"Si pones a Viña por delante, haces tu trabajo; si pones a tu partido, la ciudad se va a hacer añicos"
El pasado viernes, la alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, tuvo que dejar el municipio, tal como lo ordena la ley, un mes antes de la elección del próximo 26 y 27 de octubre. En su búsqueda por estar un periodo más en el cargo, intenta desmarcarse de los límites de su partido, el Frente Amplio, y hasta rivaliza con su propio Gobierno, más que por derechizarse como dicen algunos, ella explica que es por intentar ser la alcaldesa de todos los viñamarinos.
- ¿Después de estos tres años y medio a cargo del municipio, qué siente que faltó hacer?
- Hay que partir diciendo que si en 2020, junto a un grupo de vecinos, nos asistió la convicción de ganar la ciudad, fue porque la corrupción era impúdica y porque el desarrollo de los barrios, de nuestras oportunidades, se había ido al piso desde el 2000 en adelante. En ese momento, trazamos un programa que tenía 240 alternativas, pero que era muy aterrizado, siempre con la prevención de no saber lo que encontraríamos cuando entráramos, en términos de finanzas y corrupción, que terminó siendo, en cuanto a montos, uno de los casos más grandes que ha tenido el país, en medio de una pandemia. Tuvimos 36 meses para poder cambiar esa tendencia y hay dos análisis que surgen, uno subjetivo, mío, y uno con datos.
- ¿Cuáles son los datos con los que defiende su gestión?
- Los datos nos dicen que pasamos desde el lugar 114 de corrupción a nivel nacional al 14, en términos de estándar del Consejo para la Transparencia. Que fuimos uno de los municipios líderes en mostrar reactivación y dinamismo económico para salir de la pandemia. Alcanzamos la mayor cantidad de desarrollo en términos comerciales en la historia de Viña, al menos en los últimos 20 años. Logramos remodelar 42 establecimientos educacionales, ejecutar cuatro dispositivos de salud, hicimos la primera óptica comunal y aumentamos 1.000 veces la inversión en seguridad. Y lo más importante es que, al final, pudimos estabilizar las finanzas y vamos a cerrar esta etapa presentándonos a una reelección entregado el déficit más bajo conocido, desde que se transparentó por la Contraloría que los datos financieros del municipio se falseaban.
- Según su análisis subjetivo, ¿cuál es su autocrítica?
- Que soy una líder muy autoexigente, que le exige mucho a sus equipos y que siempre quiere más. Si me preguntas qué podemos mejorar para un nuevo periodo, todo. Si bien logramos todos los compromisos que teníamos, me hubiese gustado acelerar las obras de transformación del centro de la ciudad, completar el mejoramiento de las calles Valparaíso y Arlegui, junto con el Mercado Municipal. También me hubiese gustado entregar la subcomisaría de Carabineros y el complejo policial de la PDI.
PROYECCIón de INVERSIÓN
- ¿Qué esperaría del Gobierno Regional para el municipio, si es que gana?
- Tengo una cartera para inversión del orden de un poco menos de $100 mil millones que necesita financiamiento. Tenemos el compromiso, y sé que lo ha tomado también el gobernador, de la conservación completa de Agua Santa, que cuesta $ 11 mil millones y que sacamos de Secpla en 2022. Te diría que al gobernador, al igual que a mí, le entregaron una institución con bastante negligencia, con mucho gasto de arrastre y poca ejecución. En síntesis, nuestros principales proyectos son Agua Santa, la plaza Las Maravillas de Santa Julia, el financiamiento para la reparación de muchas calles y veredas del centro de la ciudad, la recuperación del borde costero, con un nuevo skatepark. También esperamos contar con financiamiento del gobernador para la nueva calle de acceso desde Forestal hasta Simón Bolívar.
- ¿Esas serían sus prioridades?
- Es que todos esos proyectos que te digo están listos para financiamiento con todo lo que eso significa. Nosotros sólo necesitamos una unidad financiera y Viña del Mar vuela. Porque nosotros no nos demoramos nada en firmar los convenios, levantar las licitaciones y ahí depende de cuánto demore la ejecución de las obras. La ciudad sólo se va a consolidar y avanzar si es que tenemos buenos partners para hacer ese trabajo. Si el gobernador y sus consejeros regionales nos apoyan, Viña del Mar podría recuperarse de la debacle que sufrió y recuperar también lo que alguna vez fue.
