"Nuestro piso es que se condone el CAE a todas las personas que ganan de $750 mil para abajo"
Una de las grandes promesas de campaña del Presidente Gabriel Boric se ha transformado en un dolor de cabeza en su tercer año de mandato. Pese al compromiso inicial de condonar universalmente el Crédito con Aval del Estado (CAE), dos años después el Ejecutivo ha descartado otorgarle un "perdonazo" a la totalidad de los deudores, dada la estratosférica inversión que representaría la medida -más de $US 11.900 millones, cerca de un 4% del PIB nacional-. Hoy, en cambio, el Gobierno se encuentra trabajando en un proyecto que, si bien buscará ponerle fin al CAE, ofrecería una condonación parcializada, con foco en los sectores más vulnerables.
Luego de encabezar una manifestación estudiantil en las afueras del Congreso Nacional, Samuel Briceño, presidente de la Federación de Estudiantes de la U. de Valparaíso (UV) y vocero de la Confech, no esconde su decepción ante una oferta de campaña que hasta hoy no ha sido cumplida.
- Este domingo el ministro Cataldo confirmó que el proyecto para terminar con el CAE e impulsar un nuevo sistema de financiamiento va a ingresar al Congreso el 14 de octubre. ¿Cómo reciben la noticia?
- Lo primero es lamentar lo mucho que se ha retrasado el proyecto, por diferentes razones, como lo ha mencionado el Ejecutivo. Obviamente, valoramos que por fin tengamos una fecha clara y esperamos que no vuelva a haber un atraso. Nosotros esperamos que haya una condonación total y real del CAE y que esto vaya también con un sistema de financiamiento del cual pase la lógica del sistema Auge.
- Se estima que la condonación total del CAE tendría un costo de US$11.900 millones, equivalente al 4% del PIB. ¿Se justifica este gasto, pensando en otros requerimientos urgentes a nivel regional, como lo son la salud y la vivienda?
- Yo creo que justificaciones hay muchas. El 68% de las personas endeudadas gana menos de 750 mil pesos. Además, es una mala política no solamente para las familias, sino que también para el Estado, en razón de que se ha gastado una cifra cercana también a la que se estima la condonación total en torno a financiar un sistema que solamente ha generado que los bancos ganen mucho dinero, porque tenemos que tomar en consideración que, aproximadamente, el Estado, cuando hace la compra de los créditos por morosidad, paga alrededor de un 33% de recargo por sobre cada cartera de deuda. Tenemos casos donde se paga hasta más del 50% por las deudas, en el caso del Banco BCI, como informó el estudio de la Fundación Sol.
- El Gobierno prácticamente ha descartado la condonación universal del crédito, limitándola a los casos más críticos o vulnerables. ¿Fue una decepción para el gremio estudiantil que no se cumpla la promesa de campaña del Presidente Boric?
- Para nosotros es una decepción, entendiendo, obviamente, la responsabilidad que han tenido los anteriores gobiernos en esta situación. Nosotros seguiremos firmes con nuestra posición respecto a la condonación del CAE o, al menos, que se condone el crédito a todas las personas que ganan desde 750 mil pesos para abajo. Es una propuesta que tiene toda lógica, como lo es en el caso del impuesto a la renta, donde alrededor del 75% de las personas no lo pagan, porque ganan menos de 750 mil pesos.
"Lo compartimos"
- El ministro Cataldo dice que la condonación parcial debe ser "justa", priorizando a aquellos que han abonado la deuda.
- Es un criterio que nosotros compartimos. Claramente, tiene que haber una priorización para quienes han hecho el esfuerzo, con todas las dificultades que tiene, de pagar un crédito con una alta tasa de interés, porque es irrisorio la cantidad de años que se pagan. También creemos que debe existir un criterio de género, entendiendo que el 57% de los deudores son compañeras.
- ¿Llama la atención que el Gobierno ingrese el proyecto el 14 de octubre, ad portas de las elecciones municipales y regionales?
- No entramos en esa discusión respecto a si la fecha responde a intereses políticos o no. Creemos que el Gobierno podrá tener sus razones, esperemos que no, pero a nuestro juicio la discusión va por otro lado, y nosotros sí ponemos ahínco en que (el proyecto) tendría que haber sido mucho antes presentado. Queremos poner el foco en torno a poder dar alguna solución a las personas que están endeudadas y a las personas que tienen que tener claridad respecto de cuál va a ser el financiamiento que van a tener, porque tampoco podemos dejar a las personas en una nebulosa respecto a cómo van a financiar sus estudios. Estamos hablando del futuro de miles de jóvenes con sueños.
- ¿Qué ha pasado con el movimiento estudiantil estos años, que ha parecido mudo, sin ningún emplazamiento de importancia al Gobierno de turno?
- Más que estar mudos, la pandemia representó dificultades organizativas, sobre todo a nosotros como movimientos estudiantiles. Y eso ha generado un proceso de reorganización, pero no quiere decir que no hagamos emplazamientos al Gobierno, que no tengamos la voz crítica hacia el Gobierno, lo cual lo hemos planteado. ¿Por qué? Porque nosotros vamos a seguir en pie de lucha por mejores condiciones para nuestros compañeros.
- ¿Estas manifestaciones podrían radicalizarse?
- Por el momento estamos esperando a la presentación del proyecto y ahí, como consideración a nivel nacional, vamos a ir definiendo el trazo, el camino que vamos a seguir, el que también va a ir muy de la mano con la discusión legislativa.
"Para nosotros es una decepción (la no condonación universal del CAE), entendiendo, obviamente, la responsabilidad que han tenido los anteriores gobiernos".