El comercio exterior ante costos logísticos
Esos valores están afectando la actividad y generando un daño tanto a consumidores como a pymes, que pierden posibilidades de exportar. El vicepresidente de la Cámara Aduanera echa de menos alguna instancia para plantear estos problemas, como una subsecretaría o una especie de Sernac. Tiene razón, pues el comercio exterior nacional es demasiado importante como para dejarlo a la deriva.
Los costos logísticos están afectando el comercio exterior y, en último término, a los consumidores. Diversos actores del sistema plantean una situación que tiene varias aristas, con alcances nacionales e internacionales. Para Óscar Hasbún, gerente general de la Compañía Sudamericana de Vapores, de exitosos resultados económicos en el primer semestre de este año, el problema está en la congestión de contenedores que se produce por la falta de camiones que los movilicen. "Los puertos hoy están llenos, pero por ineficiencia, no por capacidad". Recordó que por seguridad, tras el estallido de 2019 dejó de operar un tercer turno de camiones en los puertos, efectuándose labores solo de día, con lo cual se perdió un 20% de la capacidad de transporte.
En cuanto a tarifas de fletes, Hasbún afirma que en promedio son elevadas, acusando sí una tendencia a la baja e insiste en "la presión en la cadena de suministro global, con cuellos de botella en puertos y en la logística terrestre", con factores como huelgas en terminales de Europa, congestión en la costa Este de Estados Unidos y el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Por su parte, la académica de Negocios Internacionales de la Universidad de Valparaíso, Daniella de Luca, afirma que en los últimos días se nota un alza en la congestión portuaria debido al aumento en la llegada de naves y la reanudación de las operaciones con China.
Javier León, vicepresidente de la Cámara Aduanera, advierte sobre el aumento de un 16% en los costos logísticos. Un factor es el demurrage, una multa que imponen las navieras "por no entregar a tiempo el contenedor". Sostiene que varios importadores están pidiendo una revisión de ese gravamen, que se cobra por días y está condicionado por variados factores. Afirma el dirigente en relación al demurrage que en Estados Unidos se aprobó una ley que regula ese cobro, valor cuya determinación es de resorte exclusivamente interno.
León también alude a otros costos logísticos que limitan las posibilidades para las pymes de hacer exportaciones "porque están quedando fuera de mercado, van quedando los grandes". El dirigente se queja de la orfandad en que estarían los importadores y exportadores ante los mayores y variados costos logíscos. Recuerda que el tema se debatió en la Comisión de Puertos y Logística durante la última administración Bachelet, pero no se llegó a nada y el tema se mantiene en tierra de nadie. Echa de menos alguna instancia en la cual plantear estos problemas, habla de una subsecretaría o de una especie de Sernac. Tiene razón, pues el comercio exterior nacional es demasiado importante como para dejarlo a la deriva.
Sin embargo, de existir algún organismo, tal vez en el marco de los ministerios de Economía o Hacienda, debería ser con la participación de los actores públicos y privados del área y con capacidad resolutiva.