Los buenos propósitos del ministro Montes
El titular de la Vivienda expresó su disposición a dedicar esfuerzos para acometer los problemas de Valparaíso y Viña del Mar. Materia pendiente es el bajo aprovechamiento habitacional del plan de Valparaíso, derroche inaceptable de ventajas de plena urbanización y conectividad, en circunstancias que, por otro lado, hay un crecimiento inorgánico de alto costo económico, social y humano.
El nuevo ministro de la Vivienda, Carlos Montes, tras su visita a Valparaíso, declaró que esta es una de las regiones y ciudades que tienen más problemas de vivienda y desarrollo urbano y se comprometió a dedicar mucho tiempo a "tratar de empujar proyectos en esta zona".
Montes, socialista, economista de profesión, tiene amplia trayectoria en el Parlamento. Integró, entre otras, la Comisión de Vivienda y Urbanismo y llegó a ser presidente del Senado. También participó en la administración pública como asesor en el gobierno de Ricardo Lagos. Todas experiencias importantes para el manejo de una cartera tan compleja como es la de Vivienda, que debe atender en lo inmediato el creciente problema habitacional y, a la vez, los desafíos del desarrollo urbano a lo largo del país, que exige políticas específicas dada la diversidad de cada comuna. Caso concreto, Valparaíso y Viña del Mar.
En reuniones con los alcaldes de estas comunas analizó los planes y problemas de cada una. El más acuciante es el de los campamentos, que han ido aumentando a un ritmo creciente, cada uno con sus problemas puntuales, con sus necesidades y con su ubicación que muchas veces no es la más adecuada para la vivienda, pero son fruto de la necesidad.
Con el alcalde porteño, Jorge Sharp, coincidió respecto a poner la vivienda en el centro de las prioridades, con un plan habitacional de urgencia. En Viña del Mar, en tanto, conoció las alternativas de terrenos que allí existen para el desarrollo habitacional. A su vez, la alcaldesa Macarena Ripamonti expuso la situación de los campamentos y sus problemas.
Montes declaró que con la alcaldesa concordaron en temas que se deben abordar a partir de la designación del seremi del ramo. En cuanto a Valparaíso, calificó la presentación municipal como "una respuesta propia y creativa frente a realidades que no son iguales en otros lados". Acertado juicio el del ministro, pues la realidad de Valparaíso es, como se ha dicho, diferente y, en consecuencia, exige miradas diferentes tanto para el tema de la vivienda como para la ciudad en general. Materia pendiente es el bajo aprovechamiento habitacional del plan de la ciudad, un derroche inaceptable de ventajas de plena urbanización y conectividad, en circunstancias que, por otro lado, hay un crecimiento inorgánico de alto costo económico, social y humano.
Dentro de esta realidad diversa, la voluntad del ministro de dedicar mucho tiempo a nuestras ciudades es una buena noticia y una oportunidad para las autoridades locales, que deben insistir en iniciativas creativas más allá de la contingencia y disposición para la inversión, tareas que se deben acometer en conjunto con la Secretaría Regional Ministerial de la Vivienda y en sintonía con esa buena voluntad de atención a la región expresada por Montes.