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- Por su condición de mapuche, usted pudo competir por un escaño reservado. ¿Por qué decidió no tomar esta opción y, en cambio, ir junto a candidatos de Unidad Constituyente?
- La opción del escaño reservado no la consideré desde un inicio, porque el proyecto de ley estableció un criterio bastante sabio y virtuoso para el perfil de candidatos y candidatas indígenas. Ahí se estableció que ellos tuvieran sólidos anclajes territoriales y comunitarios, es decir que fueran legítimos representantes de los distintos pueblos y sus organizaciones. Ese lógicamente no es mi caso, yo soy periodista, escritor, he tenido acceso a tribuna pública por mi trabajo, y creo que no me corresponde suplantar el lugar de los dirigentes indígenas de los distintos territorios. Por ello me pareció más pertinente competir en la elección regular, y desde allí, intentar el desafío de sumar un nuevo constituyente indígena a los 17 que van a estar en la Convención por escaño reservado.
- ¿Tuvo conversaciones con otras fuerzas políticas para competir en sus listas? ¿Qué fue lo que en definitiva lo impulsó a postular de esta forma y no como independiente fuera de pacto?
- Uno como independiente tiene que hacer distintos malabares para conseguir un cupo, no es fácil para quienes no tenemos en nuestra biografía militancia partidista lograr, de buenas a primeras, que los partidos nos abran la puerta para competir. Los partidos y los pactos partidistas generalmente privilegian a sus propios militantes, pero en este caso particular, del proceso constituyente, creo que sucedieron varias cosas interesantes. Una de ellas es que algunos partidos, principalmente de centro izquierda, abrieron bastante la puerta a la participación de independientes, especialmente de aquellos que vienen del mundo de la cultura, de las comunicaciones y también del mundo artístico. Yo toqué varias puertas en verdad, de distintos bloques y donde tuve mayor recepción, donde tuve un inmediato interés por apoyar mi candidatura, fue en el PS y es un cupo que yo agradezco. Entiendo que los partidos han hecho autocrítica sobre cómo han desarrollado durante largas décadas su trabajo político, y creo que ésta ha sido una oportunidad en la cual ellos han podido reflexionar sobre eso y abrir un poco la ventana de sus conglomerados para que ingrese aire fresco.
Avanzar hacia un estado federal
- ¿Cuál son a su juicio los contenidos mínimos que debe contener la nueva Constitución? Varios postulantes han puesto su foco en asegurar e incluir algunos derechos o en un cambio en la estructura del Estado.
- La Constitución yo la entiendo como un texto que se compone, metafóricamente hablando, de dos libros. Un libro trata sobre los derechos y obligaciones, o derechos y deberes de los ciudadanos, en el que están los derechos sociales que todos esperamos y existe consenso a estas alturas, de que estén garantizados en la Constitución. (…) Y un segundo libro que trata sobre el poder y cómo se distribuye, y ahí está la estructura del Estado, los sistemas de gobierno, las instituciones de la República. En lo personal, como candidato, me ha interesado mucho hacer notar la importancia de este segundo libro, de cómo se distribuye el poder; y eso, entrada mi campaña, me ha hecho hacer mucha pedagogía en torno a la necesidad de reformas estructurales a nivel de Estado, de sistema de gobierno y a nivel de cómo entendemos el poder en Chile. Lamentablemente nosotros somos herederos de un estado del siglo XIX, que es un Estado unitario, centralista, con un sistema de gobierno presidencialista en extremo, casi monárquico en las atribuciones que tiene el Ejecutivo. Yo adhiero a la idea de la estructura del Estado, avanzar hacia un Estado federal, que distribuya poder, reparta poder a los distintos territorios, regiones o macrorregiones que se puedan crear.
- Aun así y al margen de que se deben respetar los acuerdos internacionales firmados por el país, ¿hay aspectos que deben mantenerse de la actual Carta Magna? ¿Cuáles?
- Las constituciones nunca parten de cero, las constituciones mantienen una serie de derechos y de avances también, que la sociedad ha ido estableciendo como criterio básico, no existe aquello de la "hoja en blanco", esa es una mala metáfora. Existen tratados internacionales en distintas materias que deben ser incorporados en la nueva Constitución, existen también derechos y conquistas sociales que por cierto van a estar integradas en la nueva Constitución, entonces creo que más que plantear la idea de una hoja en blanco o una refundación total, lo que tenemos que hacer es dotarnos de una Constitución que, manteniendo los aspectos positivos de la Constitución de 1980, pueda proyectar un pacto social hacia el futuro, hacia una convivencia pacífica, democrática, más justa para los próximos 30 a 40 años. Lo que vamos a hacer en la Convención es una conversación, es una invitación a conversar un nuevo pacto social, no hay que verlo como la imposición de un sector a otro.
- En varias oportunidades ha apuntado a que Chile debe avanzar hacia un estado plurinacional. ¿Por qué lo considera así? ¿No basta con ser un estado multiétnico?
- Hay que aclarar que el estado plurinacional es el reconocimiento explícito en la Constitución, de que el territorio chileno, nacional, estatal, está integrado no solamente por la nación chilena, sino además por otras diez naciones que son anteriores a la conformación del Estado. Ahí están los diez pueblos originarios de Arica a Tierra del Fuego, que son colectividades que están vivas, que tienen su cultura, su idiosincrasia, sus lenguas, sus patrones normativos, sus cosmovisiones; y también sus derechos reconocidos en tratados internacionales, algunos de los cuales Chile ha firmado. (…) Entonces, el Estado plurinacional es un salto hacia el siglo XXI, hacia un Estado moderno, inclusivo, que reconoce diversidad que tiene en los hechos el territorio nacional. Lo que tenemos hasta ahora y que está consagrado en la Constitución de 1980, es esta vieja idea que tiene mucho de fantasía, del Estado Nación, es decir el Estado que sólo reconoce una nación, una cultura, una lengua y una identidad nacional, y esa es una reliquia del siglo XIX.
