"Valparaíso antes tenía torres por doquier y ahora quedamos con una ciudad aldea de dos y tres pisos"
Diversos han sido los análisis surgidos luego de que el Concejo Municipal de Valparaíso aprobara la modificación parcial al Plan Regulador Comunal (PRC) de la Ciudad Puerto, que estableció un límite de nueve metros de altura máxima para las construcciones en algunas zonas altas de los cerros,
La decisión que los concejales y el alcalde Jorge Sharp adoptaron parte de un argumento central: el rechazo absoluto al asentamiento de edificaciones de gran altura en cualquier sector de la ciudad, dando un portazo directo y frontal a la inversión inmobiliaria.
Ante este escenario, Iván Poduje, arquitecto y director del centro de estudios Espacio Público, entregó su opinión en torno al complejo proceso que actualmente vive Valparaíso en términos urbanos.
Con una larga trayectoria como docente en la Universidad Católica, en la Universidad de Chile y en la Universidad de Stanford, Poduje fue claro al puntualizar que, según su opinión, limitar las alturas a la baja traerá más perjuicios que beneficios para una comuna que, tras la discusión del PRC, calificó como "ciudad aldea".
"Creo que la modificación parcial al PRC de Valparaíso ha sido conflictiva, como suelen ser las discusiones de los cambios en planos reguladores, pues hay muchas expectativas y también teorías conspirativas que enredan todo. En este sentido, la declaración de un asesor del alcalde sobre la opinión técnica de dos concejales arquitectos me pareció impresentable", declaró el profesional, magíster en Desarrollo Urbano.
- ¿A qué se refiere con eso?
- Me refiero a que se ha instalado un mal clima de discusión en Valparaíso, con desconfianza y teorías conspirativas por doquier. Un arquitecto hace una propuesta del borde costero y sale otro que es concejal poniéndole un 1,0 como si fuera su profesor. Y luego un asesor del alcalde, Jorge Sharp, insinúa que concejales que son arquitectos proponen normas para beneficiar sus proyectos y eso es inaceptable, pues las personas pueden opinar y proponer sin tener intereses ocultos detrás. Y si insinúas lo contrario, se hace imposible dialogar y avanzar.
- ¿Cuál es su opinión técnica sobre la modificación parcial al PRC?
- Creo que es una modificación sumamente conservadora que opera como un extremo de lo que existía, pues en Valparaíso antes teníamos torres por doquier y ahora quedamos con una ciudad aldea de dos y tres pisos. Y si bien la modificación parcial al PRC resuelve el problema objetivo de las torres, creo que simplifica en exceso la realidad del territorio y homogeniza situaciones muy distintas, aplicando alturas parejas en territorios muy amplios sin considerar la capacidad de las calles, las vistas, las quebradas, las terrazas, etcétera.
- ¿Eran los nueve metros la altura máxima pertinente para el polígono en discusión (zona alta de los cerros de Valparaíso)?
- Eso es muy relativo. Piensa que estamos hablando de casi 1.200 hectáreas y 80 mil habitantes, es como una ciudad intermedia de Chile. En este sentido, en calles amplias sin conflicto de vista puedes tener perfectamente 18 metros, en zonas más residenciales y con pendientes fuertes 7 metros y en otras más próximas al plan es posible poner 12 o 15 metros. Sin embargo, no vi la propuesta de vialidad, que es tanto o más importante que la altura, y tampoco las zonas de riesgo que se consideran para excluir o permitir los asentamientos.
- En Valparaíso, las edificaciones en altura están totalmente desestimadas en cualquier sector de la ciudad. ¿Es esa una buena política de desarrollo urbano?
- No es una buena política, ya que toda ciudad necesita áreas de mayor altura para acomodar hogares pequeños o de clase media, o segundas viviendas, o para aprovechar infraestructuras de mayor capacidad. Ciudades con muchos recursos, como Venecia, Barcelona o París, pueden regular más, pero incluso ahí las alturas en avenidas son de 20 o 30 metros. Insisto en que nos fuimos de un extremo a otro y eso no es bueno y tampoco me parece que grupos de presión amenacen a concejales e impongan una norma que afectará a 80.000 personas.
- La discusión de la modificación parcial al PRC se alargó por más de un año. ¿Qué se puede esperar de la discusión general del Plan Regulador Comunal porteño?
- Es bien incomprensible que Valparaíso aún no actualice su Plan Regulador Comunal completo, que se supone estaba muy avanzado. Y por lo tanto, sería bueno que el municipio explique qué pasó con eso, más aún considerando que fue una consultora que demandó recursos y no puede quedar botada, salvo que el municipio lo diga, pero no he escuchado nada. Estos cambios parciales que reaccionan a conflictos por alturas dejan muchas cosas afuera y, además, aún no hemos visto el plano de vialidad para las zonas altas de difícil acceso, la delimitación de quebradas y zonas de riesgo, el estudio de suficiencia de equipamientos o alguna regulación sobre el borde costero. Con todo lo que se habla del borde costero, es inexplicable que el municipio no tenga una sola propuesta al respecto en su PRC o en algún plan de inversión.
- Entonces, ¿cuáles son las expectativas en torno a la conformación del PRC a nivel general?
- Creo que el alcalde Jorge Sharp se ha sobregirado con las expectativas, pues calificar de "proceso histórico" una modificación del Plan Regulador Comunal que reduce alturas me parece un exceso retórico. Viña del Mar ha aprobado seis cambios similares en tres años y no vi a nadie diciendo que se cambiaba la historia.
- ¿El tema fue utilizado con fines netamente políticos?
- Considero que en vez de hacer estos anuncios, sería bueno que el municipio se comprometa con una fecha concreta para actualizar su Plan Regulador Comunal general y precise qué pasó con todos los estudios que se hicieron. Recordemos que la Ley de Aportes fue aprobada y ahí se exige un PRC actualizado con un programa de inversiones para mejorar el espacio público, pues planificar no es sólo regular a la baja lo que hacen los privados, sino que también es proponer proyectos propios que cambien la realidad y resuelvan los enormes problemas que tiene Valparaíso. De eso, hasta ahora, hemos visto poco salvo por la limpieza de los espacios públicos que ha sido un acierto.
"Calificar de 'proceso histórico' una modificación del PRC que reduce alturas me parece un exceso retórico. Viña del Mar ha aprobado seis cambios similares en tres años y no vi a nadie diciendo que se cambiaba la historia""