Carta de apoyo a González crispa los ánimos en la Corporación Wanderers
FÚTBOL. La expulsión como socio del expresidente de la S.A. caturra genera un ambiente de guerra civil en el Decano.
El ambiente crispado que existe entre los socios de Wanderers está lejos de calmarse después de la decisión adoptada en la última asamblea de la Corporación, que ratificó la expulsión del vicepresidente de la sociedad anónima caturra, Rafael González Camus.
El abogado perdió su calidad de abonado a la organización, que mantenía por treinta años, debido a una denuncia interpuesta ante el Tribunal de Honor que lo acusaba de provocar un grave daño al club por tres aspectos: el frustrado traspaso de todas las acciones de la S.A. a los hinchas; la decisión de poner en receso al equipo profesional de futsal; y el supuesto deterioro de la rama femenina.
A través de un recurso de protección interpuesto en la Corte de Apelaciones de Valparaíso, el dirigente busca revertir la medida, que ayer fue criticada en una carta abierta firmada por 87 socios wanderinos publicada en los diarios El Mercurio de Valparaíso y La Estrella.
Pablo Guadalupe, uno de los denunciantes de González, explica que su acción ante el Tribunal de Honor no tuvo que ver con los malos resultados del equipo caturro en 2021 y lamentó la participación tardía de los abonados que discrepan con la sanción.
"Es una pena que los socios que lo apoyan ahora no hayan estado presentes en la asamblea, porque seguramente con ochenta y siete votos habría quedado absuelto", reflexiona el ingeniero.
La segunda presentación contra el exabonado fue presentada por la estudiante Io Leiva, quien destaca el proceso sancionatorio como una muestra de la "democracia interna de la Corporación Wanderers".
"Las acusaciones tienen que ver con las acciones que cometió González y que generaron grave daño a la institución. El proceso fue súper serio, cualquier socio que quisiera revisarlo podía, estaba a la vista y podía hacerse partícipe", señala.
El expresidente de la organización que congrega a los abonados caturros, Mario Oyer, defiende también el procedimiento adoptado y apunta que no tiene que ver con la horrible campaña desarrollada por el equipo el año pasado.
"Creo que decir que se confunde la gestión deportiva con la institucional es desviar la atención, hay temas más de fondo, por ejemplo, la determinación que adoptó González de eliminar la rama de futsal en circunstancias que el año estaba financiado. Si nos centráramos solo en los resultados en la cancha, ya no habría dirigentes en Wanderers, porque a todos les ha ido mal alguna vez. Pienso que ese argumento minimiza los puntos de la acusación que los socios presentaron", reflexiona el ingeniero en construcción.
Más tajante es el expresidente del club, Patricio Vidal, quien asistió a la última asamblea y votó por expulsar al abogado.
"Creo que el daño que le hizo a Wanderers es irreparable", dice, añadiendo que el dirigente "debió dar un paso al costado, ahora está diciendo que se va de la primera línea, pero eso debió hacerlo cuando bajamos a Segunda o cuando estábamos tan mal el año pasado, como lo hizo Osvaldo León. Quizás quitarle la condición de socio no sea la sanción más justa, pero algún castigo debía tener".
Leiva, en tanto, apunta a los firmantes de la carta de apoyo al sancionado: "Si estos socios tienen problemas con la forma en que se hacen las cosas en la institución, quizás se tienen que levantar e ir a las asambleas".
"Si yo hiciera una carta abierta apoyando la expulsión, consigo ochocientas firmas, no ochenta y siete".
Mario Oyer, Expresidente Corporación Wanderers
"Las acusaciones tienen que ver con las acciones que cometió González y que generaron grave daño a la institución".
Io Leiva, Socia que denunció a Rafael González
"Fui a la asamblea y voté por la expulsión. Creo que el daño que le hizo a Wanderers es irreparable".
Patricio Vidal, Expresidente de Wanderers
87 socios de Wanderers firmaron una carta de apoyo a Rafael González, criticando su expulsión de la Corporación.
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