Dudas y deudas tras crisis de Cormuval
Nuevo responsable de la educación pública local desestima posible cierre de establecimientos y aclara el tema de remuneraciones. El gerente de la Cormuval reconoció la existencia de una deuda previsional y, a la vez, un pasivo que al 31 de diciembre pasado llegaba a $11.118.509.482, cantidad que se podría cancelar con subvenciones.
El parto ha sido difícil. Las municipalidades dejan de ser sostenedoras de los colegios públicos y estos pasan a depender de un nuevo sistema. Ese cambio de mando es complejo y, desde el punto de vista político, para algunas municipalidades no es bienvenido, pues se pierde poder y recursos.
Ese debe ser el ánimo que existe en la casa consistorial de calle Condell, que hizo de la Corporación Municipal de Valparaíso (Cormuval) un influyente instrumento. Nostálgico, el alcalde Jorge Sharp hace cargos a la nueva estructura que depende directamente del poder central, el Sistema Local de Educación Pública (SLEP). En reunión del Concejo Municipal el jefe comunal llegó a afirmar que la nueva organización cerrará algunos colegios y aseguró que algunos docentes se sentían más cómodos en el antiguo sistema que en el actual.
Defendiendo la gestión municipal, Sharp afirmó que no se había cerrado ninguna escuela en su administración y, en ese sentido, planteó dudas sobre la situación de la Escuela Ernesto Quiroz Weber, de Placeres, que estaría enfrentando problemas.
Refiriéndose a la crisis permanente de la Cormuval, el jefe comunal sostuvo que "no argumentamos que los problemas financieros eran legados de administraciones anteriores para pagar deudas históricas previsionales y tampoco nunca nos negamos a mejoras salariales continuas". Agregó que "nunca hicimos despidos masivos, aunque reconocíamos y sabíamos que teníamos sobredotación en algunos ámbitos". Como coralario a su afirmación, aludió a un reciente despido "en mala forma" de 100 o 200 personas.
Por su parte, Eduardo Riquelme, gerente de Cormuval, reconoció la existencia de una deuda previsional y, a la vez, un pasivo que al 31 de diciembre pasado llegaba a $ 11.118.509.482, cantidad que se podría cancelar con subvenciones.
En medio del reconocimiento de deudas pendientes y de supuestos cierres de establecimientos, el director ejecutivo del SLEP Valparaíso, Manuel Pérez, hizo un llamado a la tranquilidad de las comunidades educativas. "Nosotros no hemos hablado de cerrar establecimientos, al contrario, hemos hecho todos los esfuerzos para que nuestras comunidades mejoren sus matrículas y mejoren su calidad en la educación", afirmó, y añadió que "como servicio, nunca hemos dejado de pagar sueldos ni menos leyes sociales; han existido errores, lo hemos reconocido en bonos u otros ítems de la liquidación de sueldo y los hemos solucionado, pero nunca se han dejado de pagar sueldos".
El aspecto económico del magisterio es importante tanto en el pago de la remuneración misma como en las cotizaciones previsionales. La regularización en estos aspectos es fundamental, pues necesariamente terminan incidiendo en la calidad de la educación pública. En estas materias hay que dar tranquilidad a los docentes y seguridad a las familias en cuanto a la mantención de los establecimientos existentes.