"Nuevos ministros no tendrán efectos instantáneos, requieren de adaptación"
Sobre el nuevo escenario político nacional que surgió posplebiscito constitucional se refirió la diputada PPD por el Distrito 6 de la Región de Valparaíso, Carolina Marzán. Además, la parlamentaria oficialista abordó los recientes ajustes de autoridades en La Moneda.
- ¿Está de acuerdo con el cambio de gabinete?
- Los cambios de gabinete buscan refrescar y fortalecer al Gobierno. La decisión del Presidente Gabriel Boric fue apropiada, incorporando personalidades de destacada trayectoria en momentos en que la ciudadanía demanda mayor resolutividad y menos prueba y error.
- Incorporaron a referentes de la ex Concertación.
- Celebro un gabinete con gran presencia femenina. Por ejemplo, Ana Lya Uriarte (PS) como ministra de la Segpres. Espero pueda aplicar la necesaria política de los acuerdos y compromisos de manera transversal. Pero debemos ser conscientes que los nuevos ministros no tendrán efectos instantáneos, todos los cambios requieren de adaptación.
- ¿Qué opinión tiene ante el frustrado nombramiento de Nicolás Cataldo (PC) como subsecretario del Interior?
- Quienes estén a la cabeza de las distintas instancias gubernamentales deben representar características que permitan recuperar la legitimidad y confianza. Cuando se gobierna es necesario estudiar y tomar todas las precauciones para evitarlas.
- ¿Cómo ve la llegada del Socialismo Democrático a La Moneda? Gobernarán con dos coaliciones.
- Se debe gobernar con todos los sectores que representan a la ciudadanía, sin permitir que banderas partidistas excluyan a partes de la población, con profunda vocación de servicio. No es justo excluir a parte de la ciudadanía solo por diferencias ideológicas. Invito a aplicar la cooperación más que la confrontación.
- Con una ministra del Interior PPD, ¿qué desafíos le toca al partido, considerando el quiebre que sufrió la bancada en la Cámara?
- Al interior de la bancada no ha habido ni hay ningún quiebre. Lo que sucedió en su momento fue una desconexión con el Gobierno, cuando los y las independientes de nuestra bancada no fueron invitados a una reunión que era muy importante en Cerro Castillo.
- Instalados en la primera línea de Gobierno, ¿qué desafío tiene ahora el PPD?
- El desafío es cooperar con el programa de Gobierno. No creo en primeras ni segundas líneas de Gobierno, sino que creo y confío más en una gobernanza horizontal que involucre a sociedad civil en las tomas de decisiones.
"No hablaría de derrota"
- ¿La tomó por sorpresa el resultado del plebiscito?
- La expresión de la democracia siempre es una sorpresa, más aún en este caso que contó con el voto obligatorio. Muchas personas que se habían apartado de este deber cívico lo ejercieron.
- ¿Qué hay detrás de este importante triunfo del Rechazo?
- Ver esta expresión democrática como una derrota es cerrarse a leer y trabajar con el pulso ciudadano y restarle méritos a la participación. No hablaría de derrota, porque eso nos sitúa en una contienda y creo que daña a la política, prefiero hablar de aprendizajes y desafíos de construir una nueva forma de vincularnos.
- ¿Por qué falló la Convención?
- Creo que más que analizar tanto los errores, hay que aceptar el resultado para poder diseñar una propuesta que sepa dar respuestas a lo que la gente necesita y está pidiendo.
- ¿Y por qué cree que el Rechazo conectó con los chilenos?
- Los cambios estructurales involucran una cuota importante de temor a lo desconocido y cuando se conecta con el miedo es muy difícil ver con claridad el proceso de toma de decisiones, más aún políticas.
- Sobre lo que viene, ¿cómo debería seguir el proceso constituyente?
- El proceso constituyente no debe detenerse y debe trabajarse de la mano con la ciudadanía de manera democrática, puesto que ya se manifestó por una nueva Constitución.
- ¿Con la misma fórmula electoral?
- Sí, me parece fundamental la paridad, los escaños reservados y una representatividad diversa que vaya más allá del partidismo.
- ¿Cómo afecta el resultado a la conducción del Presidente?
-El resultado permite mayor claridad del sentir de la ciudadanía y, en consecuencia, de las prioridades que debiese acoger su gobernabilidad.
"No creo en primeras ni segundas líneas de Gobierno, sino que creo y confío más en una gobernanza horizontal". "Ver esta expresión democrática como una derrota es cerrarse a leer y trabajar con el pulso ciudadano".