"más allá de la violencia, es un conflicto político"
- El fin de semana pasado un equipo de prensa de TVN fue atacado a disparos en las cercanías de la comuna de Tirúa, resultando heridos el periodista Iván Núñez y el camarógrafo Esteban Sánchez. ¿Cuál es su lectura sobre esta situación? ¿Fue un atentado a la libertad de prensa, como expresaron desde la misma estación estatal?
- En primer lugar, como periodista, quiero manifestar toda mi solidaridad con los colegas de TVN que fueron afectados por ese ataque. Fue un ataque que todo el mundo debiera condenar, un ataque que puso en riesgo la vida de ambos profesionales y que sin duda representa también un atentado hacia el derecho a informar que tienen los periodistas, el derecho de la ciudadanía a ser informada, y la libertad de expresión que es un derecho inalienable que tenemos todos los ciudadanos. Creo que es la muestra palpable del escenario de violencia que está instalado en varias zonas del sur y que, lamentablemente, se ha ido incrementando con el paso de los años, producto de un abordaje estatal y de los gobiernos de turno bastante negligente. La violencia se instala en todo conflicto social, cuando la política da un paso al costado y aquí, lo que hemos visto en sucesivas administraciones de gobierno, en el tratamiento del conflicto en la zona sur, es un abandono de la política y el entregar a Carabineros de Chile y a los fiscales del Ministerio Público, la tarea de solucionar este conflicto. Ese camino no tiene ningún buen pronóstico, porque lo que tenemos en el sur, más allá de la violencia que nos sorprende y nos enrabia muchas veces, es un conflicto político, histórico, cultural profundo, que requiere un abordaje netamente político.
- Iván Núñez declaró que fueron objeto de un ataque terrorista y que estuvieron 5 minutos bajo fuego. ¿Esto revela que efectivamente hay terrorismo en la Macrozona?
- El terrorismo es un método de combate que la doctrina internacional califica como un método violento, indiscriminado y que busca infundir temor en la población. Si caemos en cuenta que lo que le sucedió a Iván Núñez y al equipo de TVN que transitaba por esos caminos rurales de la zona de Lleu Lleu, fue un ataque armado con intención de matar a los periodistas y al camarógrafo. Creo y coincido con Iván Núñez que estaríamos frente a un acto terrorista.
Respuesta "a la inoperancia del estado"
- ¿A qué se debe el recrudecimiento de la violencia en la Macrozona Sur? Según datos del Ministerio del Interior, solo hasta el 21 de marzo se registraron 389 episodios de violencia rural durante el año.
- Hay un recrudecimiento, porque también en la zona sur, distintas comunidades de distintos territorios están actualmente desarrollando un proceso de recuperación territorial. Hay comunidades movilizadas en la Región de la Araucanía, en la Provincia de Arauco, parte sur de la Región del Biobío y se ha venido desarrollando un proceso bien activo de demanda territorial, en parte gatillado por los propios errores del gobierno. Hay un dato interesante para considerar: de más de $30 mil millones de presupuesto de la Conadi para la compra de tierras indígenas, el organismo estatal, el año pasado lo devolvió a las arcas fiscales; o sea, hubo una cantidad tremenda de dinero asignada por el presupuesto estatal, a la compra de tierras indígenas, que no se utilizó y eso generó un descontento y una molestia tremendos en una gran cantidad de comunidades, que estaban esperando la compra de tierras. Entonces, detrás de esta ola de movilizaciones y de ocupaciones de predios que está sucediendo por estos días en la zona sur, también hay una respuesta del mundo indígena a la inoperancia del Estado, y en particular del actual gobierno de Sebastián Piñera.
- ¿Cómo debiera resolverse esta situación? Desde la oposición han propuesto la participación de mediadores internacionales, mientras el oficialismo continúa con su intención de que decreten estado de sitio en la zona.
- Lamentablemente estamos en el peor de los escenarios, porque tenemos un gobierno extremadamente debilitado, que está de salida y que además tiene dos o tres escenarios al frente bastante complejos que abordar también. En materia de abordaje político, con visión de Estado de este tema tan relevante para Chile y que ha cruzado la vida republicana de nuestro país, creo que es un desafío que van a tener que asumir las próximas autoridades. Los tiempos políticos, a este gobierno en particular, no le dan para intentar un abordaje distinto y eso hace que se opten por medidas de contención o medidas represivas. La posibilidad de que las FFFAA tomen algún protagonismo en este conflicto, yo diría que es un camino que nos lleva directo al fracaso y a una radicalización brutal de la violencia en el sur. Por suerte, distintos analistas militares, incluso navales, han advertido de la inconveniencia de involucrar a las FFAA en la contención de un conflicto que debe ser resuelto por la política. (…) Creo que esas voces han tenido la templanza y la cordura que, lamentablemente, se extraña muchas veces en La Moneda. 2
(Atentado contra equipo de prensa de TVN) fue un ataque que todo el mundo debiera condenar, puso en riesgo la vida de los profesionales y sin duda representa un atentado hacia el derecho a informar que tienen los periodistas, el derecho de la ciudadanía a ser informada y la libertad de expresión".
El Estado plurinacional es un salto hacia el siglo XXI, hacia un Estado moderno, inclusivo, que reconoce la diversidad que tiene en los hechos el territorio nacional. Lo que tenemos hasta ahora es esta vieja idea que tiene mucho de fantasía, del Estado Nación, y esa es una reliquia del siglo XIX".
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