Lo advirtieron en la semana y cumplieron. Los altos precios de las entradas para el duelo de ayer no sólo molestó a los hinchas de Everton, sino que también generaron un llamado de la barra oro y cielo para no asistir al duelo ante Universidad Católica.

Finalmente, la presión dio resultado, ya que si bien asistieron 6.524 personas al estadio Sausalito, el sector en el que habitualmente se ubica la parcialidad local sólo fue ocupado por un centenar de hinchas. Mientras tanto, un grupo de fanáticos auriazules llegó hasta la entrada de la población Textil Viña para mostrar su malestar en la previa del cotejo.

El presidente del club, Pedro Cedillo, declinó dar declaraciones respecto a la inédita protesta. Lo mismo hizo el presidente honorario Antonio Bloise al momento de ser consultado sobre el tema por El Mercurio de Valparaíso. Eso sí, el exmandamás del cuadro viñamarino dio su opinión en las radios.

"Me apena, no encuentro que sea algo positivo. No es algo bueno para Everton ni para la gente. Siempre en la vida uno puede tener desencuentros y distintas formas de ver las cosas, pero también la vida te entrega la posibilidad de poder dialogar y buscar una solución cuando uno siente cariño por algo", dijo el extimonel a Radio Valparaíso.

Junto con criticar el actuar de los hinchas, Bloise agregó que "no justifico ni me quiero referir si es un precio alto. Para la gente es algo caro, pero (la dirigencia) tendrá sus justificaciones. No soy parte de la decisión, pero me imagino que habrá una evaluación previa para poder hacerlo".Por su parte, el coautor del libro "Historia de Everton", Pablo Diez, aseveró que los hinchas no aprovecharon las alternativas para rebajar el precio de su entrada.

"Lamento que los hinchas de la barra no vinieran al partido a apoyar. Yo creo que el hincha de Everton tiene que venir a todos los partidos, al menos a mí no se me pasa por la mente faltar a un partido, nosotros estamos para apoyar y no para hacer campaña de no venir al estadio", reflexionó, añadiendo que la directiva auriazul, desde su perspectiva, aprenderá de esta situación y tomará las medidas adecuadas respecto al precio en el futuro.

Una opinión discordante manifestó el expresidente de la barra "Los Ruleteros", Gustavo Heresman, quien destacó la organización de los evertonianos para no asistir al partido, pese al "gran dolor de cada hincha por no estar presente".

"La dirigencia no está pensando en la hinchada, que son personas de bajos recursos y que siguen a Everton por años. Me hubiera gustado que hace diez años, cuando el club terminó como sociedad anónima, hubieran estado todos unidos para que esto no hubiera sido así", cerró.

"Para la gente es un precio alto, pero (la dirigencia) tendrá sus justificaciones. Me imagino que habrá una evaluación previa para hacerlo".

Antonio Bloise, Presidente honorario de Everton"

Un concepto que se podría adecuar completamente al planteamiento que Everton presentó ayer ante el cuadro de Universidad Católica en el estadio Sausalito, es el de la desesperación.

El elenco oro y cielo esperaba el duelo con los cruzados como una instancia ideal para congraciarse con su hinchada y obtener su primer triunfo de local, y eso se notó. Primero, por la confianza que daban los ocho años sin derrotas que el cuadro viñamarino ostentaba sobre los cruzados en el coloso de Avenida Padre Hurtado, y luego porque apenas el juez Cristián Andaur dio el pitazo inicial, el duelo se transformó en un continuo ida y vuelta.

Tal razón hizo que cada equipo intentara adueñarse de un sector particular de la cancha para atacar. Los dirigidos por Pablo Sánchez eligieron ambas bandas, que en los primeros minutos fueron pasillos para que Dilan Zúñiga y Camilo Rodríguez soltaran remates que llevaron peligro a la valla defendida por Matías Dituro.

Sin embargo, los de la precordillera respondieron de inmediato centralizando su ataque por medio de los avances de los volantes Diego Rojas y Diego Buonanotte. A los 10', el trasandino sirvió un tiro libre que cabeceó Germán Lanaro y puso en riesgo al arco evertoniano.

Sólo nueve minutos demoraría en llegar el primer punto de inflexión del encuentro. El argentino Germán Voboril avanzó libre de marca hasta tres cuartos de cancha, distancia suficiente para cambiar de frente y habilitar al ariete David Llanos, que con tiro rasante venció la resistencia de Eduardo Lobos y puso el 1-0.

Everton perdió el norte, al punto que el elenco cruzado pudo avanzar aún más y ampliar las cifras dos minutos más tarde, pero el meta oro y cielo contuvo en doble instancia los intentos de José Pedro Fuenzalida y Andrés Vilches.

INNECESARIA expulsión

Pero la jugada que definiría gran parte del encuentro llegó a los 35', luego de un choque entre el cruzado Luciano Aued y Camilo Rodríguez, quien lanzó una innecesaria patada al rostro del trasandino, haciéndolo sangrar.

La reacción del árbitro fue la de expulsar al lateral evertoniano y dejar con diez hombres a los viñamarinos, que a esas alturas reclamaban que en la jugada inmediatamente anterior, el portero del cuadro estudiantil había salido del área con el balón en sus manos.

En la segunda mitad, Everton buscó la igualdad de todas las formas posibles, aprovechando el retroceso y el abandono de la presión en el equipo comandado por Beñat San José.

De hecho, a los 53' los auriazules pudieron poner la paridad tras un corner mal rechazado por la zaga cruzada. El volante Diego Orellana remató desde treinta metros y el arquero universitario dio rebote, el cual no fue capitalizado por Lucas Mugni.

A esas alturas, el único expediente de ataque por parte del visitante fue el contragolpe, destacando a los 61' un saque desde el fondo que sorprendió a la última línea evertoniana, que no pudo evitar que Llanos llegara con balón dominado a diez metros del pórtico local. No obstante, Lobos mostró buenos reflejos y se ganó los aplausos de la parcialidad local, tras desviar el esférico en brillante acción.

De ahí en más, y conforme al paso de los minutos, los de la Ciudad Jardín comenzaron a apretar las líneas y ahogar la salida cruzada, pero los ingresos de Patricio Rubio por un opaco Marco Bueno, y de Álvaro Madrid en la posición de Iván Ochoa, no lograron la profundidad esperada.

Ahora, el cuadro oro y cielo tendrá que esperar hasta el jueves para una eventual primera victoria en casa, cuando tengan que enfrentar a Caracas F.C. de Venezuela, por la primera fase de la Copa Sudamericana, a las 21:30 horas.

"Camilo Rodríguez cometió un error grave y lo natural es que no comparta su decisión. Nos afectó en demasía durante el partido".

Pablo Sánchez, Director técnico de Everton"

de febrero es el día en que los oro y cielo tendrán su debut ante Caracas por la Copa Sudamericana, partido en el que buscarán su primer triunfo como local en el año. 22