Editorial porteña publica a tres poetas de la llamada Generación de los 80
LITERATURA. Se trata de las antologías de Nicolás Miquea, Álvaro Ruiz y Guillermo Riedemann.
Con la publicación de los tres primeros títulos, la Editorial Bogavantes, sello independiente de Valparaíso, dio inicio a la "Serie de Antología". Se trata de tres poetas de la llamada "Generación de los 80", proyecto que cuenta con el financiamiento del Fondo Nacional del Libro y la Lectura, convocatoria 2021, a través del Fondo de Emergencia Transitorio.
Se trata de los poetas Nicolás Miquea, Álvaro Ruiz y Guillermo Riedemann, quienes comenzaron a publicar a fines de los 70 y principios de los 80. "Si bien su poesía está marcada por una crítica a la dictadura y posteriormente a la Transición, sus temas y formas poéticas poseen una riqueza y variedad expresiva que trasciende la contingencia política y los sitúa como autores destacados dentro de la poesía chilena de las últimas décadas, por lo que estas antologías representan un aporte relevante para difundir un trabajo creativo que abarca más de 40 años", dice Luis Riffo, editor.
Uno a uno
"Volver a nombrarme" se denomina el trabajo de Nicolás Miquea Cañas, quien nació en Llay Llay, en 1951, y vive actualmente en Valparaíso. En el prólogo del libro se explica que el autor "en sus cuatro libros publicados ('Textos', 'Que nos queremos tanto', 'Fermosa Fiera' y 'El libro de Atanasio Beley'), además de los textos inéditos del volumen de próxima aparición llamado 'Samosata' y su modo de contar historias, la experiencia vital y la experiencia de la escritura tienden a confundirse en un entramado en el que las referencias políticas y sentimentales, entre otras, se llevan a cabo mediante el circunloquio, la perífrasis y un discurso neobarroco que, por cierto, bebe de las aguas de la tradición poética española, la del Siglo de Oro de manera evidente, la literatura y la mitología grecolatinas, además de un diálogo permanente con la poesía hispanoamericana".
"Lo curioso es que ese gesto culterano, abundante en citas e incluso en información enciclopédica, funciona perfectamente como una parodia de su propia grandilocuencia, como una manera de explorar en las posibilidades canónicas y experimentales de la escritura poética para exponer las imposibilidades expresivas de las palabras", continúa.
Y agrega: "Miquea es ajeno a toda ingenuidad. Sabe que juega con un fuego que puede iluminar o devastar lo que nombra, porque viene de esa tradición tan consciente de los límites y las posibilidades de la palabra, que cuenta en nuestro país con poetas como Lihn, Juan Luis Martínez, Gonzalo Millán o Cecilia Vicuña, para quienes el lirismo no basta para sacar chispas del lenguaje y siempre se ha de escribir desde la sospecha y la desconfianza en las palabras".
El otro libro es "El resplandor original" de Álvaro Ruiz (Ottawa, 1953, y que reside en Punta de Tralca). En el prólogo de éste se explica que "la poesía de Ruiz ilumina y profana, pero no se trata del místico que ulteriormente espera impoluto su confirmación beatífica o del anacoreta entregado a la misantropía del retiro. Al contrario de estos tipos, los poemas de Ruiz son una invocación radicalmente humana, por lo tanto, embebido de querer hurgar la comprensión del todo, sin más pretensión que sembrar poética y maravillosamente en la senda sinuosa de la iluminación profana, la cual Benjamin detalla de inspiración materialista y antropológica, dos de los terruños que Ruiz cosecha a mano alzada, a pesar de los pesares, al decir de Lihn".
"Esta nueva antología que reúne la extensa obra del poeta. Nos abre e invita a hojear al interior de este arcón colmado de pertenencias que llaman por salir al encuentro del viaje y regreso de uno de los últimos poetas chilenos testigos de una época literaria ya ex-tinta", añade.
El tercer trabajo se denomina "Después es siempre antes", de Guillermo Riedemann, nacido en Valdivia (1956) y que ahora vive en Santiago. Se trata de una antología que en el origen tenía por nombre tentativo "El cuerpo de los hechos", lo que según el prólogo era una "alusión a esa pulsión que recorre la obra del autor por ver lo que sucede allá afuera, escuchar la degradación de las utopías, contar la historia como una mala broma o una broma sangrienta".
El título con el que finalmente salió publicado corresponde a una frase de Günter Grass que "sugiere la idea de un eterno devenir, con ecos griegos y pesadillas latinoamericanas, una red de hilos secretos que conectan hechos, personas y lugares, que nos recuerdan que la historia se repite, siempre", sostiene el texto.
"Dice Grass en su autobiografía: 'Después es siempre antes. Lo que llamamos presente, ese fugaz ahoraahoraahora, está vigilado siempre por un ahorapasado, de forma que también el camino de huida hacia delante, llamado futuro, solo puede recorrerse con suelas de plomo'. Mucho de ese después es siempre antes, se puede vislumbrar en la imagen que acompaña la portada de la presente antología: una fotografía tomada desde una colina que mira el pueblo de donde son originarios los Riedemann que emigraron al sur de Chile", suma.
"Poeta y psicólogo, nuestro autor propone en su poesía un viaje hacia ese antes de este presente, que es también un recorrido por la psiquis humana, tránsito que se ha construido sobre ciertos ejes temáticos que intentaré ir delimitando"; sostiene el prólogo.
Los tres libros fueron presentados a inicios de junio a través de una transmisión online y ahora están disponibles en librerías, y en la página web de la editorial.
"Sus temas y formas poéticas poseen una riqueza y variedad expresiva que trasciende la contingencia política y los sitúa como autores destacados dentro de la poesía chilena de las últimas décadas".
Luis Riffo, Editor de Bogavantes
"