Placilla: jauría de perros mata a mujer y formalizan a dueño
POLICIAL. Hecho quedó al descubierto tras la denuncia de un tercero a la Tercera Comisaría de Valparaíso. Padre del detenido dice que canes no son de él.
Un escabroso hecho quedó al descubierto en Valparaíso, en la localidad de Placilla, la madrugada de ayer, a las 2.20 horas, cuando un hombre hizo una denuncia en la Tercera Comisaría de Valparaíso alertando que una jauría de perros había atacado a una mujer y se la "estaban comiendo".
Ante esto, una vez en el lugar, Camino Antiguo 85, Carabineros constató que efectivamente una mujer estaba tendida en la vía pública con heridas de gravedad y estaba siendo atacada por cinco canes, los que huyeron e ingresaron al recinto de una empresa de transportes. Tras esto fue detenido Paulo Graves Arriagada, que confirmó ser el dueño de los animales.
La víctima, quien falleció en el Hospital Carlos van Buren por la gravedad de sus heridas, fue identificada como Marianela Paola Olivos Ojeda, de 50 años, que vivía en situación de calle y era conocida en el sector de la plaza Echaurren, en Valparaíso. Tenía domicilio en el cerro Cordillera y mantenía atenciones de ruta social desde el 2016 a la fecha. Sus conocidos ayer la recordaron con cariño a través de las redes sociales.
Investigación y tenencia
La investigación quedó a cargo del Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar), unidad que ayer realizó las primeras pericias. El jefe operativo, teniente Rodrigo Fedo Alvarado, detalló que se logró "obtener evidencia de carácter orgánico que, obviamente, nos va a poder permitir vincular a esta persona en el sitio y también establecer una dinámica".
En el lugar fueron identificados los canes y se visualizó que uno de ellos, una perra, tenía manchas de sangre en su pelaje, por lo que realizaron un análisis con la precaución de no dañar al animal.
Pese a haber un detenido, el teniente Fedo aclaró que la tenencia "es materia de investigación y hay que determinarlo. Este es un sitio bastante amplio, no existe un perímetro que esté establecido en este inmueble, por lo tanto, cualquier perro podría ingresar de manera libre a este lugar".
Mientras, el padre del detenido, Fernando Graves, afirmó que los perros no son de su propiedad y que vendrían de la Quinta Compton. Aquí, aseveró, "los vecinos nos vienen a pedir ayuda como nosotros hemos pedido ayuda a Carabineros porque los árboles se están cayendo y la Quinta Compton está abandonada. Hay 10 perros en la Quinta Compton y ninguno de los 10 perros los alimentan, se están comiendo entre ellos, están abandonados en la calle", dijo.
Agregó que "no tengo nada que ver. Yo tengo mi perro y la alimento a ella, pero estos se meten. Aquí no hay mala fe, se meten los perros igual y gasté $4 millones en cerrar y se robaron todo, 500 metros de alambre, estos perros no son míos", dando cuenta que ha denunciado la situación, pero nadie se hace cargo.
En tanto, consultado a la PUCV por la situación, dieron a conocer que "la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso aclara que los perros que atacaron a una mujer en Placilla no son de la propiedad de Quinta Compton".
Firma y arraigo
Tras reconocer que los perros sí eran de él, ayer fue formalizado en el Juzgado de Garantía de Valparaíso, Paulo Graves, por cuasidelito de homicidio en grado de autor y consumado, de acuerdo a los antecedentes vertidos por la Fiscalía en audiencia. El juez Camilo Obrador decretó un plazo de investigación de 120 días y las cautelares de firma mensual y arraigo nacional.
El fiscal Ignazio Rivera confirmó en la audiencia que Graves fue detenido tras la declaración de un testigo que "se acercó a la unidad policial señalando que cinco perros, uno de raza pastor alemán y otros cuatro de raza mestiza, se encontraban agrediendo y comiendo, al parecer, a un persona. Es en ese contexto que la unidad policial se dirige al lugar, efectivamente verifican esa situación y verifican que los perros se introducen al domicilio de don Paulo. (…) Se acercan al referido domicilio, el cual señala ser el propietario de los referidos canes".
"No existe un perímetro que esté establecido, (...) por lo tanto, cualquier perro podría ingresar de manera libre a este lugar".
Rodrigo Fedo, Labocar
"No tengo nada que ver. Yo tengo mi perro y la alimento a ella, pero estos se meten. Aquí no hay mala fe".
Fernando Graves, Padre del detenido