- Hay una crítica del candidato opositor que plantea que, al igual que han hecho otros alcaldes, usted puso buena parte de los recursos en los últimos meses de gestión, ad portas de la campaña. Que ahora recién tiró toda la carne a la parrilla, como se dice
- Me pregunto cuál será la opinión que tienen los profesionales de alto nivel sobre eso, considerando que el ciclo de vida de un proyecto de inversión parte con el perfil, su formulación, prefactibilidad, ingenierías de detalle, una licitación, tiene que aprobarse y mucho más, es complejo. Un proyecto no se pide por aplicación de teléfono y eso lo debería saber un profesional de alto nivel. Los resultados que se ven sólo son posibles porque no descansamos para lograr inaugurar obras y eso no es para ganar una campaña, sino porque es nuestro trabajo.
Más que el fRENTE amplio
- Hay un análisis más o menos común que la posiciona como una alcaldesa que, pensando en la reelección, dejó de lado su nicho de izquierda y más bien se ha derechizado. ¿Es algo que ha trabajado?
- En Viña somos personas muy especiales. No importa dónde vivas, si eres una gran empresaria, o si vives en un barrio tradicional, de Forestal o Santa Julia, hay un sentido de identidad muy grande y, por eso, ponemos a Viña del Mar antes que todo, porque hay que incluirlos a todos. Una líder de una buena ciudad une y no divide. Te diría que tenemos ciudadanos notables en nuestra campaña, que incluso militan en otros partidos, pero que no quieren retroceder a lo que había antes, con Reginato, que nos avergüenza como viñamarinos.
- ¿Pero se ha movido desde su discurso original?
- Es que yo no tengo que cambiar los discursos, porque la ciudad se construye transversalmente y la participación es de todos. La gente sabe y dice: 'pese a que la alcaldesa es de un color distinto al mío, me ha escuchado incluso más que mi propio sector'. Nuestra idea es querer unir y no dividir, esa es la fórmula. Si pones a Viña por delante, haces tu trabajo; si pones a tu partido político por delante, la ciudad se va a hacer añicos. Una persona que está altamente politizada y sobreideologizada es capaz de destruir una ciudad.
- ¿Poner a Viña por delante incluso si eso implica pelear con su Gobierno?
- Insisto, para nosotros Viña del Mar es primero, sobre todo en materia de seguridad. Las críticas que he hecho alguna vez siempre han sido porque he visto fallas en la capacidad de respuesta a las necesidades de la ciudad que lidero. No tiene que ver con críticas personales, ni sobreideologizadas contra el Gobierno. Además, siempre mis críticas, que buscan la mejora, van a acompañadas de propuestas. Hoy día uno entiende que, en materia de seguridad, la debilidad institucional es la falta de dotación. Mi propuesta es que se debe hacer algo de manera inmediata para solucionar ese déficit, porque no podemos esperar tres años. Lo único que pedimos es facultades y presupuesto, en el marco de la discusión presupuestaria. Ofrezco que hagamos el piloto acá, para que el Gobierno nacional entregue recursos directos y así fortalecer, con un escalafón especial, a nuestras unidades e inspectores.
Críticas al adversario
- Usted ha dicho que el círculo de la exalcaldesa Virginia Reginato quiere volver al municipio. ¿Lo dice por el candidato Iván Poduje? Porque él insiste que es independiente de los partidos y que trabaja con una oposición transversal.
- Esto es muy concreto, el ser independiente por la ley 18.700 no significa ser independiente de tus relaciones personales y de tus vínculos privados. No se pueden ocultar esas relaciones privadas y personales con una calidad jurídica en un proceso eleccionario denominándose como independiente. Relaciones privadas que se mantienen con quienes corrompieron nuestra ciudad no sólo por corrupción, sino por manejarla con impúdica negligencia.
"(En el candidato de la oposición) "hay relaciones privadas que se mantienen con quienes corrompieron nuestra ciudad".
"Soy una líder muy autoexigente, que les exige mucho a sus equipos y que siempre quiere más. Si me preguntas qué podemos mejorar para un nuevo periodo, todo".