Lo Vásquez, fe viva y llamado a la jerarquía
Sin peregrinación, la festividad de la Inmaculada Concepción significó movimiento de fieles hasta el tradicional Santuario. "El obispo de Valparaíso, monseñor Jorge Vega, expresó que "todos tenemos que preocuparnos de cuidar la vida", una posición correcta, cuando en muchos sectores se insiste en actividades masivas".
El Obispado de Valparaíso llamó a los fieles a no realizar las tradicionales peregrinaciones al Santuario de Lo Vásquez. Esa expresión de fe popular que cada año moviliza a cientos de miles de personas hasta el templo situado en plena Ruta 68, donde se honra a la Madre de Dios, suponía un riesgo sanitario. Ya el año pasado se había suspendido la peregrinación, que incluye el corte del camino y la celebración en el templo mismo de varios oficios religiosos.
En esa misma línea preventiva, este año no se realizaron oficios públicos, se reiteró la petición a los fieles a no concurrir al lugar y no hubo suspensión del tránsito en la ruta.
El obispo de Valparaíso, monseñor Jorge Vega, expresó que "no fue fácil tomar esta decisión, pero todos tenemos que preocuparnos de cuidar la vida, de no exponer a nuestra gente". Correcta posición cuando en muchos sectores se insiste en realizar actividades masivas.
Carabineros, por su parte adoptó medidas y formuló llamados con el fin de evitar problemas en las caminatas por la transitada Ruta 68. Pese a ello gran cantidad de personas realizó la peregrinación el martes pasado, ayer 8, día de la celebración oficial de la Inmaculada Concepción, y posiblemente lo hará hoy jueves. Se trata de expresiones de fe, decisiones personales de cumplir el compromiso contraído en esas tradicionales mandas, en las cuales se recurre al poder divino ante variadas situaciones.
La religiosidad ha perdido terreno, es un hecho, una realidad que afecta especialmente a la Iglesia Católica, en parte, por las conductas ilegales de algunos sacerdotes, casos muy notorios y tardíamente condenados. Sin embargo, las manifestaciones de fe sobrepasan la institucionalidad y esas conductas indebidas y es así como muchos no han acogido el llamado de la autoridad eclesiástica y han llegado a cumplir sus compromisos. Con el objeto de mantener cercanía con los fieles, pese al cierre oficial del Santuario, se realizaron oficios a través de plataformas digitales incluyendo tres misas oficiadas por el obispo Vega.
En su prédica, el prelado llamó a convertir las ofrendas a la Virgen en gestos solidarios, canalizando ayuda a las personas más necesitadas. Llamó también a entregar compañía a quienes en esta situación sanitaria están solos, especialmente adultos mayores.
Desde el punto de vista de la Iglesia oficial se da así continuidad a una actividad religiosa muy arraigada y, a la vez, se contribuye a la seguridad sanitaria de los fieles. Las mismas medidas de prevención se advierten en diversos templos que habían permanecido largo tiempo cerrados.
En esta festividad específica se advierte la llama viva de la fe, lo cual encierra un llamado a la Jerarquía a profundizar en la prevención y la sanción oportuna de aquellas conductas que han causado escándalo y en ocasiones se ha tratado de ocultar.