Vladimir Putin amenaza a la OTAN con una guerra si acepta ingreso de Ucrania
ESCALADA. Presidente, después de casi un mes, volvió a referirse al conflicto con Occidente, mientras que Moscú y Washington reanudaron conversaciones bilaterales. EE.UU. dice que las membresías de la OTAN no funcionan como quiere el líder ruso.
El presidente ruso, Vladímir Putin, advirtió que la anexión de Ucrania a la OTAN puede llevar a un conflicto armado entre Rusia y la Alianza Atlántica por el control de la península de Crimea.
"Imaginemos que Ucrania, como país de la OTAN, inicia esa operación militar (por el control de Crimea). ¿Qué hacemos? ¿Combatimos con la OTAN? ¿Acaso alguien ha pensado en eso? Parece que no", dijo el mandatario durante la rueda de prensa conjunta en el Kremlin con el primer ministro de Hungría, Víktor Orbán.
Putin aseguró que en la doctrina militar de Ucrania figura la "recuperación de Crimea, incluso por la vía militar".
En este sentido, sugirió la posibilidad de que Kiev lance una operación militar contra la península, anexionada por Rusia en 2014, una vez que la OTAN despliegue en su territorio armamento ofensivo moderno como ha hecho ya en Polonia y Rumania.
Putin dijo que el Kremlin considera "cerrado" el asunto de Crimea, porque es parte de su "territorio soberano".
La respuesta de Estados Unidos no se hizo esperar. Washington consideró que las declaraciones del presidente ruso, son parte del manual de excusas para invadir Ucrania. Así lo aseguró el portavoz del Pentágono, John Kirby. Precisó que las palabras de Putin forman parte de la estrategia de Moscú de lanzar información "diseñada intencionadamente para engañar o intentar crear excusas o pretextos para justificar un acto injustificable.
El portavoz estadounidense subrayó que corresponde a Ucrania decidir con quién se asocia. "Cualquier membresía en la OTAN tiene que ser una decisión entre el Estado soberano y la OTAN", añadió. "No es algo en lo que el señor Putin tenga un veto. No funciona así".
Vuelve el diálogo
Este cruce de declaraciones se produjo el mismo día en que Estados Unidos y Rusia retomaron el diálogo a nivel diplomático, aunque sin mayores resultados. Más allá de ratificar las profundas diferencias que existen en ambos bandos.
A primera hora del día el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, y su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, sostuvieron una llamada telefónica en la que ambos diplomáticos repitieron las posiciones previas.
Blinken instó a Moscú a iniciar la "desescalada inmediata" de las tensiones en la frontera con Ucrania, a la vez que reiteró su "disposición" a continuar el diálogo "sustantivo" con Moscú por la vía diplomática, según la versión estadounidense.
Por su parte, y de acuerdo al comunicado de Moscú, Lavrov criticó a Washington por "su retórica agresiva" y la "entrega" de armas a las fuerzas armadas ucranianas e insistió en las exigencias de que se frene la expansión de la OTAN en el este de Europa.
Tras la conversación, que duró cerca de 30 minutos, Blinken señaló en su cuenta de Twitter que "si de verdad el presidente Putin no busca una guerra o un cambio de régimen (...) entonces es hora de que retiren las tropas y las armas pesadas".
En este escenario tampoco quedó al margen el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, quien amenazó a Rusia con sanciones en cuanto "la primera bota rusa" pise territorio de Ucrania al reunirse con el líder de ese país, Volodímir Zelenski. "Junto a otros países estamos preparando un paquete de sanciones y otras medidas que serán implementadas en el momento en que la primera bota rusa pise territorio ucraniano", señaló Johnson. Dijo también que tiene pensado llamar al jefe del Kremlin, Vladímir Putin, a su regreso a Londres, negó que dicha medida sea una "demostración de hostilidad hacia Rusia", sino una muestra de apoyo "a la libertad, la democracia y la soberanía ucraniana ante la amenaza rusa".
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, anunció que firmó un decreto para aumentar el número de efectivos del Ejército ucraniano de 250.000 hasta 350.000 hombres, lo que incluye un aumento en el salario. También contempla "la creación de 20 brigadas adicionales en el Ejército".
UE, EE.UU, OTAN y OSCE: "estrecha" coordinación
La Unión Europea (UE), Estados Unidos, la OTAN y la OSCE analizaron ayer las últimas novedades en la crisis entre Rusia y Ucrania, incluida la carta que Rusia envió ayer a Estados Unidos sobre sus exigencias, y reafirmaron su defensa de la seguridad europea y continuar su "estrecha" coordinación. Se trata de los principales resultados de una llamada "cuadrilateral" mantenida ayer entre el alto representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell; el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken; el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg; y el presidente de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), el ministro del Exterior de Polonia, Zbigniew Rau.
100.000 soldados más tendrá el Ejército ucraniano, informó el mandatario. Quedará con 350.000 hombres.
4.160 soldados tiene Estados Unidos desplegados en Lituania, Letonia, Estonia y Polonia.