La primera reunión de Boric con las bancadas
En el Palacio Presidencial del Cerro Castillo, en Viña del Mar, el Mandatario buscará comprometer a los parlamentarios con la agenda legislativa. La clave de los próximos meses, y esto lo saben los parlamentarios, está en dar certezas y evitar aventuras arriesgadas que puedan profundizar las diferencias ya detectadas.
Los políticos de viejo cuño suelen recordar con cierta nostalgia que al Gobierno entrante se le otorgaba un margen de tranquilidad en sus primeros meses, para que pudiera completar su instalación -nombrar ministros, autoridades regionales, en las empresas del Estado, etc.-, permitir que organizara su estrategia legislativa y coordinar las primeras acciones, que suelen estar enganchadas con las urgencias pendientes de la gestión anterior. Ese margen ya no existe y hoy el Ejecutivo que lidera el Presidente Gabriel Boric, así como le ocurrió a sus dos antecesores, Michelle Bachelet y Sebastián Piñera, debe enfrentar críticas y presiones desde el primer día que está en La Moneda, fecha de la cual hoy se cumplen apenas 14 días.
En medio de este ambiente crispado, tanto dentro como fuera de su coalición, Gabriel Boric se reunirá hoy con los parlamentarios oficialistas en el Palacio Presidencial ubicado en el Cerro Castillo, una de las siete colinas que eran visibles en la hacienda costera que luego daría paso a la ciudad de Viña del Mar. Estas citas suelen pasar algo desapercibidas, pero la de hoy ha levantado una expectativa particular, luego que diputados de Apruebo Dignidad manifestaran su apoyo a un quinto retiro de los fondos de pensiones -a contrapelo de la postura del Presidente y el ministro de Hacienda, Mario Marcel-. A ello se debe sumar el impasse entre senadores del PS y el ministro secretario general de la Presidencia, Giorgio Jackson, por la urgencia legislativa puesta por el Ejecutivo al proyecto de amnistía a las personas detenidas en el marco del estallido social de 2019, y los duros emplazamientos hechos por alcaldes, autoridades y organizaciones civiles por la falta de nombramientos de los secretarios regionales ministeriales en carteras tan relevantes como Transportes y Medio Ambiente.
Todo indica que la instancia servirá para limar asperezas y reinstalar la unidad de la coalición oficialista, algo perdida en los últimos días debido a los cruces de palabra y las diferencias de opinión en temas que no son sencillos ni superficiales. Los diputados oficialistas de los distritos 6 y 7 esbozaron en estas páginas varios asuntos que esperan tratar hoy, aunque el énfasis estará puesto en la necesidad de respaldar un paquete económico que permita consolidar una reactivación cuyo vigor inicial fue moderado pronto por el término de las ayudas fiscales, la alta inflación y las presiones externas al precio del petróleo, que a su vez amenazan los valores del transporte público. En los salones viñamarinos del Palacio Presidencial, el Gobierno debiera zanjar el futuro de sus proyectos estrellas en este ámbito, como la reforma tributaria y el alza en el salario mínimo, dos pilares que serán acompañados por programas específicos de ayuda. La clave de los próximos meses, y esto lo saben los parlamentarios, está en dar certezas y evitar aventuras arriesgadas que puedan profundizar las diferencias ya evidentes en la coalición.