El Cayenne GTS no renuncia al V8
El motor biturbo de 3.996 cc incorporado en las variantes GTS de Cayenne entrega 460 caballos de potencia y un par de 620 Nm que mejoran claramente las capacidades deportivas. Con el paquete Sport Chrono pueden acelerar de 0 a 100 km/hora en 4,5 segundos y alcanzan una velocidad máxima de 270 km/h. Completan las características distintivas de estas alternativas un chasis más bajo para obtener un rendimiento óptimo, un diseño único con acentos deportivos y un equipamiento superior al resto de la gama.
A través de estos ejemplares el fabricante pone especial atención en la eficiencia gracias al ajuste óptimo de la transmisión automática Tiptronic S, de ocho marchas; al control adaptativo de los cilindros, a la inyección directa de combustible con el inyector en posición central y a un diseño inteligente del sistema de gestión térmica. Solo por eso los Cayenne más deportivos recorren en promedio 8.9 km por litro.
Además cuentan con materiales de gran calidad, entre ellos el Alcántara, que recubre el techo, los paneles centrales de los asientos y los reposabrazos de la consola central y de las puertas, o el aluminio oscuro pulido que crea una sensación de elegancia deportiva en el interior de los Cayenne GTS. Los asientos deportivos de serie, con ocho posibilidades de regulación eléctrica, son de serie para los modelos GTS y ofrecen un apoyo óptimo en curvas, gracias al aumento de la altura de los refuerzos laterales. Encontramos la denominación GTS en puertas delanteras, umbrales de puerta, cuentarrevoluciones y reposacabezas.
El Cayenne GTS tiene un valor de $144.900 dólares para el modelo con carrocería tradicional, mientras que el Cayenne GTS Coupé alcanza un precio de $152.900 dólares.t
El Cayenne cambió la historia comercial y actual de Porsche, nadie lo puede discutir. Hoy la marca alemana de lujo deportivo de Stuttgart ve crecer su gama de SUV con la llegada a Chile de los nuevos Cayenne GTS y Cayenne GTS Coupé, modelos de orientación familiar diseñados para entregar máximas prestaciones. Y no es cosa del azar: en lugar de utilizar el propulsor V6 biturbo de 3.6 litros de su predecesor, vuelven a contar con un V8 bajo el capó.