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ENTREVISTA. Aldo Valle, exrector de la UV y candidato al Consejo Constitucional por la lista Unidad para Chile (PS - Apruebo Dignidad):

"Las contiendas electorales son actos de la mayor relevancia cívica y no es bueno que se distorsionen"

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Sebastián Mejías O.

Esta semana, el abogado, exrector de la Universidad de Valparaíso (UV) y candidato al Consejo Constitucional, Aldo Valle, se vio de la nada envuelto en una polémica construida en la directiva nacional del PPD. Molesto por la influencia frenteamplista en la caída de la opción electoral de Pablo Maltés, la carta regional de "Todo por Chile", el exdiputado Marco Antonio Núñez, atacó a la fórmula integrada por el PS y Apruebo Dignidad, etiquetándola como la "lista de Jaime Bassa" y acusándola de tener secuestrado al rector Aldo Valle para sacar provecho de su moderación.

- Según el candidato del PPD Marco Antonio Núñez, en Apruebo Dignidad lo estarían usando para llegar al votante moderado. ¿Entrará en esa polémica?

- Las contiendas electorales son actos de la mayor relevancia cívica y, por lo mismo, no es bueno que se distorsionen por estrategias comunicacionales. Espero que durante todo este proceso no perdamos la consideración y el respeto que nos debemos tanto entre nosotros como a la ciudadanía.

- ¿Fue un error la separación de la histórica alianza PPD-PS?

- Tengo sentimientos encontrados con ese tema porque mantengo un vínculo con ambos partidos. Son expresiones que han aportado enormemente a la cultura política de este país.

- ¿Dónde se ubica Aldo Valle políticamente?

- Soy una persona de centroizquierda y de eso nadie puede dudar, no tengo ningún remilgo en declararlo. La meta de un Estado social y democrático de derecho para Chile sintetiza muy bien la tradición histórica y política de la socialdemocracia. Por esa razón participo y apoyo este proceso.

- Comparte lista con partidos que están muy a la izquierda, como el PC o Comunes. ¿Tiene diferencias con ellos?

- Tengo las coincidencias y diferencias que puede tener un socialdemócrata, que siempre se ubicará en la centroizquierda.

- ¿Cómo fue que llegó a ser candidato por el PS?

- Fue por una invitación que me hicieron militantes y dirigentes del PS que, en un primer momento, me costó aceptar por mis responsabilidades personales, aunque el deber ciudadano terminó por persuadirme.

Momento CRÍTICO

- ¿Qué le puede aportar al nuevo proceso?

- Al no resolver problemas importantes, Chile vive un momento crítico desde el punto de vista político, social y económico y en algún momento los ciudadanos y las ciudadanas tenemos que hacernos parte de ese esfuerzo colectivo, deliberativo. Eso es lo que quiero del nuevo proceso, que sea un diálogo pluralista, constructivo, respetuoso, sin descalificar a quienes piensan distinto. Ese es el principal valor que ofrezco a esta lista.

- Pese a su inexperiencia política, supo competir de buena forma el 2021 contra Rodrigo Mundaca en la elección de gobernadores.

- Bueno, era la primera vez que participaba en una elección para un cargo político y, claro, en la misma campaña me di cuenta que todavía tenía mucho que aprender. Fue una experiencia muy enriquecedora, pude conocer mejor la región, la sociedad, los comportamientos y las impresiones que tiene la ciudadanía respecto del sistema político y de los partidos.

- ¿Qué lectura hace de ese 20% de votos que obtuvo?

- Es algo a lo que le he dado vueltas. Pienso que en el resultado que saqué hay un gran voto de desconfianza con el sistema político y eso debe llevarnos, a todos, a comprender la urgencia de darnos una nueva Constitución con un sistema político que de una vez por todas se conecte con las necesidades de las grandes mayorías.

Convención fallida

- ¿Se ha detenido a pensar en el fracaso de la Convención?

