EE.UU. enviará 3.000 soldados a Kabul: en 30 días podría caer en manos de talibanes
GUERRA. Busca proteger la salida de la mayoría de su personal diplomático de la capital afgana. Ayer los insurgentes capturaron otras tres capitales provinciales (van 12). Gobierno de Afganistán les ofreció compartir el poder si cesan su brutal avance.
Estados Unidos cree que la ciudad de Kabul puede caer en manos de los talibanes en unos 30 días más. Ante este escenario posible, Washington enviará unos 3.000 soldados para evacuar a la mayor parte de su personal diplomático en Afganistán, aunque mantendrá abierta su embajada. El gobierno afgano, mientras tanto, ofreció a los insurgentes compartir el poder, para que detengan la violencia de la brutal ofensiva en la que ya han capturado 12 de 34 capitales provinciales del país.
El portavoz del Pentágono, John Kirby, anunció que EE.UU. desplazará a Kabul tres batallones para garantizar la seguridad del personal diplomático que será evacuado de Afganistán. Ese despliegue de soldados adicionales, cuyo número es casi el mismo que los 3.500 que estaban en Afganistán cuando comenzó la retirada militar en mayo, ocurre cuando Estados Unidos ya había completado el 95% de ese proceso.
El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, negó que este movimiento sea una evacuación completa e insistió en que el trabajo de la embajada continuará, incluida la tramitación de los visados especiales para los afganos que han trabajado con las tropas estadounidenses.
Recordó que en el acuerdo alcanzado entre Estados Unidos y los talibanes en 2020, estos se comprometieron a no atacar tropas estadounidenses.
Por eso advirtió que si incumplen dicho acuerdo y ponen entre sus objetivos a las tropas estadounidenses, incluidas las que van a acudir a ayudar al cuerpo diplomático, "habrá respuesta, y será una respuesta sin ambigüedad alguna".
Price dijo que la decisión de retirar a la mayor parte del cuerpo diplomático no representa una huida de EE.UU. "Esto no es un abandono, no es una evacuación, no es una retirada, es una reducción de nuestro personal civil", recalcó y admitió que el gobierno de Joe Biden tomó la decisión ante el deterioro de la seguridad en el país.
Un funcionario de Inteligencia estadounidense cuyo nombre no fue revelado, dijo al diario "The Washington Post" que estima que Kabul podría quedar aislada entre los próximos 30 y 60 días y ser capturada por fuerzas talibanes.
Control y liberar presos
Durante la última jornada, los insurgentes conquistaron otras tres capitales provinciales, entre ellas, Herat, la tercera ciudad más importante de Afganistán y capital de la provincia homónima.
Los talibanes tomaron control de la sede regional de la principal agencia de inteligencia afgana y la cárcel provincial, donde liberaron a cientos de prisioneros.
Tras esa nueva victoria insurgente, Ghazni, la capital de la provincia homónima, en el sur de Afganistán, fue invadida. Los talibanes ingresaron desde varias direcciones y tomaron la mayoría de los edificios gubernamentales, incluida la casa del gobernador y la sede de la policía.
Más tarde, Qala-e-Naw, capital de Badghis, se convirtió en la tercera en caer en un solo día, lo que elevó a 12 las capitales regionales bajo control insurgente en la última semana.
Ante este crudo panorama, el gobierno afgano propuso a los talibanes compartir el poder.
"El gobierno afgano ofrece la participación en el poder a los talibanes y exige el cese inmediato de los ataques a las ciudades en el nuevo plan de paz", declararon fuentes oficiales no identificadas al canal de noticias afgano 1TV.
El presidente del Alto Consejo para la Reconciliación Nacional de Afganistán, Abdullah Abdullah, que está en Doha para asistir a reuniones internacionales sobre el futuro de Afganistán, fue el encargado de presentar el plan a los mediadores de Qatar.
Esta iniciativa, sin embargo, "no es algo completamente nuevo", aclaró la portavoz de los equipos de negociación afganos en Qatar, Najia Anwari, al asegurar que la propuesta está dentro del diálogo de paz intraafgano iniciado hace casi un año.
Sin embargo, un portavoz de los talibanes en Qatar, Naeem Wardak, negó la propuesta. "No se ha ofrecido nada de eso", aseguró a Efe.
Por su parte, el jefe talibán de la oficina de Qatar, el mulá Abdul Ghani Baradar, subrayó su compromiso para lograr una "solución negociada", y aseguró que no aspiran a obtener el control absoluto del país, sino que buscan liberarlo y establecer luego "un sistema islámico inclusivo" libre de corrupción.
217 combatientes del grupo de los talibanes murieron en combates en la última jornada, según el Gobierno.