Una noche que debía ser de ensueño se transformó en pesadilla para Everton
FÚTBOL. O'Higgins derrotó con justicia al cuadro viñamarino en Sausalito en un partido que los locales nunca pudieron controlar. El cupo para la Libertadores parece escaparse de las manos.
El libreto es horrorosamente parecido. El año pasado Everton perdió con O'Higgins en El Teniente en la última fecha del campeonato y quedó fuera de la Sudamericana. Anoche, los rancagüinos ganaron en Sausalito y sacaron al cuadro de Francisco Meneghini del cuarto puesto, que le podía dar un lugar en la Libertadores.
Con la goleada de Palestino ante el descendido Curicó, el cuadro de Viña del Mar queda quinto en la tabla, un punto abajo de los árabes.
Nada de lo que mostró hace nueve días en La Cisterna pudo repetir el equipo de "Paqui" en su casa. Ni la intensidad, ni el hambre, ni la seguridad defensiva, ni las variantes. Y lo más preocupante, tampoco la actitud, porque ayer el once de la Ciudad Jardín parecía estar disputando un partido de cuarta fecha de campeonato, cuando no hay urgencias ni objetivos al alcance de la mano.
Dio la impresión que para Everton la victoria sobre Palestino había cerrado la temporada.
Y si bien es cierto que los locales mostraron su peor cara, eso no debe desmerecer lo que hizo su rival, que planteó un partido tácticamente impecable, con una línea de tres jugadores de mitad hacia adelante como Castro, Hernández y Rabello que aprovecharon los espacios que dejaban a sus espaldas Felipe Campos y Leonardo Sequeira. Pero no sólo eso, sino que Azconzábal trabajó bien con sus volantes el taponeo de la salida que generan Madrid y Berríos, una dupla que no brilló como en otras jornadas por méritos de los rancagüinos, aunque también por un bajo rendimiento propio.
Mientras Everton propuso su clásico juego de construcción, diagonales y sorpresa, O'Higgins hizo daño con un estilo directo y un Blando que fue imparable para la zaga azulamarilla.
Los viñamarinos partieron bien, con un remate de Sequeira apenas desviado, un ataque de Matías Campos que Ignacio González sacó con los pies y un cabezazo de Barroso que estuvo a punto de entrar. Pero después del inesperado gol de Díaz, las ideas se acabaron para los locales.
Más allá de un remate desviado de Sáez y un disparo al medio del arco de Sánchez, en el segundo tiempo, el cuadro de Meneghini no volvió a llevar peligro.
Mientras tanto, O'Higgins pegó de entrada en el complemento con el tanto de Diego González a los 52'. Y después incluso estuvo más cerca de la goleada con una de Hernández, otra de Rabello y tres disparos de Blando, que apareció por el centro, por la derecha y por la izquierda.
Queda una fecha y el peor escenario posible: Everton va aCopiapó, pero no depende de sí mismo para seguir soñando con la Libertadores. Se le escapó de las manos.
45 puntos suma Everton en la tabla, uno menos que Palestino, que recuperó el cuarto lugar.
18.00 horas del próximo sábado, los viñamarinos visitan a Copiapó por la última fecha del campeonato.
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