodrigo Mundaca son candidatos muy fuertes para la Gobernación Regional, pero que el triunfo de cualquiera de ellos dos está en peligro ante una derecha unida, que en las últimas elecciones de diputados en la región llegó al 38% de los votos, muy cerca del 40% necesario para ganar la gobernación. Algo similar ve en Viña del Mar, donde cree que la dispersión de votos entre Macarena Ripamonti (RD) y Marcela Varas (PPD) beneficiará a Andrea Molina.
- ¿Cómo ve la disputa por la Gobernación Regional de Valparaíso?
- Fue un error de la oposición el no haber logrado la unidad. Al dispersarse entre dos muy buenos candidatos, Aldo Valle y Rodrigo Mundaca, le da la oportunidad de entrar por el medio al candidato de la derecha, Manuel Millones. Más allá de las ganas, esta es la evidencia; si tú miras los números de la última elección, en la medida que la oposición se divida, le da una enorme ventaja a la minoría, porque la mayoría dividida siempre permite que la minoría gane. Uso como referencia la última elección de diputados de hace tres años. Ahora, las cosas cambian, estallido social de por medio, pero los grandes números se mantienen en la historia electoral de los últimos 30 años. En mi opinión, ambos son muy buenos candidatos, aunque si yo fuera porteño votaría por Aldo Valle, obviamente.
- Los comicios de gobernadores tienen segunda vuelta. ¿El escenario que usted plantea se mantendría a pesar de ese factor?
- En los números grandes, la derecha tuvo en la última elección de diputados a nivel nacional el 38,8% de la votación. Lo que la deja en promedio, porque cada región es muy distinta, muy cerca de lograr el 40% en primera vuelta, estás en el límite. Pero al final, lo que quiero decirle a la gente de oposición es que se cometió un error al ir divididos, lo que obliga a redoblar los esfuerzos para sacar más votos e impedir que por la división gane la minoría, en este caso la derecha.
- ¿Usted no cree que la derecha pueda sufrir una penalización en su votación después del estallido social?
- Sí, yo creo que debiera bajar, pero va a bajar al 30, 32 o 33%. La derecha en su peor momento después del 90, fue en la candidatura presidencial del 93, cuando sus dos candidatos presidenciales, Alessandri y José Piñera, llegaron con el 31%. El piso de la derecha es el tercio. Eso es lo que demuestran los datos. En Valparaíso la derecha unida obtuvo el 38% de los votos en la última elección de diputados, y nosotros unidos vamos a tener más del 50% o cerca del 60%. Soy profesor de Historia, pero sé algo de matemáticas, y 60 dividido es menos que 38. Esto no lo digo en un estado depresivo, sino que para que aprendamos la lección, y en la primera vuelta presidencial lleguemos máximo con dos candidatos y no con seis como fue la última vez.
- Si fuera una suma matemática, debería ganar la oposición. ¿No habrá un problema más político de fondo?
- Obvio, hay una incapacidad política de ponerse de acuerdo en plataformas mínimas programáticas comunes a nivel comunal, regional y nacional. Por ejemplo, en nuestra relación con la izquierda comunista y el Frente Amplio, si colocamos el acento en qué hizo o no hizo la Concertación, nos dividimos. Si colocamos el acento en lo que hay que hacer en Chile, en las transformaciones, el Estado social de derecho, nos unimos.
- ¿No cree que en esta fragmentación de las oposiciones hay algo más de responsabilidad en las fuerzas de izquierda, que han sido muy duras con la Concertación?
- Claro, porque ellos colocan el acento en la historia y yo coloco el acento en el presente y en el futuro. Pero hay un sectarismo mutuo, Fuad Chahin dice no con los comunistas y Guillermo Teillier dice no con los democratacristianos. Resultado, gana la derecha. Te voy dar un ejemplo internacional, mientras el PSOE español peleó con Podemos y Podemos peleaba con los socialistas, gobernaba la derecha. Dejaron de pelear y gobiernan ellos.
- ¿Cómo analiza la elección municipal en Viña del Mar?
- Después de varios periodos de la actual alcaldesa, Virginia Reginato, las cosas pueden cambiar mucho, pero el concepto lo mantengo. Lo más probable es que los votos de Marcela Varas junto con los de Macarena Ripamonti sean muchos más que los de Andrea Molina. Esa persona que iba más allá de la UDI y lograba votos en todas partes ya no va, entonces se va a rearmar el cuadro electoral en Viña del Mar, pero el principio que me preocupa es el mismo (la dispersión). Mi candidata, Marcela Varas, tiene que sacarse la mugre trabajando, no solo porque al frente tiene a Andrea Molina, sino porque tiene al lado a Macarena Ripamonti.
- ¿Qué resultados obtendrá la oposición el 11 de abril?
- La noche del 11 de abril vamos a confirmar o desvirtuar mis aprensiones. Va a haber resultados clarísimos de que la mayoría de los chilenos es opositora al gobierno de derecha y quiere un gobierno de otro tipo. Sin embargo, esa mayoría, en la función de los cargos a elegir, podría sufrir un trastorno producto de su división.
- ¿Cómo ve el panorama de la oposición de cara a las primarias presidenciales?
- La clave en esta fase de la oposición, y particularmente de la Unidad Constituyente, en mi opinión, es que el PS y el PPD debemos llevar un solo candidato, y para eso hay que hacer la consulta ciudadana entre Heraldo Muñoz y Paula Narváez. Mi argumento es el siguiente: las ideas socialistas y del PPD, desde el punto de vista programático, son muy similares. No tiene sentido, en consecuencia, que dos partidos que convergen programáticamente, que siempre hemos ido juntos a las primarias presidenciales, vayamos divididos, no tiene sentido. Lo lógico sería que fueran un solo partido, pero no hay caso.
- Y mirando hacia las parlamentarias de noviembre, ¿hay que mantener la Unidad Constituyente o hacer un pacto más amplio?
- Hay que hacer un pacto entre la UC y comunistas, regionalistas y FA si lo que queremos es tener una mayoría sólida en ambas cámaras para apoyar al Presidente o la Presidenta de la oposición, que, de acuerdo a la mayoría del país, debiéramos ganar, pero si prevalece la estupidez dirigencial en la oposición, de privilegiar el camino propio, la identidad propia por sobre el bien superior, Joaquín Lavín es el Presidente.
"Hay un sectarismo mutuo, Fuad Chahin dice no con los comunistas y Guillermo Teillier dice no con la DC. Resultado, gana la derecha".
"Mi candidata, Marcela Varas, tiene que sacarse la mugre trabajando, no solo porque al frente tiene a Molina, sino porque tiene al lado a Ripamonti".