"Me alegro que Nicolás Ibáñez invierta, porque sabemos que el fútbol no es rentable"
El diputado Pablo Prieto sabe de fútbol y de las carencias de una actividad que lo tuvo como protagonista durante poco más de una década. Fue capitán y uno de los goleadores históricos de Rangers de Talca, e incluso tuvo un paso por Everton en la parte final de su carrera. Hoy en el Congreso Nacional, representando al distrito 17, el exdelantero es miembro de la Comisión de Deportes y Recreación de la Cámara Baja, desde donde con preocupación observa el funcionamiento de las sociedades anónimas en el fútbol.
El parlamentario (independiente pro RN) acepta que en el 2005 fue uno de quienes apoyó abiertamente la Ley 20.019 que regulaba las Sociedades Anónimas Deportivas Profesionales (SADP), explicando que "estuve de acuerdo por los enormes problemas económicos que vivían los clubes del fútbol chileno, los que me tocó vivir en carne propia y que eran de toda clase. Había un desastre en lo que era la administración de las Corporaciones y la necesidad de las sociedades era imperiosa".
Sin embargo, es el mismo congresista quien también reconoce su decepción luego de poco más de una década de funcionamiento de la Ley, lamentando que "es claro que las sociedades anónimas deportivas no han cumplido cabalmente los objetivos con que se presentaron en un comienzo, por tanto hay que regular el modelo de gestión, el tipo de gobierno corporativo, la orientación y sus fines".
"En la Comisión (de Deportes y Recreación) estamos a la espera, dentro de las próximas dos semanas, de las indicaciones que pueda realizar el Ejecutivo a la Ley para luego votar en particular lo que esperamos sea la modernización del modelo actual, el que a mi juicio está bastante agotado y fracasado en lo que significa la regulación de las sociedades anónimas deportivas, entregándole mayores atribuciones a la Superintendencia de Valores para que fiscalice a todos los clubes, buscando siempre evitar los conflictos de intereses", sostiene.
- Hablemos de los equipos de la zona. En Santiago Wanderers hay visiones distintas respecto del rol de Nicolás Ibáñez al frente de la institución. Hay quienes agradecen su aporte económico para la sobrevivencia del club y otros que critican un posible aprovechamiento económico.
- Los mecenas en el fútbol han existido siempre y es bueno que existan. Yo me alegro que el señor Nicolás Ibáñez esté invirtiendo, porque, la verdad, el fútbol no es rentable. Quienes conocemos la realidad del fútbol desde dentro tenemos muy claro que se trata de una actividad totalmente deficitaria, salvo con la venta de algún jugador o la participación en algún torneo internacional.
- ¿Incluso cobrando un interés para los dineros que se aportaron?
- Cada uno presta su plata y quiere recuperarla de alguna manera. Insisto en que si no hay gente que ponga 'lucas' el fútbol no va a funcionar. (Ricardo) Abumohor es el mejor ejemplo de ello, en un principio quizás invirtió mucha plata construyendo un enorme centro deportivo, sumando buenos entrenadores y jugadores, y todo eso le ha permitido ir recuperando esa plata.
- Usted jugó en Everton. Hoy el club viñamarino es controlado por un grupo de empresarios mexicanos. ¿Cuál es su opinión?
- En el caso de Everton tengo varias críticas. Primero, decir que pagar cada treinta días no es ninguna gracia, porque es una obligación de los dueños, pero quizás lo que más me llama la atención es lo poco que se ha invertido en las series menores. Crean corporaciones (Corporación Everton Fútbol Joven), que en el fondo son las mismas sociedades anónimas y con los mismos dueños, para conseguir recursos de la municipalidad. Ahí los controladores o dueños, poco y nada invierten en los más chicos. Ese es un tema que me preocupa, porque la base de los clubes debe ser la formación de jugadores y un mínimo de responsabilidad social.
- ¿Cuál debería ser el camino para superar los inconvenientes que hoy se plantean en el fútbol nacional y su relación con las sociedades anónimas deportivas?
- Hay que buscar una mayor participación de los hinchas, entendiendo que hay varios clubes organizados y que pueden aportar. Además, lo que queremos es que todas las sociedades anónimas que participen en el fútbol sean abiertas, para que sean supervisadas de la misma manera por la Superintendencia de Valores y Seguros, o buscar la forma que aquellas que sean cerradas no sean evaluadas de distinta manera.
"Crean corporaciones (Everton Fútbol Joven), que en el fondo son las mismas S.A., para conseguir recursos municipales. Ahí los dueños, poco y nada invierten en los más chicos" "Son muchas las sociedades a las que poco les interesa tener espectadores en los estadios, ya que se limitan a funcionar con las platas del CDF, produciendo un enorme desapego con la historia de cada uno de los clubes""
Por la vuelta de la familia al estadio
Pablo Prieto adelanta que la próxima semana se comenzará a ver en la Comisión de Deportes y Recreación de la Cámara de Diputados un proyecto de su autoría, en que se solicita que los clubes del fútbol chileno destinen de manera gratuita, al menos un cinco por ciento del aforo de sus estadios para adultos mayores, discapacitados o menores de 14 años. "La idea es que la familia vuelva al fútbol", explica el parlamentario, lamentando que más allá de los miles de millones de pesos que el Estado ha destinado para la construcción de nuevos recintos deportivos "son muchas las sociedades a las que poco les interesa tener espectadores en las tribunas de los estadios ya que se limitan a funcionar sólo con las platas del CDF, evitando subir arriendos o invertir en seguridad ante una mayor concurrencia de hinchas, produciendo de esta manera un enorme desapego con la historia de cada uno de los clubes". El diputado dice que "voy a tener a muchos detractores desde el interior de las sociedades, pero yo legislo para la gente y no para grupos específicos".