Presentan recurso de protección contra el SEA por resistido proyecto de línea de transmisión
REGIÓN. Acción busca ampliar plazo de participación ciudadana por iniciativa que instalaría torres de alta tensión en 6 comunas, entre ellas, Casablanca y Valparaíso.
Hasta la Corte de Apelaciones de Valparaíso llegaron ayer representantes de la Coordinadora Ecológica de Casablanca (CEC) y la Corporación Prodefensa del Patrimonio Histórico y Cultural de Viña del Mar para interponer un recurso de protección en contra del director ejecutivo del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), Hernán Brücher, luego que éste, según la acción legal, no se pronunciara a la petición de extender el proceso de participación ciudadana en el marco del Estudio de Impacto Ambiental del proyecto "Nueva Línea 2x220 Nueva Alto Melipilla-Nueva Casablanca-La Pólvora-Agua Santa".
La iniciativa, de la empresa Casablanca Transmisora de Energía S.A., pretende construir una línea de transmisión eléctrica a través de un tendido que se extiende por 107 kilómetros, instalando para este efecto más de 280 torres de alta tensión que pasarían por las comunas de Melipilla, en la Región Metropolitana, y Cartagena, San Antonio, Casablanca, Viña del Mar y Valparaíso, en la Región de Valparaíso.
Afectación
Los principales reparos que formulan quienes se oponen a su materialización se centran en la afectación que ocasionaría a sectores de alto valor natural, pero también a su cercanía a sectores urbanos. No obstante, las críticas también van apuntadas a los plazos establecidos en el segundo proceso de participación ciudadana (PAC), cuyo periodo para la presentación de observaciones finalizó ayer, tomando sobre todo en cuenta la complejidad del proyecto y las modificaciones que ha sufrido el mismo.
Cabe recordar que el 25 de junio pasado, el SEA resolvió efectuar un nuevo proceso de PAC en consideración a las significativas modificaciones al trazado que realizó la empresa que impulsa esta línea de transmisión.
Y de acuerdo a ello, para el abogado Gabriel Muñoz, que representa a la Coordinadora Ecológica de Casablanca y la Corporación Prodefensa del Patrimonio Histórico y Cultural de Viña del Mar, entre otros recurrentes, "no es el mismo proyecto anterior, es un nuevo proyecto, y por lo tanto, el plazo (de participación ciudadana) se redujo ostensiblemente" respecto del primer proceso, una situación que, precisó, "deja en desventaja y desigualdad de una real oportunidad de participación ciudadana de las comunas" incluidas en el trazado.
De hecho, en el recurso se consigna que la solicitud de ampliación "se fundó en que la comunidad no cuenta con los recursos técnicos ni de tiempo para realizar observaciones de calidad sobre las modificaciones, por lo que correspondía ampliar el plazo a fin de facilitar la participación de las comunidades que se verán directamente afectadas por el proyecto".
Por tal motivo, el pasado 11 de agosto ambas organizaciones solicitaron al SEA la ampliación del proceso, pero hasta ayer, día en que venció el periodo para la presentación de observaciones, no hubo una respuesta por parte del organismo.
"no debe aprobarse"
Un rol activo frente a este proyecto ha tenido la Municipalidad de Casablanca, que incluso contrató servicios de asesoría jurídica y ambiental para apoyar a agrupaciones y comunidades que se oponen a la línea de transmisión. Ayer, el alcalde Casablanca, Francisco Riquelme, también llegó hasta la Corte de Apelaciones en señal de apoyo a las organizaciones que interpusieron el recurso de protección, desde donde confirmó que, pese a los ajustados tiempos, ayer presentaron ante el SEA su pronunciamiento sobre la Adenda del proyecto.
"Son 15 observaciones que se suman a las cerca de mil que hizo la comunidad en este segundo proceso de participación ciudadana. A nuestro juicio, este un mal proyecto que no debe aprobarse, porque principalmente desconoce condiciones territoriales de Casablanca. No es compatible con las instrumentos territoriales, es un proyecto que tiene consecuencias multidimensionales: culturales, sociales, comunitarias, económicas y profundamente ambientales", aseveró.
En cuanto al impacto en su comuna, puntualizó que "es un proyecto que cruza 32 kilómetros de territorio casablanquino, con cerca de 100 torres de 45 metros de altura, muy cerca de sectores que hoy están destinados a equipamiento urbano, vivienda. Se ubica a un kilómetro de distancia del futuro Hospital de Casablanca", por lo que, a su juicio, "este proyecto nos demuestra las debilidades que tiene la Ley sobre Bases Generales del Medio Ambiente, donde la participación es prácticamente decorativa por parte de las comunidades".
"Es un plazo reglado"
Respecto a la solicitud de ampliación del plazo de participación ciudadana, la Fiscalía del Servicio de Evaluación Ambiental informó que "esta posibilidad no está contemplada en la normativa ambiental vigente. El plazo para presentar observaciones ciudadanas es un plazo reglado".
Asimismo, se indicó "que el proyecto tuvo un periodo adicional de participación ciudadana originado por las modificaciones sustantivas incorporadas al proyecto, aspecto considerado en nuestra legislación. El proyecto aún continua en evaluación, encontrándose pendiente la recepción de los informes de los órganos de la administración del Estado con competencia ambiental".
"Este un mal proyecto que no debe aprobarse, porque desconoce condiciones territoriales de Casablanca".
Francisco Riquelme, Alcalde de Casablanca
100 torres de alta tensión, aproximadamente, pasarían por territorios de Casablanca.