Dos años tuvieron que esperar los riders para poder recorrer de nuevo las empinadas escaleras y pasajes porteños. El anuncio del retorno del tradicional downhill Valparaíso Cerro Abajo (VCA), que fue suspendido por dos años debido a la pandemia, emociona en el mundo del ciclismo urbano.

Por ello, las distintas figuras de la disciplina comienzan a prepararse para bajar por el complejo circuito de la ciudad puerto el próximo 27 de febrero. Tomas Slavik, bicampeón en 2017 y 2018, y Johannes Fischbach, campeón en 2016, han confirmado su asistencia, así como los subcampeones de las ediciones de 2018 y 2019, Felipe Agurto y Matías Nuñez.

Dentro de los favoritos, quizás en el primer lugar se ubica Pedro Ferreira, ganador de la versión 2019, quien ya se encuentra preparando su participación en la competencia porteña.

Nacido en Ñuñoa, criado en Villa Alemana y actual residente de Quilpué, es el principal referente nacional del descenso urbano y llega a Valparaíso buscando un bicampeonato casi inédito, después de romper una racha de siete años sin que un chileno lograra el primer lugar. El pedalero espera dejar atrás 15 años sin que un nacional levante dos o más trofeos consecutivos en el VCA, luego de que Antonio Leiva lo hiciera entre 2004 y 2006.

La mejor del mundo

Y las intenciones del ciclista para esta nueva edición de la carrera de descenso urbano más importante de Latinoamérica son claras: "Mis expectativas son siempre las más altas. Yo voy a competir por ganar, no voy a hacer una buena actuación. Mi foco es ganar", señaló confiado el defensor de la corona del VCA.

En ese sentido, destacó la importancia de Valparaíso Cerro Abajo, resaltando a la instancia como la "mejor competición del mundo, la mejor en descenso urbano. No hay ninguna otra como esta. Es la más reconocida, tiene una pista que es la más trabajada durante el tiempo, es la que más perfección le han hecho para que tenga fluidez".

"Es un lugar icónico, con muy buenas pendientes y vienen los mejores del mundo en descenso urbano. Yo he competido en muchos lados, los mejores del mundo, y Valparaíso tiene la mejor bajada", indicó. Y este sentimiento se hace mucho más personal cuando señala que "es un descenso en una ciudad que conozco, es mucho más especial. Tenemos un diamante en Valparaíso".

"Latinoamérica tiene los mejores descensos urbanos del mundo, por cómo son las ciudades. Tal vez en Europa podrían darse algunos, pero tiene que ser un cerro urbano, con escaleras, pasillos, curvas estrechas. En Europa están más en ruta y descenso en tierra. Pero el urbano tiene algo que lo hace más especial, más llamativo", agregó el villaalemanino.

La vuelta del VCA

Dos años de espera tuvieron los aficionados a los descensos urbanos para presenciar el regreso de uno de los torneos más importantes a nivel mundial de la disciplina. El covid 19, tal como a muchos deportes, afectó también al ciclismo.

En ese sentido y tras 24 meses de espera, Ferreira destacó la vuelta de la competencia y confía en su localía para levantar por segunda vez consecutiva el título porteño. "Me siento feliz con la vuelta (del VCA). Hubo mucho tiempo en el que no se hizo nada. Me siento con todas las energías, con todas las ganas y con toda la técnica de volver a ganar. Estoy confiado, sobre todo porque soy local. He entrenado harto ahí y conozco bien la pista y sé que puedo volver a levantar el título", señaló.

"Tengo buen feeling con las escaleras y sé bien cómo se siente cada escalón, cómo tomar bien cada curva y básicamente todo lo que se pueda saber de la competencia", añadió.

Bajo esa misma línea, destacó la geografía "privilegiada" que tiene la Región de Valparaíso, sobre todo en la zona costera. "Yo vivo en Quilpué y es una zona idónea para la bicicleta. Tenemos spots para practicar todas las disciplinas que son tierra, enduro y descenso", sostuvo.

Sin embargo, a pesar de toda la preparación que un deportista de alto rendimiento como él puede tener, Ferreira confesó lo distinto que se sentiría la competencia sin el público que se amontona junto a la pista de descenso, situación que podría darse producto del covid 19.

"Un Valparaíso Cerro Abajo sin público se sentiría muy raro, no sería lo mismo. Pero es imposible que no haya, siempre está lleno. Me imagino que tendrán que poner barreras y gente que controle los pases de movilidad y aforo", sostuvo.

Asimismo, valoró el "apoyo de la gente. Es muy importante, y más ahora que soy el último campeón y voy a tener más presión que ese año (2019). Pero me gusta tener más presión. Me hace exigir más".

La competencia

Ante la competencia que tendrá que superar el villalemanino para coronarse otra vez, destacó la vuelta de los anteriores campeones Slavik y Fischbach, entre otros.

"Este año el descenso será igual o más duro que otros. Creo que esta vez la pista será más corta, pero más intensa. Será muy dura. Estoy confiado en el nivel que tengo, sé que puedo ganar de nuevo y no me voy a conformar con un segundo lugar", argumentó.

En ese sentido, precisó que el secreto para triunfar es sicológico. "Esta carrera es muy mental. Hay que saber canalizar bien la presión, porque está la gente al lado que te grita y todo, aunque no sé si con el covid habrá tanta gente. Es una competencia donde un error te cuesta caro", finalizó.

"Un VCA sin el público se sentiría muy raro. Tendrán que controlar los pases de movilidad y el aforo".

Pedro Ferreira, Defensor título VCA

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