C. Infanta / EFE

Tras semanas de incertidumbre e intensas negociaciones, finalmente el Sindicato de Actores de Estados Unidos se declaró en huelga formalmente ayer, tras las negociaciones fallidas con los estudios de Hollywood para la firma de un nuevo convenio colectivo.

El gremio de intérpretes de EE.UU. se une al paro que desde mayo mantiene el Sindicato de Guionistas (WGA), emprendiendo así una huelga simultánea por primera vez en 63 años que paralizaría la industria de Hollywood, incluyendo grabaciones, promociones y ensayos.

"Proceder a una huelga es algo muy grave que puede afectar a miles, si no millones de personas, en todo el país y en todo el mundo. (...) Llegamos con gran tristeza a esta encrucijada, pero no teníamos otra opción", dijo la presidenta de la institución, Fran Drescher. La decisión se tomó con el 98% de los miembros del gremio.

Un día antes, el SAG-AFTRA intentó llegar a un acuerdo conciliador con la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP) y en su reunión contaron con la presencia de mediadores federales como una medida de urgencia para desbloquear las negociaciones.

"Marcamos límite"

"Es muy difícil creer esto, pero nosotros no pudimos obtener lo que nuestros miembros merecen. De haber aceptado, la situación sólo habría sido peor. Aquí es donde marcamos nuestro límite", ahondó Drescher.

Antes había dicho que la respuesta de la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTP) hacia sus peticiones había sido "insultante e irrespetuosa", pese a la buena disposición del gremio.

La industria de Hollywood, que ya se estaba viendo afectada por la huelga de los guionistas, ahora tendrá que enfrentarse al cierre definitivo de las producciones que se habían mantenido a flote sin los escritores.

Entre otras demandas, los actores solicitan la mejora de las condiciones laborales, aumento de las tasas de pago mínimo y, lo más importante, los aumentos de los residuos que dejan los streaming.

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El actor norteamericano Kevin Spacey reconoció que es un "gran promiscuo", pero rechazó haber agredido "de manera violenta" a algunas de las víctimas que lo acusan en el juicio que afronta en Londres, Inglaterra, por 12 delitos de carácter sexual.

El intérprete, de 63 años, ganador de un Oscar, declaró ayer ante el tribunal de Southwark, en el centro de la capital británica, en el proceso judicial que tiene abierto por cargos de agresión sexual, agresión indecente y por ocasionar que una persona se involucre en actividad sexual sin consentimiento entre los años 2001 y 2013.

Uno de los casos

En su declaración, el intérprete se refirió a algunas de las acusaciones concretas vertidas contra su persona, como la de un hombre que le condujo en su vehículo a una fiesta a comienzos del año 2000, que aseguró que el actor lo agredió "de manera violenta, agresiva y dolorosa".

Él aseguró que el intérprete le "agarró la entrepierna de manera dolorosa" hasta casi provocar que "se saliera de la carretera".

"Eso nunca ocurrió", dijo Spacey, añadiendo que había tenido una relación de "flirteo" con ese hombre y que lo tocó de forma "romántica".

El nuevo filme, y posiblemente último, del conocido director japonés Hayao Miyazaki, "Kimitachi wa Do Ikiru ka" (¿Cómo vives?), llega hoy a las salas niponas rodeada de misterio, ya que sólo se ha dado a conocer el título y un único póster. El estudio de animación Studio Ghibli, productor de la película y cofundado por Miyazaki, optó por no mostrar ningún tráiler o anuncio publicitario, una estrategia poco frecuente y que buscaría fomentar la curiosidad. "Desde el principio, decidí no revelar de qué se trataba la película antes del estreno. Había promocionado películas a lo grande en el pasado, y no quería repetirlo", explicó el productor Toshio Suzuki.