Gore afina estrategia ante Hacienda para revertir el bajo presupuesto
REGIÓN. Conectividad, seguridad, salud y las emergencias son áreas claves sin financiamiento.
El intendente, Gabriel Aldoney, y el Consejo Regional de Valparaíso acordaron realizar una sesión especial para planificar la estrategia que tendrá la región con respecto al recorte presupuestario de $2.800 millones que sufrió el FNDR, equivalente al 5% de la inversión regional. La decisión fue adoptada por Hacienda a objeto de redistribuir partidas para financiar la emergencia por incendios forestales en la zona centro-sur.
La determinación gatilló un rechazo transversal de parlamentarios y autoridades, razón por la cual en el último pleno del Core se resolvió abordar el tema con premura, para definir las prioridades regionales, proyectos y acciones para presentar ante Hacienda.
La intención es que el ejercicio presupuestario de 2018 incorpore mayores recursos. El detrimento de partidas que ha sufrido la región desde hace más de una década se ha transformado en un problema sin solución para las autoridades de turno.
Para el 2017, la Región de Valparaíso tiene un presupuesto inicial de $66.347 millones, ocupando el quinto lugar a nivel nacional, muy por debajo del Biobío (M$ 112.146); Metropolitana (M$ 104.630); Araucanía (M$ 100.210) y Maule (M$ 71.387).
El presidente del Core, Daniel Garrido, comentó que si bien la región no está ajena a la solidaridad a propósito de los incendios y catástrofes sufridas, cree necesario abrir una discusión para temas más de fondo que afectan a la zona.
"Estamos recibiendo recursos insuficientes de acuerdo a lo que a nuestra región le corresponde comparado con otras regiones. El Estado debe incrementar los aportes que entrega a través del FNDR, está al debe, donde además el mayor porcentaje de proyectos aprobados está relacionado con obras civiles, es decir, no sólo resuelve temas concretos y necesidades del desarrollo de la región, sino que también entrega empleabilidad", argumentó Garrido.
El personero apuntó a la falta de descentralización en el país, que se traduce en factores negativos para la región. "Las empresas públicas y privadas, en su mayoría, ni siquiera tributan en la región y tampoco existe una ley para dejar parte de los recursos para ser distribuidos en el desarrollo y proyectos en pos de la economía. No hay descentralización sin recursos".
El presidente del Core criticó que mientras a la región se le exige ejecutar el 100% del gasto, existen otras instancias, como los ministerios, "que no necesariamente cumplen con el 100% del gasto todos los años. Los recursos también se pueden recortar de ahí y no del lado más fácil que son las regiones".
El intendente Aldoney apuntó a la urgencia de realizar la discusión y elaborar una estrategia regional, ya que a mitad de año Hacienda comienza a elaborar el presupuesto nacional que va al Congreso para ser aprobado. "Como Gore debemos ser capaces de aunar todas las fuerzas políticas para lograr una equidad en la distribución de los recursos para las regiones".
La autoridad regional dio cuenta de una seria de proyectos y áreas "donde tenemos tremendos déficit", como la congestión vial en el Gran Valparaíso, seguridad ciudadana y las emergencias, en los que no se podrá avanzar sin los recursos adecuados. "A nosotros no se nos pueden seguir quemando las casas, ni tener los incendios como en la provincia de San Antonio, donde se quemaron más de 5 mil hectáreas, tendremos que hacer un sacrificio presupuestario", afirmó.
El core Ricardo Aliaga (DC) consideró "impresentable que una región que la tienen en el lugar número siete en distribución de recursos del Estado, que además le descuenten el 5% a un presupuesto tan exiguo como el nuestro, me parece que debiese replantearse la distribución a nivel parlamentario con una ley de presupuesto".
El presidente de bancada RN en el Core, Percy Marín, también se refirió al llamado del intendente para una estrategia común. "Hay que verlo con total y absoluto realismo, porque, lamentablemente, hemos visto en estos tres años del gobierno de la Nueva Mayoría que se ha actuado con una absoluta desprolijidad y un nivel de irresponsabilidad nunca antes visto".
Marín se mostró escéptico ante el escenario de que "el gobierno vaya a acoger el llamado para que aumente el presupuesto. Nuestra región está recibiendo el fuerte embate de la industria contaminante con la absoluta venia de la autoridad regional, obviamente encomendada por el nivel central. Este llamado a la unidad es un show al cual no nos debemos prestar porque es generar falsas expectativas".
"A contar del año 2000 se han venido registrando brechas presupuestarias con regiones como la del Biobío y Metropolitana. Creo que llegó el momento de revertir esta situación"
Gabriel Aldoney, Intendente regional"