China condena a canadiense a 11 años de cárcel por espionaje
CONFLICTO. El empresario Michael Spavor fue detenido hace casi 3 años acusado de "proveer ilegalmente secretos de Estado".
La tensión diplomática entre Canadá y China se agravó después de que ayer el canadiense Michael Spavor fue condenado a 11 años de cárcel en el país asiático por supuestamente haber entregado ilegalmente secretos de Estado a fuerzas extranjeras. La Unión Europea y Estados Unidos condenaron las condiciones de la sentencia, alegando que Spavor no tuvo derecho a un abogado.
El Tribunal Popular Intermedio de la localidad china Dandong anunció ayer que Spavor, connotado empresario canadiense especializado en relaciones con Corea del Norte y cercano a Kim Jong-un, detenido en diciembre de 2018, fue sentenciado a 11 años de prisión por "proveer ilegalmente secretos de Estado e información de inteligencia a fuerzas extranjeras". Además, se le confiscarán bienes por un valor de 7.715 dólares.
Junto con Spavor, las autoridades chinas detuvieron hace casi tres años a otro canadiense, el diplomático Michael Kovrig, sin condena aún.
Ambas detenciones fueron percibidas como parte de una represalia china, debido a que ocurrieron poco después de que Canadá arrestó a Meng Wanzhou, directora financiera de Huawei, acusada de infringir las sanciones impuestas a Irán por Estados Unidos.
Reacción canadiense
Tras conocerse la sentencia, el gobierno de Canadá criticó con dureza la "detención arbitraria" de los ciudadanos canadienses conocidos como "los dos Michael" (Spavor y Kovrig).
El primer ministro Justin Trudeau dijo que la condena se produjo "después de más de dos años y medio de detención arbitraria, de la falta de transparencia en el proceso legal".
Por su parte, el ministro de Exteriores de Canadá, Marc Garneau, condenó "en los términos más enérgicos posibles" la decisión judicial y replicó que el juicio "no cumplió con los estándares mínimos que requiere el derecho internacional".
Apoyo de ee.uu. y europa
En este tenso contexto, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, pidió la liberación "inmediata" y "sin condiciones" de Spavor.
Por su parte, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, advirtió que "las detenciones arbitrarias no tienen un lugar en las relaciones internacionales" y afirmó que la Unión Europea está "unida en pedir la liberación" de Spavor y Kovrig.