Castillo inicia nueva etapa tras sortear intento de destitución
PERÚ. El mandatario obtuvo apoyos transversales en el Congreso y, tras salir airoso de la arremetida opositora, llamó a todos a terminar con la confrontación.
El fracaso de la oposición peruana en su segundo intento para destituir al presidente Pedro Castillo abrió paso a una nueva etapa en su gestión, en la que deberá enmendar las tensiones y falta de diálogo entre los poderes del Estado para consolidar la gobernabilidad.
Tras sobrevivir en el Congreso al juicio político que buscaba sacarlo del poder que asumió en julio de 2021, Castillo se mostró confiado en que la relación de su gobierno con el poder legislativo mejorará. Sin embargo, admitió que su relación con la oposición seguirá siendo difícil. "Este pequeño grupo que no ha logrado su cometido va a seguir su propia agenda", dijo ayer.
"El Congreso de la República tiene que entender que, por encima de la confrontación política, está el país", sostuvo este martes, tras agradecer a los legisladores por "haber dejado sentadas las bases del espacio democrático".
El lunes, cuando se cumplían ocho meses exactos desde que asumió la Presidencia de Perú, Castillo volvió a sortear la amenaza parlamentaria y lo hizo con un apoyo mayor del esperado. En diciembre otra solicitud no fue admitida a trámite.
La moción de vacancia, presentada por el partido ultraderechista Renovación Popular, no logró reunir los respaldos necesarios. Fraccionada, la oposición apenas sumó 55 votos a favor de la destitución, lejos de los 87 requeridos.
El rechazo de la medida desactivó, al menos por ahora, la opción de que Perú entrara en el espiral de ingobernabilidad que marcó la legislatura pasada y que derivó en la disolución del Congreso y la caída prematura de tres presidentes entre 2016 y 2021.
No obstante, parece prematuro pensar que alguien salió fortalecido de este escenario de confrontación, al que tanto el Ejecutivo como el Legislativo llegaron desprestigiados y con inéditos índices de desaprobación.
¿Incapacidad moral?
Durante su intervención ante el pleno, Castillo leyó un discurso de 13 páginas durante 12 minutos para desmentir las acusaciones en su contra.
"Esta moción no se sustenta en los hechos, en el derecho y carece de todas las pruebas", dijo, insistiendo en que los casos que lo involucran están en fase de investigación preliminar en la Fiscalía.
Los legisladores lo acusaban de una supuesta "permanente incapacidad moral", una figura constitucional controvertida que carece de una definición concreta y que el Congreso ha utilizado seis veces desde 2017 para tratar de destituir a presidentes.
Entre mociones de destitución y censuras contra ministros, el hemiciclo peruano conoció en los últimos cuatro años un total de 13 iniciativas de esta naturaleza, 7 de ellas en el último año, cuando se alcanzó un promedio de una moción de este tipo cada 52 días.
La siguiente será el próximo jueves, cuando el Congreso vote la eventual censura al cuestionado ministro de Salud, Hernán Condori, por su presunta falta de idoneidad y capacidad para el cargo que ocupa.
5 presidentes en 6 años
Pedro Castillo, quinto hombre en llegar al sillón presidencial de Perú desde 2016, podrá continuar al mando del país. Pero las turbulencias parecen estar lejos de cesar, pues sigue en curso una investigación por presunta corrupción en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, que involucra a sobrinos del mandatario y exfuncionarios gubernamentales.
Castillo, quien se impuso por apenas 40.000 votos en las elecciones del año pasado a la derechista Keiko Fujimori, ya acumula cuatro gabinetes de ministros distintos. El tercero ni siquiera llegó a ser investido.