Isabel Allende llega a librerías con novela inspirada en su madre
LITERATURA. "Violeta" se llama este trabajo que recorre, además, cien años de historia y diversos hitos.
La chilena Isabel Allende es considerada la escritora viva más leída de la lengua española, por lo que cada libro suyo causa gran expectación. Es por eso que se ha esperado con ansias el arribo de "Violeta", novela que llega hoy a las librerías bajo el sello Plaza & Janés.
La obra de la Premio Nacional de Literatura empieza y termina con una epidemia y recorre los últimos 100 años de historia a través del relato de una abuela inspirada en Panchita, mamá de la autora y una de las mujeres que más la marcó en su vida. Es así como Violeta es una mujer fuerte que logra sobreponerse a innumerables obstáculos, y va revelando detalles de su familia y pasiones amorosas a su nieto Camilo, a quien ha criado desde que nació y que luego se convirtió en cura.
Sus inspiraciones
Ambientada en la Patagonia chilena, tiene pasajes en Argentina, Miami y Noruega, abordando una amplia gama temática, desde el feminismo y los abusos verbales, las violaciones a los derechos humanos y la homosexualidad, hasta las pasiones amorosas, la infidelidad e incluso el calentamiento global. Asimismo, repasa también los movimientos socialistas, el comunismo, las dictaduras militares en el Cono Sur y las democracias.
La idea original del libro surgió tras la muerte de su progenitora a los 98 años y por recomendación de amigos que la llamaban a hacer una novela por la intensa relación que ambas habían tenido, pero en ese momento la autora estaba muy dolida emocionalmente.
Pasaron meses y, cuando se sintió más fuerte, comenzó "Violeta" inspirada en su madre, pero también con una marcada diferencia: la protagonista es una mujer que se sustenta a sí misma y a buena parte de su familia con sus negocios.
"Violeta, como mi mamá, era una persona, una mujer bella, sin tener mucha conciencia de su belleza. Era inteligente, visionaria, talentosa, con buenas ideas para hacer dinero", aseguró Allende, de 79 años, a The Associated Press. Y agrega: "Corre todos los riesgos, ya sea la vida amorosa y la vida que quiere hacer... pero la diferencia es que mi mamá siempre dependía económicamente de alguien".
Entonces Violeta, la mujer que le dice a su nieto que su vida es digna de ser contada no tanto por sus virtudes como por sus pecados, es en parte la madre de Allende, ella misma y "mucho de imaginación".
En la novela, que comienza en los tiempos en que nació Panchita durante la llamada gripe española de 1920 y termina en los años en que murió, en la era del coronavirus en 2020, Allende recorre casi un siglo de vida de una mujer que nace en el seno de una familia chilena conservadora y adinerada, que cambia radicalmente cuando queda en la calle por la Gran Depresión.
El personaje de Camilo está inspirado en el sacerdote jesuita Felipe Berríos, y quien desde hace años es "muy, muy amigo" de Allende. La escritora le dedica el libro a él, a su hijo Nicolás y a su nuera Lori, "pilares" de su vejez.
Fue de esas conversaciones entre una escritora que se describe como "completamente agnóstica y feminista" y un cura progresista, es que surgió Camilo, a quien su abuela Violeta confiesa admiración y le dice que es "el amor más profundo" y "más intenso" de su larga vida. De la misma manera que en la vida real, lo es para Allende su hijo Nicolás. Tal vez por eso también es que gran parte de las anécdotas de la niñez del personaje son las de su hijo.
Por otra parte, Violeta se ve marcada por la muerte: la de su madre; la de su hija Nieves, madre de Camilo (una joven drogadicta inspirada en Jennifer, una de las hijas del exesposo de Allende Willy Gordon); la de su institutriz Miss Taylor, y la de Roy, uno de sus amantes.
La propia Allende vivió la muerte de su hija Paula en 1992, a los 29 años, y eso en parte la ayudó con el personaje: "Ese dolor terrible de ver morir a tu hija lo pude describir porque lo había vivido", contó.
"Una cosa importante de la vejez, de la ancianidad, son las pérdidas. ¡Cuántas pérdidas! Se te muere todo", dice la escritora mientras reflexiona sobre la experiencia de su madre, que falleció a los 98 años. "Eso era importante que quedara claro en el libro, que mientras más vives, más pierdes".
Y si bien hoy publica "Violeta", su segundo libro en pandemia después del de no ficción "Mujeres del alma mía", ya tiene lista un tercero: una novela sobre refugiados que está en proceso de traducción y el pasado 8 de enero empezó a otro nuevo.
Una extensa producción que es gracias al encierro de la pandemia: "He tenido tiempo, silencio y soledad para escribir", contó, expresándose agradecida de que en su familia nadie haya enfermado de covid- 19. "Tal vez siempre tengo historias, no necesito la inspiración; lo que necesito es el tiempo para escribir".
"Violeta, como mi mamá, era una persona, una mujer bella, sin tener mucha conciencia de su belleza. Era inteligente, visionaria, talentosa, con buenas ideas para hacer dinero".
Isabel Allende, Escritora chilena