- Claro, fue una etapa que se explica a partir de la historia reciente, donde hubo muchos intentos, todos frustrados, de hacer reformas sustantivas a la Constitución de 1980, pero las minorías privilegiadas del Congreso se opusieron. Fue una demanda social constante que en algún momento tomó un camino que no es el más aconsejable ni el más conveniente porque los países tienen que funcionar.

- Pero respóndame sobre el fracaso de la Convención. ¿Cómo lo explica?

- Hay que ser claros en esto, pese a las enormes diferencias que había en su interior, la Convención logró redactar una Constitución que tuvo un lenguaje y unos propósitos que la ciudadanía en general, en un voto nítido y claro, terminó rechazando.

- Y después de varios meses, en diciembre, Chile Vamos y el oficialismo concordaron empezar de nuevo.

- Es increíble esa enorme virtud que tenemos los chilenos de volver siempre al camino institucional. Después de un conflicto grave como el que tuvimos, porque en Chile hubo una ruptura política y socionormativa, buscamos un camino institucional que fracasó en primera instancia. Ahora hay que celebrar la responsabilidad de los partidos para reconocer que la Constitución del 80 no puede seguir.

- En un proceso con muchas más restricciones que el anterior.

- Sí, pero son restricciones que no van a impedir que pueda elaborarse un proyecto donde, claro, la ciudadanía tendrá la palabra definitiva con su voto. Lo importante es cerrar este ciclo constitucional exitosamente y pasar a una nueva etapa de estabilidad, donde la economía y el sistema político funcionen de mejor forma.

- ¿Cómo se puede garantizar un proceso exitoso?

- Lo que va a determinar la legitimidad del proceso es el contenido de la propuesta constitucional. Si la propuesta no tiene el mérito democrático y social que se necesita, es decir, si no habilita un sistema político democrático y sin mecanismos contramayoritarios, o si no garantiza derechos fundamentales, el proceso será un fracaso.

Acuerdos indispensables

- Otro requisito de legitimidad será la construcción de normas constitucionales a partir de acuerdos amplios. ¿Cómo ve a las demás listas y, particularmente, a la derecha?

- Creo que hay un cambio positivo en la derecha o al menos en un sector de ella, y bueno, también ha tenido un aprendizaje. Ha advertido que no es bueno estirar tanto la cuerda, aunque se tenga el poder formal. Que no basta con disponer de legalidad si no se cuenta con el reconocimiento social necesario. La derecha, responsablemente, reconoció haber cometido un error y que debe salir de él, ahí creo que se abre una enorme oportunidad para llegar acuerdos que son indispensables.

- ¿Piensa lo mismo del Partido Republicano?

- No, porque creo que ellos son la expresión de un proceso que no es solo de Chile, en el mundo está la emergencia de partidos que animan un nacionalismo que atenta contra la democracia. Los métodos que ha estado usando el Partido Republicano, funando a dirigentes de derecha e izquierda, están lejos de una conducta democrática.

- Hablando de la derecha y de su lista Chile Seguro, ¿qué discusión dará la izquierda sobre ese tema?

- Debemos dar respuesta a que las personas tengan derecho a educación y donde los mayores tengan buenas condiciones de vida, pero también donde todos podamos salir de nuestras casas con la tranquilidad de que van a volver sin haber sido dañados, sin peligro. La seguridad no es patrimonio de ningún sector político, nadie podría discutir la necesidad de que el Estado se dote de una capacidad suficiente para garantizar el orden público, la estabilidad, la seguridad de la vida cotidiana de las personas. Un sistema político que no logra dar seguridad es porque tiene un déficit sustantivo.

"Lo importante es cerrar este ciclo constitucional exitosamente y pasar a una nueva etapa de estabilidad, donde la economía y el sistema político funcionen de mejor forma". "Celebro la responsabilidad de los partidos para reconocer que la Constitución del 80 no puede seguir más".

"Los métodos que ha estado usando el Partido Republicano, funando a dirigentes de derecha e izquierda, están lejos de una conducta democrática".