"Hay que ir pasito a pasito y, si Dios quiere, poniéndole el ojo a la liguilla"
Las últimas semanas han sido intensas para Eduardo Miranda. El arquero de Santiago Wanderers, que fue castigado por indisciplina por el técnico Miguel Ponce hace un mes, terminó siendo titular en los últimos cinco encuentros debido a la lesión de Fernando Hurtado.
Y desde que entró al equipo estelar, el Decano no volvió a perder. De hecho, su actuación fue fundamental en la última victoria en Playa Ancha frente a Copiapó y ya lleva 312 minutos con su valla invicta.
"Me siento contento por el triunfo del domingo, porque ganó el equipo sobre todo, eso me importa más que mi desempeño personal. Estoy feliz por el momento que estamos pasando y por ayudar a llegar a esto", señala el golero.
El buen desempeño de la línea defensiva caturra es llamativo, porque coincide con cinco encuentros sin perder para los verdes. Sin embargo, Miranda prefiere restarse méritos individuales y destacar al colectivo.
De acuerdo al exgolero de Limache, "es cierto que hemos mantenido la portería invicta durante los tres últimos partidos, pero eso no se debe solo a la defensa o el arquero, sino que es un trabajo de todo el equipo. Llegó mucha experiencia con los refuerzos, además está lo que provoca Carlos Muñoz, también es verdad que como defensa hemos logrado ir afiatándonos bien y yo estoy tratando de entregar lo mejor".
La explicación del cuidavallas es simple: "Nos hemos convertido en un equipo más ganador, más metedor, más luchador, eso nos ha llevado a mantener la portería en cero y buenas actuaciones también".
- Hace unas semanas Miguel Ponce reveló que estaban trabajando con un psicólogo deportivo. ¿Eso los ha ayudado a mejorar su rendimiento y el trabajo en equipo?
- Obvio que sí, hemos hecho trabajos con el psicólogo, eso también nos ha llevado a afiatarnos más como equipo, en lo mental estamos súper bien, creo que durante los primeros meses nos habíamos convertido en un equipo que tenía miedo, pero ahora somos un equipo ganador. Se han ido dando cosas, se han ido dando resultados, eso también nos ha llevado a mantener un rendimiento alto. Con confianza y resultados las cosas salen mejor, pero pienso que la ayuda del sicólogo nos ha servido harto.
- Ahora viene un rival muy complicado como Puerto Montt, que está en zona de clasificación a la liguilla. Los espera además en Chinquihue, una cancha sintética donde ellos han perdido un solo partido esta temporada.
- Sí, es un rival súper difícil, nos vamos a jugar un partido muy importante para nosotros porque puede significar meternos en la liguilla, tenemos que hacer un gran partido allá, esta semana seguramente vamos a entrenar en cancha sintética, vamos a prepararnos bien para enfrentar a un equipo durísimo, sabemos lo que juega Puerto Montt, por eso está en el lugar que ocupa en la tabla de posiciones. Espero que esta alza y este envión anímico que hemos alcanzado en los últimos encuentros nos ayude a traernos un buen resultado desde allá.
- En el fútbol siempre se dice que para que te vaya bien, debes tener una pequeña cuota de suerte. ¿Cree que hoy la fortuna le está sonriendo a Wanderers, considerando cómo se han dado sus últimos partidos?
- Claro, siempre se habla de la mala suerte en el fútbol, pero eso es entre comillas, también se dice que te toca bailar con la fea, pero hoy estamos con un envión, después de las malas siempre vienen las buenas, en todo ámbito de la vida. Te hablo de lo cotidiano, no solamente en el fútbol, en el día a día. Ahora nos está tocando un buen momento que hay que aprovechar. Pero siempre debemos mantener los pies en la tierra, estar tranquilos, ir buscando resultados pasito a pasito y, si Dios quiere, ir poniéndole el ojo a la liguilla.
- Ya es un discurso común en Wanderers que van partido a partido, pero todos empezaron también a reconocer que miran a la liguilla.
- Es obvio, este envión anímico y los resultados obtenidos nos han acercado a la liguilla, pero porque hemos ido a partido a partido. Hace cinco fechas no estábamos pensando en la liguilla, estábamos pensando en zafar del descenso. El impulso adquirido en los últimos partidos nos ha llevado solitos a casi meternos en puestos de clasificación, pero hay que mantener el ritmo y la filosofía, porque todavía no estamos en la liguilla. Una vez estando adentro a los mejor podríamos ponernos como objetivo mantenernos en el cupo y luchar por el ascenso, pero insisto, todavía no estamos clasificados. Paso a paso no más, ahora nos toca un partido dificilísimo en el sur, nos vamos a preparar bien, vamos a recuperar las piernas y trataremos de traernos un buen resultado. Y así va a ser, de eso estoy seguro.
- La continuidad que ha tenido como titular en los últimos partidos me imagino que también le otorgó confianza. Usted no había tenido la oportunidad de ser titular en Primera o Primera B.
- Desde mi llegada a Wanderers siempre traté de aportar, venía de Segunda División (Profesional), de Limache, y mi fichaje acá era un desafío, traía muchas ganas, mucha ambición, tuve la oportunidad en otros equipos de la B pero me vine a Wanderers por lo que significa el club para la gente, para la historia, para el fútbol chileno. El arco de Wanderers creo que es uno de los más importantes del fútbol nacional, ahora me ha tocado jugar, he tenido continuidad. También disputé la serie contra Curicó por Copa Chile. Cuando llegué era un desafío personal, pero en este momento estoy jugando para el equipo, para el objetivo que nos propusimos, para tratar de salir adelante como club, porque lo más importante es el escudo, la insignia que llevamos en el pecho. Estoy contento por jugar y si le puedo entregar seguridad al grupo, perfecto, pero siempre paso a paso, con un ojo puesto allá arriba, porque de a poquito nos vamos metiendo.
- También le tocó un momento difícil cuando Miguel Ponce lo marginó de una convocatoria por un acto de indisciplina. ¿Cómo lo pudo superar?
- De eso no voy a hablar, los momentos difíciles fueron cuando me tocó jugar con Santa Cruz y tuve responsabilidad en un gol, fue un partido bastante malo de nosotros. Tuve responsabilidad en un gol y en ese momento sí la pasé mal. Después lo que se haya dicho, lo que se haya inventado, a mí no me enferma. Cuando pasó lo de nosotros fui súper autocrítico, se habló en el camarín, se habló con el profe y se sacó adelante. Yo nunca estuve marginado, nunca estuve fuera del club, nunca estuve corriendo por fuera de la cancha, siempre estuve con el equipo.
- ¿Y qué pasó entonces?
- Lo que se dijo después, que estuve con alcohol o todas esas cosas, no tiene nada que ver con lo que pasó. Prefiero no hablar más de eso y el buen momento que estamos viviendo ahora como equipo no se puede ver empañado por cosas que ya pasaron.
"Lo que se dijo, que estuve con alcohol o todas esas cosas, no tiene nada que ver con lo que pasó. Prefiero no hablar más de eso".
"Lo que se haya inventado, a mí no me enferma. Cuando pasó lo de nosotros fui súper autocrítico, se habló en el camarín, se habló con el profe y se sacó adelante".
312 minutos con su valla invicta lleva el portero de Santiago Wanderers, Eduardo Miranda.
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