Cristián Rojas M.

Una visita a Valparaíso y Viña del Mar hizo ayer el ministro de Educación, Marco Ávila, quien se reunió con el gobernador regional, con la delegada presidencial, visitó la sede del Servicio Local de Educación de Valparaíso (SLEP), un jardín infantil, y en el Palacio Vergara de la Ciudad Jardín se reunió con la mesa técnica conformada por la Seremi para abordar las problemáticas que han denunciado profesores y apoderados de colegios de Valparaíso bajo el alero del SLEP porteño.

Sobre esto último, el secretario de Estado detalló que "la supervigilancia, y especialmente el acompañamiento que tiene que hacer el Ministerio de Educación -por eso mi presencia en la región- tiene relación con, precisamente, ver de qué manera está funcionando el Servicio Local, y si está dando cumplimiento a las metas o compromisos que tiene. Si hemos llegado a esta instancia es porque, precisamente, lo que hemos visto durante el Gobierno anterior fue un lamentable abandono de la gestión de los SLEP en el país".

Ávila aclaró que "esto no tiene que ver con los funcionarios y funcionarias, sino que tiene que ver con la gestión, y es por eso que nos hemos visto en la obligación de hacer algunas remociones y de tener que hacer acompañamientos más directos. La instalación de esta mesa de trabajo liderada por la seremi tiene precisamente relación con eso, con la urgencia de buscar soluciones".

Subvención basal

Sobre lo que le plantearon los representantes gremiales den la reunión en el Palacio Vergara, el ministro destacó que "nosotros nos vamos con este requerimiento, con las conclusiones de la mesa, las tenemos que analizar, distinguir las responsabilidades, hay responsabilidades que están asociadas, por ejemplo, al Ministerio de Educación, yo podría señalar una que es muy importante, que es la inquietud para avanzar hacia una subvención basal. Eso no es algo que podamos responder rápidamente, Chile no tiene un modelo de subvención basal, pero tenemos que avanzar hacia eso, por lo tanto, es parte de las tareas que yo me llevo".

Otras tareas a las que se abocará, agregó, tienen que ver con "la gestión más global de los presupuestos, la resolución en temas de infraestructura a largo plazo durante los cuatro años. Otras son responsabilidades de la Seremi, que van a ser ejercidas más bien con labores de supervigilancia para el cumplimiento, y la mayoría de ellas yo creo que están en camino de resolverse a través de la gestión que hace el director del SLEP".

Sueldos e infraestructura

En ese contexto, Ávila subrayó que esperan "que al menos, aquellas que son más acuciantes, como por ejemplo, el adecuado pago de los sueldos, que es una gran molestia en los profesores de Valparaíso, se resuelva ya en la próxima liquidación mensual, o sea, no debería pasar esto. Lo mismo con la ejecución de obras menores que mejoren la infraestructura y la habitabilidad. Lo mismo la gestión que se puede hacer con los temas de alimentación y la vinculación, por ejemplo, con Junaeb, ahí ya entra la Seremi, en hacer gestiones para mejorar las raciones o la calidad de los alimentos".

Por su parte, la seremi de Educación, Romina Maragaño, precisó que "el trabajo que realizó la mesa fue en ocho sesiones que se desarrollaron a partir de dos meses de trabajo, y las soluciones que presentaba el SLEP se fueron ejecutando en los mismos dos meses que estaba trabajando la mesa".

Sobre dichas soluciones, detalló que "hay elementos que tienen que ver con el pago de remuneraciones, hay elementos que tienen que ver con la adquisición de materiales para los establecimientos, eso ya está en ejecución y hay compromisos también por parte del SLEP para que la implementación de esas mejoras se sostengan en el tiempo también, y ahí yo creo que es muy importante manifestar que en los distintos acuerdos que fueron entregados hoy día (ayer) al ministro hay elementos que tienen que ver con lo estructural, que tienen que ver con la Ley 21.040 y su instalación, y cómo también eso tiene que llevarse a ajustes, que es el trabajo que está realizando el ministerio, pero también hay elementos que tienen que ver con la gestión propia del SLEP".

Maragaño destacó que "el cronograma y los compromisos se están implementando, y durante este primer semestre se están ejecutando".

"Nos hemos visto en la obligación de hacer algunas remociones y de tener que hacer acompañamientos más directos".

Marco Antonio Ávila, Ministro de Educación

"El cronograma y los compromisos se están implementando y durante este primer semestre se están ejecutando".

Romina Maragaño, Seremi de Educación

En una carta enviada al director regional de la Dirección General de Aguas (DGA), Héctor Neira, el presidente de la Junta de Vigilancia de la Primera Sección del río Aconcagua, Javier Crasemann, informó a la autoridad que dan "por terminadas las conversaciones" que buscaban lograr un acuerdo junto a las secciones 2ª y 3ª para la redistribución de las aguas del torrente y así llenar el embalse Los Aromos, con el fin de asegurar abastecimiento de agua potable del Gran Valparaíso.

Con esta determinación se hace inminente la intervención directa de la DGA del río Aconcagua, pese a que el pasado 31 de mayo el Ministerio de Obras Públicas (MOP) diera un plazo adicional de ocho días para que las juntas de vigilancia consensuaran sus propuestas, esto en virtud del oficio Ord. DGA N° 215.

"Nosotros cumplimos, una vez más, con entregar -dentro del plazo y conforme al objetivo solicitado por la DGA- una propuesta satisfactoria, junto a la segunda sección, para el llenado del embalse Los Aromos, pero, lamentablemente, fue desestimada", dijo Crasemann, responsabilizando de este fracaso a la Junta de Vigilancia de la Tercera Sección, pues, dijo, "pone condiciones que no corresponden en un contexto de emergencia"

Además, puntualizó que "el sobreotorgamiento de derechos, la sobreexplotación del acuífero, la falta de planificación, el inexistente avance en obras de infraestructura hídrica y la no reutilización y generación de nuevas fuentes de agua por parte de la autoridad, hace muy difícil la adaptación a la situación hídrica extrema que vivimos en toda la cuenca. A eso se debe sumar el abuso por parte de Esval, quienes parapetados detrás del noble principio del consumo humano, buscan su propio beneficio, sin importar los impactos que generan al resto de las personas".

Por tales motivos, Crasemann afirmó que "damos por terminadas las conversaciones", aunque subrayó la disposición de la Primera Sección "para apoyar y empujar las soluciones de fondo que tanto se requieren" en la cuenca del Aconcagua".