"No voy a votar a favor de un proyecto de ley que no resuelve el problema de la violencia"
"Los ataques con bombas molotov son tan alarmantes como las matanzas que se producen en Estados Unidos", advierte la presidenta de la Comisión de Educación de la Cámara, Cristina Girardi (PPD), al evaluar los argumentos que se expusieron en el debate del proyecto Aula Segura en el Senado. La iniciativa comenzará ahora su tramitación en la Cámara.
- ¿Qué le parecieron los cambios introducidos en el Senado?
- Igual las modificaciones que tuvo en el Senado se mantienen dentro de la misma lógica del proyecto presentado por el Gobierno y no considera que esto ocurre en un espacio pedagógico. No es lo mismo que estos hechos ocurran en la calle, en un consultorio o en una cárcel que si pasan dentro de un establecimiento escolar cuya misión es formar, educar y, por supuesto, cambiar comportamientos. Eso no aparecía en el proyecto original y tampoco con la modificación que tuvo en el Senado. O sea, hay cero pedagogía, cero educación. Por eso nosotros le vamos a hacer modificaciones en ese sentido.
- ¿Cuáles?
- Nosotros ya tramitamos un proyecto de ley en la comisión y en cuya tramitación invitamos también al Ministerio, pero que estuvo absolutamente ausente, y que tiene que ver con la violencia escolar. Nuestro proyecto de ley, a diferencia del que envió el Gobierno - que planteaba sólo entender la violencia como patrimonio de los jóvenes o de los niños, que son los malos de la película- entendíamos que al interior de los establecimientos educacionales se daba una violencia cruzada que va de adultos a niños, de jóvenes a adultos, de adultos a adultos, como es el caso de padres y apoderados que agreden a los profesores.
- ¿Qué falta?
- Hay un querer hacerse cargo de cómo se produce la violencia y por qué se produce.
- El Gobierno insiste en que se trata de un proyecto acotado para enfrentar una crisis urgente...
- Es que no es un proyecto acotado. El Gobierno ha dicho que esta iniciativa va a resolver el problema de la violencia. La pregunta es: ¿esto resuelve el problema de la violencia? Cuando tu sólo quieres mirar una parte del problema, si este problema tiene otras formas de manifestarse difícilmente lo vas a resolver. La pregunta que también hay que hacerse respecto al mismo proyecto del Gobierno, es que si existiendo la medida de expulsión en el sistema escolar de hoy y si esto es lo que resuelve el problema de la violencia, ¿por qué, si ya existe, no lo ha resuelto? Creo que la discusión ha sido sumamente superficial en términos de que echar a un alumno te va a resolver el problema. Lo que va a ocurrir es que te vas a deshacer del alumno y ese alumno a lo mejor va a dejar de ser un problema para ti, pero obviamente va a ser un problema donde llegue. Lo que ha demostrado la expulsión es que a pesar de que se ha aplicado, como en el Liceo de Aplicación donde se han expulsado 16 alumnos hasta ahora, la duda es: ¿se resolvió el problema? No se resolvió. La pregunta de fondo es: ¿para qué se presenta este problema? ¿Para resolver el problema de la violencia o para hacer otra cosa? Porque para resolver el problema de la violencia está claro que no sirve.
- ¿Para qué entonces? ¿Un efecto mediático?
- Puede ser mediático o para satisfacer una demanda del alcalde Alessandri. Porque, además, lo que dijo hasta el propio ministro Chadwick es que las situaciones que se describen en este proyecto están acotadas a siete colegios de la comuna de Santiago. El problema es para quiénes estamos legislando y para qué estamos legislando. Si es para resolver la violencia, este proyecto no la resuelve.
- ¿Cómo se resuelve?
- Si realmente hay interés por resolver la violencia pongamos elementos en este proyecto de ley que colaboren en ese sentido. No digo que no se pueda expulsar a un alumno, pero eso ya está en nuestra legislación. Estando ya la expulsión en nuestra legislación, ¿para qué sirve ese proyecto?
- El presidente del Colegio de Profesores criticó el proyecto señalando que las expulsiones se podían judicializar y el alumno podría ser reingresado al establecimiento aún más empoderado.
- Puede ocurrir. Esos pueden ser los coletazos, pero eso puede ocurrir con la norma actual igual. Hoy puedes expulsar y si hay una demanda de los padres y apoderados por una expulsión hecha a la rápida, sin justificación, sin investigación, como estaba originalmente el proyecto, obviamente puede terminar judicializado. En el primer ingreso de la propuesta los constitucionalistas que fueron a la Comisión de Constitución dijeron que era inconstitucional. Se supone que ahora lo volvieron constitucional y que hay un tiempo mayor para el proceso, pero es lo mismo que hay hoy día en la ley. Y donde había dudas es que si aplicabas la expulsión para alejar a la víctima -porque uno de los principales argumentos de La Moneda para que este proyecto fuera exprés era que la víctima no estuviera en contacto con el victimario-, qué pasa con la suspensión. Y dijeron no, hay varios fallos de la Corte Suprema que dicen que la suspensión ya es una sanción y para la misma falta no puedes aplicar sanciones distintas. Esto a pesar de que existen circulares de la Superintendencia que establecen la diferencia y dónde se pueden aplicar ambas. Nosotros dijimos, si esa es la duda, ¿por qué no ponemos eso en la ley? Que la suspensión se pueda aplicar como medida cautelar. Y si crees que vas a expulsar a un alumno porque cometió una falta muy grave, se pueda suspender mientras dura la investigación. En el proyecto que nosotros aprobamos en la Cámara lo dejamos así.
- La senadora Yasna Provoste, presidenta de la Comisión de Educación, dijo que habían humanizado el proyecto al incluir el concepto de convivencia escolar.
- La discusión fue tan tensa en el Senado, porque se estaba tratando de legislar para frenar la violencia y el ambiente se cortaba con cuchillo, y durante el debate ninguno de los expertos dijo que el proyecto era bueno y todos dijeron que el proyecto no resolvía el problema de la violencia. Nosotros tenemos un problema: esta sociedad está cada día más violenta. Y lo que le está pasando a la sociedad se replica en las escuelas y colegios. Y si se quiere resolver ese problema, lo primero es ver por qué no se ha resuelto el problema o por qué se está generando. En el debate los que defienden el proyecto hablaron de lo alarmante que son los ataques con bombas molotov y los expertos respondieron que eran tan alarmantes como las matanzas que se producen en Estados Unidos o en Europa. Y en esos lugares lo punitivo lo único que hizo fue agravar el problema.
- Entonces, ¿no está de acuerdo con la propuesta?
- No voy a votar a favor de un proyecto que no resuelve el problema. Sí voy a intentar modificarlo para resolver la violencia. Como diputada presentaré indicaciones en el sentido de tratar de que este proyecto le sirva a alguien y que no sea sólo por un tema comunicacional o efectista.
"La discusión ha sido superficial en términos de que echar a un alumno resuelve el problema. Lo que va a ocurrir es que te vas a deshacer del alumno, pero ese alumno va a ser un problema donde llegue" "Aula Segura no es un proyecto acotado. El Gobierno ha dicho que esta iniciativa va a resolver el problema de la violencia. La pregunta es: ¿esto resuelve el problema de la violencia? No lo resuelve" "(¿Por qué lo presentaron?) Por un tema mediático o para satisfacer una demanda del alcalde Alessandri. Porque las situaciones que se describen están acotadas a siete colegios de la comuna de Santiago""